Se burlan de las reinas Parte 19

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Terminamos el trabajo con Rebeca, que bueno que ella pudo terminar de ver la clase, eso creo.

—Porque te afecto tanto ver las imágenes Verónica? Tampoco eran tan fuertes —pregunto Rebeca

—Es que el cadáver con los ojos abiertos me afecto. Solo había visto gente muerta, pero con los ojos cerrados —respondí

—Mas vale que te acostumbres porque sabes que tendremos que ver cosas peores que eso — dijo ella sin saber que era el cadáver de mi hermana, nunca tuve la oportunidad de verla así hasta ese momento

Estábamos esperando en la sala de clases al profesor y club de fanáticas de él comenzó a molestarme. Hablaban en voz alta para que las oyera.

—Las rubias no sirven como policías. ¿Te imaginas que en pleno tiroteo vea sangre y se desmalle? — dijo una morena— los secuestrados tendrían que correr en su rescate.

Y todos se rieron

—No les hagas caso Verónica, solo te tienen envidia porque eres bonita —dijo Rebeca

Y yo no podía defenderme, decir que no me desmayé por miedo si no por el dolor de ver por primera vez, como la dejo el asesino a mi hermana muerta. Y que perdí la conciencia por solo recordar el dolor de ese día y como destruyo por completo a mi familia.

—Si mejor sería que se dedicara a reina de belleza, no entiendo como logro entrar — dijo otra

—Seguro le coqueteo a alguien. ¿No viste ayer como acaparó toda la atención del profesor? Con esa cara de mosca muerta logra lo que quiere — dijo la morena

—Ya cierra tu boca envidiosa! — dijo Rebeca

—Pero si hasta tiene enamorada a su amiga — dijo sarcástica la morena— mira como la defiende.

Entonces me canse de escuchar sus estupideces. Me levanté y fui directo donde estaba ella sentada y le dije.

—Mientras tu piensas que es típico que una mujer se suicide con una escopeta en su boca y hasta bromeas de tan trágico hecho, yo estudie hasta el cansancio para entrar aquí. Das vergüenza ajena como babeas por el profesor, pero jamás te he escuchado decir algo inteligente en esta clase. Lee un poco, existen cosas que se llaman libros tal vez así logres llamar su atención. Y si es verdad que me afecto lo que vimos en clases, pero porque yo si tengo corazón. O acaso no piensas en el sufrimiento de esas niñas, a las que les destrozaron las vaginas para luego matarlas?, No viste la sangre entre sus piernas y que la mayoría tenía menos de doce? Pero claro que no te afecta, seguro a esa edad tu ya eras una experta en hacerle sexo oral a los hombres. Por eso concluiste mal en la escena del suicidio con la escopeta. Proyectaste tu propia vida en la víctima.

Y varios hicieron murmullos de asombro y otros de risa.

Y como la morena no sabía cómo desquitarse entonces me retó

—pronto se viene una celebración donde se eligen reinas, porque no nos representas ya que te sientes tan especial y logras todo con esa cara de rubia hueca? — dijo parándose de su asiento

—Si supieras todo el trabajo que significa concursar en esos certámenes y lo que realmente cuesta, pero que va a saber una ignorante como tu — le dije

—¡Ilústrame, mosca muerta! — me retó

—Todas las fotos que vimos tenían algo en común. Son de casos de niñas y jóvenes que fueron elegidas reinas en diversos certámenes de belleza. Se prepararon con dietas, ejercicios, conocimientos y desarrollando talentos para destacar y ganar una corona. Y eran tan hermosas que este asesino que todavía está suelto se obsesionó con ellas. A veces ese es el precio de esforzarte tanto por verte bonita y convertirte en lo que sueñan los hombres. Y tras todo ese esfuerzo que me consta son de semanas y hasta meses lo único que obtuvieron fue morir de la forma más triste y que no quedara nada sin ser destruido en sus familias. Cuidado con lo que deseas ignorante — le dije y volví a mi mesa.

—Bien hecho, así se hace amiga! — me felicitaba Rebeca

Todos quedaron pensando en lo que dije.

En cuanto entro el instructor le preguntaron.

—De quienes eran esas fotos que vimos cuando la clase se interrumpió? — preguntó Bradly

—Son casos sin resolver de jóvenes secuestradas y asesinadas, por alguien quien todavía no ha podido ser identificado. —dijo el instructor

Y la morena no se aguantó y pregunta — y que tienen en común todas esas chicas?

—Solo que ganaron concursos de belleza — dijo el instructor

Esta vez me dispuse a taparles la boca a todos lo que pensaban que era una rubia sin cerebro.

—Bien que pudieron notar en las imágenes— preguntó el instructor

Levanté de inmediato mi mano para contestar.

—Parece que te sientes mejor Verónica, expláyate dime todo lo que pudiste notar antes de desmayarte— dijo el instructor y saltaron algunas risitas, incluso él disimulaba una sonrisa.

—El asesino es un psicópata que tiene una fijación con niñas y jóvenes reinas, las mata porque las ve como objetos, no siente empatía ni remordimiento. Es hábil y mentiroso al punto que se las llevo estando en lugares públicos. Luego deja los cuerpos sin ningún objeto personal que indique algo de donde estuvieron, porque las escenas del crimen estaban demasiado limpias. Y deja los cuerpos en lugares alejados, a la intemperie y húmedos, todos estaban cerca de fuentes de agua, para acelerar la descomposición de los cuerpos. Dificultando a la policía encontrar cualquier pista que lo delate. Posiblemente el asesino tenga mucho conocimiento en como borrar huellas y manipular escenas de crímenes, ya que son años de muertes sin resolver. Estaríamos hablando quizás de alguien como un policía desquiciado, alguien con los conocimientos que tiene usted — dije y solo escupí todo lo que pensaba porque me molesto que él también estuviera riendo, como si yo no fuera capaz, lo hice por la memoria de Lucia. Nadie tenía el derecho de reírse de esto ni tomar tan a la ligera su sufrimiento.

Y terminé de hablar y varios trataron de ahogar risas mezcladas con asombro por mi osadía de comparar al instructor con el psicópata.

—Excelente análisis Verónica, tengo entendido que los policías que llevan el caso piensan igual que tú, pero te quitaré algunos puntos por considerar a tu instructor en la lista de sospechosos, ósea, llamarme indirectamente policía desquiciado — y tanto él como varios más rieron y Rebeca estaba roja y sentía toda la vergüenza que no sentía yo. Porque yo sentía rabia.

Después mientras tomábamos apuntes, note que Bradly me miraba a cada rato. Pero yo no podía corresponder sus miradas. Le deje claro que todavía siento que un novio me espera.

— Verónica como te atreviste a comparar al instructor con un policía maniático — dijo Rebeca

—Porque él también se estaba riendo. ¿No lo notaste? A veces solo tienes que escupirles en la cara lo que piensas —le dije

—Ojalá y no se le haga costumbre quitarte puntos en tus exámenes — dijo Rebeca

—No creo que sea tan tonto para arriesgar su trabajo por esta tontería —respondí



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