Storm Blue || Riverdale

7.2

Es un cabron... pero que bueno esta. 

Jen Jones
—Es definitivo —susurré—, con él me voy a casar.

No pasó ni un segundo que dije eso cuando sentí un manotazo en la nuca que me reinició el sistema operativo.
Negan acababa de irse del remolque luego de tomar un par de cervezas. En ese momento yo estaba sola con Fp.

—Más vale que te comportes, Jenna —me regañó Fp con mala cara—. No te quiero ver a menos de diez metros de Negan.

Diez metros era una distancia razonable, no me molestaba tener que observarlo a diez metros de distancia. Aunque...

—De tan lejos no podré respirar su delicioso aroma —pensé en voz alta mientras acariciaba mi pobre cabecita.

—Un comentario más de esos y te encierro en el baño —amenazó Fp con una voz tan seria y aterradora que me hizo querer huir.

Y bueno, técnicamente lo hice, no sin antes retarlo un poquito.

—No hay duda, Fp. Entre más viejo el vino...

No pude ni siquiera terminar cuando Fp se abalanzó sobre mí como un toro furioso. Claro que para cuando el dió el primer paso, yo ya me había encerrado en el cuarto.

•••

—¿Qué tan guapo? —preguntó Betty divertida.

—Sí es al menos la mitad de guapo que tu papá, yo misma iré a pedirle su contacto —dijo Cheryl dejándome perturbada.

Mi cara de horror apareció al instante.

—¡Cheryl!

—Vamos, JJ. No creo que seas ciega, Fp esta hecho un cuero —siguió—. Top tres de los padres más sexys en Riverdale.

—¿Top tres? —cuestionó Betty.

—En el primer lugar Tom Keller. Luego Fp Jones y por último, pero no menos bueno, Fred Andrews.

—Gracias por ese perturbador vistazo a tu cerebro, Cheryl —dije dándole un largo sorbo a mi botella de agua—. Pero volviendo al tema...

—Jen Jones —mi nombre resonó por toda la sala de descanso—, sabía que estarías aquí.

Cuando giré para ver quien me llamaba me quedé paralizada. Negan caminaba hacia mí con una gran sonrisa, mirando de vez en cuando a las chicas que pasaban a su lado.

—Eres de la edad de Jughead ¿verdad? —cuestionó cuando llegó frente a mí. Yo sólo asentí perpleja, no esperaba verlo ahí—. Lo sabía.

No pude reaccionar muy rápido, pero Cheryl sí que pudo. Antes de que Negan pudiera decirme otra cosa Cheryl se levantó del sillón y extendió su mano hacia él, diciéndole su nombre. Casi deseé que apareciera Topaz en ese momento y se la llevara.

Estaba apunto de intervenir cuando, por segunda vez, mi nombre resonó por toda la sala. Se trataba de Ralph y William, ambos se acercaron a mí rápidamente sin siquiera notar a Nega, Betty o Cheryl.

—Tenemos que hablar seriamente de Malachai —soltó William de primero.

—¿Malachai? —cuestionó Negan interesado—. ¿El líder de los Diablos?

Quise responder, pero Ralph me interrumpió.

—Es muy lindo ese romance que tienen y eso, pero aún no podemos confiar en él. Por lo tanto, no tenemos donde vivir.

—Vale, entiendo, pero...

—Sabemos que se han estado arreglando los remolques que cayeron en los disturbios —siguió William sin dejarme hablar.