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".Y a veces un pecado es la
entrada al paraíso..."Juan Miguel Zunzunegi
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41
—Tengan mucho cuidado —Le dió un fuerte abrazo la señora Angeline a los tres chicos —Si algo pasa, por favor avísenos.
—Lo tendremos —Jen abrazó a su padre —No se preocupen.
Me despido de ellos con un par de abrazos, aún se les hacía extraño verme de un rato para otro tan diferente, pero al menos ambos me habían dicho que me veía genial y que pasaría desapercibida.
Al momento de salir me percate que la lluvia ya había parado, pero lo nublado aún seguía, ya casi oscurecia y si no nos apurabamos se nos haría de noche antes de que nos diéramos cuenta.
—Oigan —me detuve frente a las rejas que se estaban abriendo —¿Por dónde iremos? La vez que entré por error me fui en auto por qué me quedaba lejísimos.
—¿Entraste a ese lugar? —preguntó Jen asombrado
Asentí con la cabeza.
—Entonces debes saber sobre la cerca que nos divide ¿Cierto? —indagó Brais cruzando la reja —Para no ser descubiertos y no vernos como sospechosos, la cruzaremos.
Entonces conoce sobre ello...
Caminé a su lado totalmente sorprendida, ni siquiera sabía el por qué me asombraba tanto si en realidad era bastante normal que ellos ya lo supieran, después de todo, también eran parte de ellos.
Levanté la mirada que tenía sobre el suelo para ver a Yannick. Por su bien, le habían hecho también un cambio al igual que a mí.
Le pintaron el cabello de negro y todo su flequillo se lo dejarón cubriendo la frente, de hecho casi le cubría los ojos, también le habían dado el mismo pupilente azul como el mío, solo que se lo habían puesto inversamente: su ojo izquierdo era azul y el derecho café.
Había preguntado el por qué de su cambio a Brais y su respuesta me había helado la sangre:
—Si lo ven, lo reconocerán. —volteo a ver a Yannick, el cual platicaba con Jen mientras le pintaban su cabello castaño —Y podría llegar al oido de sus padres. Ellos son capaces de encerrarlo de nuevo. Creen que es una deshonra tener a un hijo "diferente" a lo que para ellos es "normal"
Asi que a partir de ahora el era mi hermano y aún que fuera algo tonto, sentía que nos parecíamos, de alguna manera. Ambos estábamos utilizando un cubrebocas negro, eso nos servía mucho mejor para que no nos reconocieran, no sería algo raro, Jen había dicho que muchos lo utilizan.
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Brais: Un pueblo con seres oscuros y sangrientos
Mistério / SuspenseLos asesinos más peligrosos viven junto con los pobladores. Todos ellos tienen algo en común, y eso es la enfermedad que llevan en los ojos, lo que los hace más fáciles de identificar: la heterocromía. Sus víctimas son asesinadas a sangre fría y no...