Adrien esbozó una sonrisa cortés para la recién llegada invitada, una joven programadora. Nathalie susurraba el nombre de cada invitado para que los inversionistas supieran exactamente quien era a quien buscaban.
Esperaba con ansias a especialmente dos personas, y movía sus dedos con ansiedad, expectante.
Una cara familiar cruzó el rellano y lo miró con felicidad.
- ¡Hola, Adrien!- saludó, entusiasta.
Él salió de su letargo a los pocos segundos, y le devolvió el saludo.
- Hola, Marinette.
Su padre dió un paso al frente, para sonreír ante los demás millonarios.
- Ella es la prometedora diseñadora de la cual les hablé: Marinette Dupain-Cheng.
Algunos se mostraron interesados, y estrecharon manos con la joven para presentarse. Ella sólo sonrió vagamente, sin separar la mirada de su amigo, que miraba ansioso la entrada.
- Hijo, deberías entrar a la fiesta con la señorita Dupain-Cheng.- sonó como una sugerencia, pero evidentemente, no lo era.
- Claro, padre.- asintió Adrien, mientras la pelinegra tomaba su mano con entusiasmo y lo jalaba para entrar.
Antes de que el rubio sintiera una mano en su hombro.
- ¿Ibas a entrar sin mí, Agreste?- preguntó el coreano en un susurro en su oído, con una sonrisa.
Él sonrió y se ruborizó, mientras se giraba para ver el rostro del mayor.
- Kim Shade: famoso idol en Corea del Sur, forma parte de un grupo.
El muchacho se separó de el rubio para hacer una reverencia ante los inversionistas y saludar en coreano. Vestía un traje gris y camisa blanca, y unos lentes de contacto azules. Había desteñido su pelo para que llegara a un color platinado que combinaba con su piel blanca.
Cuando el ojiverde lo vió por fin, con su nuevo aspecto, separó un poco los labios, con sorpresa, antes de que su amiga le levantara el mentón con una sonrisa burlona.
- No vayas a babear, Adrien. Saludarás a tu novio luego. Vamos adentro...
Él asintió, y la siguió. Adentro estaba oscuro, y unas luces de diferentes colores iluminaban el lugar, parecido a un antro. Todos vestían de manera elegante, y hablaban de temas aburridos como la economía, o discutían a cual de los jóvenes favorecerían para su carrera universitaria.
Se sentaron en una mesa redonda, con el apellido "Agreste" en una pequeña hoja de papel. Miraban a las parejas bailar, y Adrien se puso de pie para tenderle la mano a su amiga.
- ¿Bailas?- preguntó, sonriendo.
Ella fingió pensarlo un momento, para asentir, entusiasta. Ambos muchachos, tomados de la mano, se dirigieron a la pista de baile bajo unas cuantas miradas.
La de un asiático, por ejemplo.
Bailaron al inicio intentando ser elegante, pero como la torpeza de Marinette impedía un poco esto, optaron mejor por sentarse en la mesa de nuevo entre risas. Vieron a alguien ahí sentado, esperándoles.
- ¡Shade! ¿Me esperaste mucho tiempo?- preguntó el rubio, preocupado.
- No te preocupes.- esbozó una perfecta sonrisa que hizo que Marinette temblara un poco.- ¿Me presentas a tu amiga?
- ¡Claro! Ella es Marinette Dupain-Cheng, la mejor diseñadora que he conocido.
Marinette saludó con una reverencia, nerviosa.
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ᴄᴇʟᴏꜱ - Adrien Agreste x Luka Couffaine
Hayran KurguCuando recién se conocieron, ninguno de los dos se esperaba el amor que surgió después. Y de ahí en adelante, se preguntaban como habían vivido sin la cercanía del otro. En este fanfic no existen los Miraculous. Contenido Homosexual.