26. Kelly VI

778 62 8
                                    


- Y me dijo que no podía haberme enamorado de él con "un par de besos". - Terminé de relatarle.

Negan movió la cabeza de lado a lado de forma incrédula. - Yo no le deseo el mal a nadie... - Comentó de forma tranquila. - ...pero ojalá entre una horda a la comunidad y le devoren vivo. - Sentenció con tono duro. - Ningún niñato hace daño a mis sobrinos y vive para contarlo. 

Sonreí y le abracé lo mejor que pude a través de los barrotes. - Gracias.

- ¿Por desearle el mal? - Arqueó una ceja. - ¿Crees que puedes conseguir un par de mechones de su cabello y algunos alfileres? 

- No le harás vudú.

- Oh no no, solo quiero tejer un... jersey. - Sonrió de forma inocente y reí. - Con sus propios intestinos. - Añadió a lo que rodé los ojos. 

- Vuelvo a repetir, gracias, por estar siempre para mis hermanos y para mí. Sé que nunca te hemos dicho pero... Negan, para nosotros eres lo más parecido a un padre que tenemos.

Una sonrisa de orgullo y alegría llenó su cara. - Me alegra oír eso porque aunque os llame sobrinos también os considero como mis hijos. - Sus ojos se llenaron de agua y parpadeó rápidamente. - Rick hizo un muy buen trabajo con vosotros, estaría muy feliz de ver en lo que os habéis convertido. Y Carl también.

Volvimos a abrazarnos. - Casi se me olvida, Ricky robó unos chocolates para ti.

- Ese muchacho. - Rio. - Volviendo al tema de antes. ¿Cuándo vas a hablar con Henry?

- ¿Nunca?

- ________, el chico se merece una respuesta. Llevas dos semanas evitándole.

- Es que aún no sé qué decirle. 

- La verdad.

- ¿Y cuál es?

- Lo sabrás cuando lo tengas de frente.

Suspiré. 

¿Por qué todo tiene que ser tan complicado?


***


- Henry. - El muchacho saltó en su sitio casi tirando el hierro ardiente que sostenía con unas pinzas de metal. - Perdón. - Hablé divertida ante su reacción.

- ________. - De forma nerviosa volteó en mi dirección y se empezó a arreglar el cabello. - No esperaba encontrarte aquí.

- He venido a verte. - Con mis manos lo peiné lo mejor que pude.

- ¿A mí? - Sonrió sonrojado. - Eso es genial.

- Tienes ceniza en la mejilla.

- ¿Aquí? - Se frotó con las manos sucias haciendo que más partes de su cara estuvieran manchadas.

- Así es peor, tienes las manos llenas de hollín. Déjame a mí. - Agarré un paño y lo remojé en agua para empezar a frotarle la cara. - ¿Qué? - Susurré cuando noté que no apartaba los ojos de mí.

- Pe-perdón. Solo me gusta mirarte. - Hizo una pausa. - Prometo que sonó menos espeluznante en mi mente.

Reí. - No es espeluznante, es dulce.

- Pero imagínate que te lo dice un señor de 60 años.

- Ahí sí me daría miedo.

- Oh bella __________. Me gusta mirarte mientras duermes. - Puso voz de anciano y no pude evitar estallar en carcajadas.

The Walking Dead - One ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora