Across the Balcony

CAPITULO 8

Lo efímero de nuestra existencia puede ser vinculado con un reloj de arena, en donde todo aquello que sucede y que está pasando es algo que irremediablemente también pasará y jamás volverá, es inevitable. Las arenas siempre fluirán, no importa lo que suceda a nuestro alrededor, independientemente de nuestras acciones, el tiempo no puede ser desafiado.

Tanto que hacer y que decir, pero mañana es tarde, cada persona debe hacer que cada minuto que tiene en su vida dure más, aprender a olvidar y seguir, porque no tenemos mucho tiempo, tenemos que ser un cambio e intentar de hacer nuestro mundo un lugar mejor.

Puedo escuchar el tic tac de mi vida pasar, tengo muchos arrepentimientos en mi existencia y a lo mejor deseaba guardar lo mejor para el final sin darme cuenta de que puedo perder, el tiempo se agota y lo seguro es que no se puede recuperar.

Mi apartamento está lleno de chicos, esperando a que lleguen el resto, jamás pensé que estarían aquí, la urna de mi hermano aun descansa en el centro del apartamento, no puedo despegar mi vista de él, aún estoy en shock y agradezco tener personas a mi alrededor porque no podría más con la soledad, no sé cómo me siento, todo esto es desconocido para mí y tampoco sé cómo afrontarlo sin quebrarme o dejarme arrastrar por la desesperación.

-Cadie -Halley esta frente a mí, su mano agarra la mía, sus verdosos ojos están vidriosos y me mira con tristeza -no puedo decir que se cómo te sientes, porque tengo mi hermana conmigo -dice mirando hacia donde estaba Dafne con su chico abrazados -pero te puedo dar de mis fuerzas sabiendo con seguridad que es lo que tienes agotado en el momento, y aunque sea poco lo que nos conocemos vamos a estar para ti ahora y siempre que lo requieras, porque eso es lo que todos debemos hacer cuando los amigos se necesitan, obtendrás lo mejor de nosotros sin restricción

-Aun no entiendo el por qué...

-Siempre hay que dar el máximo Cadie, aun con las personas que amamos -dice interrumpiendo mis inseguridades

-Hola Geum -aparece Ahdara junto a Tae Hyo – vas a estar bien, lo siento, no soy buena con esto, pero juro que no me apartare de ti hasta lograr verte estable, y que puedas resistir todo esto por lo que estas pasando

Asiento con mi cabeza, se había formado algo en mi garganta impidiendo decir palabra alguna, me levanto y me dirijo a la cocina por algo de té para los que llegaban

-Déjame hacerlo -su voz grave me hace saltar del lugar

Volteo y veo a Agust In tomar la tetera y empezar a repartir en cada pocillo

- ¿Por qué me miras? -gira y me queda viendo

-Lo siento, aun me cuesta leerte

Sonríe por primera vez - ¿Qué? ¿eres psíquica?

-No me refiero a eso

-Se a que te refieres -me mira en silencio y luego sonríe de nuevo -no soy lo que mi rostro refleja Cadie, no te confundas, las personas se equivocan conmigo, al parecer la primera impresión que se llevan de mi es que soy una persona tosca y repulsiva

-Yo...

-Te daré espacio para que puedas conocerme, soy Seo Agust In -dice estirando su mano -me gusta Halley, mi hobby es la música, no me gusta perder el tiempo en personas banales, me gustan los gatos puedo mirarlos por horas sin aburrirme, practico el baloncesto con los chicos, amo la fotografía y tocar el piano, si quieres saber más solo acércate a las personas

Toma la bandeja de té y se va dejándome espavorida, voy tras él y está entregando las tasas a los chicos, a lo mejor me había equivocado con él, pero ni yo misma me conocía del todo, ¿Cómo quería que conociese a cada uno?