FARSANTE

"NO ESTOY LISTO"

~CAPÍTULO 53~

Rish y Jade se van por comida dejándonos solo a Tanit y a mi.

—¿Que hice ahora?— pregunta Tanit sentándose en el borde de la cama.

—Tu no hiciste nada...— digo cogiendo su mano y sintiéndome estupido por tratarla así.

—¿Estas bien?— pregunta poniendo una mano en mi mejilla

—Me acabó de enterar que Cris sabía quien mató a mi hermana... casi muero y pensé que te herían, creo que no.—me abraza

—Estoy bien, ahora solo tienes que recuperarte, badboy y volveremos a la normalidad.— dice en mi pecho, la acaricio el pelo y le abro espacio para que se acueste a mi lado.

Me abraza y apoya su cabeza en mi pecho mientras su pierna encima de las mías, abrazada a mi como un koala.

—No te vayas ¿si?— pido y ella me mira y sonríe

—No me iré.— dice

—Lo siento— digo quiero decirle la verdad... toda la verdad.

—No te disculpes más, me has salvado la vida ahora concéntrate en ti y no en los demás.— dice—Te cuidare por que se que no me harás caso y seguirás queriendo cuidar a todos— dice y me sorprende que sepa como soy.

—¿Vemos una peli?— preguntó mientras acaricio su cintura con el brazo que la rodeo.
Ella enciende el televisor mientras yo me concentro en su respiración tranquila.

—No me molesta que me mires, pero ¿seguro que quieres ver una peli?— pregunta

—¿Y que si no?—prehunto

—Podríamos hacer otra cosa... tal vez ¿leer? ¿Escuchar música sin hacer nada?— pregunta

—Me gusta la segunda opción—digo y ella apaga el televisor, se reincorpora y busca en su chaqueta unos audífonos y el móvil. Coloca una playlist creada por ambos una noche de aburrimiento.

Nos acostamos en la cama mirando el techo mientras nuestros brazos se tocan y el silencio llenado por la música es placentero y reconfortante.

Cierto mis ojos mientras dejo que mi mano entrelace la mano de Tanit con la mía, ella deja que nuestras manos se entrelacen y aprieta lo que me hace sonreír.

¿Por que no es tan fácil como es ahora estar con Tanit? ¿Por que no nos quedamos aquí para siempre?
Por que la vida no es así, no es fácil y tampoco feliz.
Gracias, conciencia... que se note la ironía.
Si si, si se nota.

—Deberíamos quedarnos aquí para siempre..— dice Tabro

—Estaba pensando justo en eso.—digo abriendo los ojos y girando la cabeza para mirar su perfil, tranquilo y sereno con los ojos cerrados y su belleza al límite.

—¿Podrás odiarme?— preguntó y ella gira su cabeza para mirarme confusa

—¿Odiarte?— pregunta incrédula—Estoy enamorada de ti, no te odio pero me duele que nl sientas lo mismo que yo...—

—Tanit, te aseguro que puedo sentir mucho más pero no quiero aceptarlo no estoy listo...—

—Te esperaré— dice segura lo que me destroza el corazón

—¿Y si te cansas?— preguntó

—Traeré una silla, música, televisor, libros y comida para esperarte.— dice y sonrió, se que esto es increíble... y tal vez es por eso que se que nl va a terminar bien, por que la vida no es así...

—Eres increíble ¿lo sabias? Y perfecta— digo y ella se sonroja apartando la vista de mi.—Por favor créeme, eres increíble, vales toda la jodida pena y eres una jodida perfección.— digo apoyándome en mi codo y poniendo mi mano en su barbilla para que me mire.

—Yo solo quiero un Jack Ross— dice de repente y la miro confuso.

—¿Que?— pregunto por que no tengo ni la menor idea de quién es Jack Ross.

—El de antes de diciembre ¿el tío graciosa? ¿El de los recados? ¿No te suena?— dice sentándose quedamos frente a mi, bueno al menos la cama no es tan pequeña.

—No— digo pasándome la mano por el pelo para despeinarlo

—Joder, el de antes de diciembre el que hace pelis, el tío bueno.— dice y niego ella bufa—bueno pues tendrás que leerte ese libro—

—Por ti si me lo leo— digo sin dejar de mirar sus ojos y sus labios, ella sonríe y se acerca a mi para dejar un casto beso sobre mis labios, cierro los ojos y sonrió cuando me da otro.

—Dios, parecéis dos novios primerizos, de verdad— dice Jade entrando por la puerta y sentándose en la silla libre, nos quitamos los auriculares y Jade enciende el televisor.

—¿Es que no te duele ese hueco que tienes en la espalda?— pregunta Jade al verme mover como si no tuviera nada

—Me pincha un poco pero no es nada.— digo y él sonríe a su comida.

—¿Siempre estás comiendo?— pregunta Tanit a Jade

—Mi amor es la comida no Tyler.— dice Jade y nos carcajeamos.

—¿Cuando podemos irnos a casa?— preguntó mientras Tanit se acuesta a mi lado y yo apoyo mi cabeza en su pecho para que acaricie mi cabello.

—Mañana o esta noche.– dice Cris entrando por la puerta

—¿Y ya? ¿No le hacen revisión o algo? Le acaban de atravesar con una bala.— dice Tanit

—Tyler a pasado por cosas peores, te aseguro que este es un rasguño comprado con lo que le ha pasado a lo largo de sus 22 años.— dice y ruedo los ojos

—¿Nos podemos marchar ya?— preguntó levantándome de la cama como si no tuviera nada.

—Si insistes pueden irse ahora mismo.— dice y aprovechó para quitarme todos los cables, coger mi ropa y entrar al baño para cambiar la bata de hospital.

Me coloco el pantalón pero antes de colocarme la sudadera me miro al espejo l espalda. Va a quedar una cicatriz más arriba de la cintura en la espalda, hay varios puntos... sanara rápido.

Me coloco la sudadera y salgo de allí pasándome la mano por el pelo, cojo el abrigo y me lo coloco o encima de la sudadera.

—Vámonos.— digo mientras abro la puerta

—Está pálido, todavía le falta recuperar sangre yo digo que nos quedemos hasta esta noche— dice Tanit preocupada

—No, vayámonos.— digo para luego mirar a Cris—Que Rish ande con cuidado y que nos estaremos comunicando, ya casi estamos por terminar.— digo y algo de allí seguida por una preocupada y cabreada Tanit, y un Jade feliz y entretenido con su comida.

Bajamos juntos al aparcamiento donde están Max, Ash y Rish esperándonos, nos despedimos y acordamos con Rish el plan de las pruebas para la cadena perpetua a Grinter.

Nos metemos a una camioneta negra con chofer y nos llevan a casa. Tanit no me di dije la palabra y se cruza de brazos enfadada, está preocupada y lo entiendo pero no es para que se enfade...

—Como te pase algo Tyler te juro que yo misma te mato.— dice y sonrió

—Vale pero que me incineren.— digo y ella rueda los ojos.—Vamos, Preciosa, que no le va a pasar nada, estoy bien.— digo poniendo mi mano en su pierna.

—Se trata de tu salud, Tyler.— dice mirándome

—Lo se, y estoy bien.—La tranquilizo y ella mira por la ventana.