єℓ мοτινο ∂є иυєѕτяο νιαנє

ᶜᵃᵖⁱ́ᵗᵘˡᵒ ⁶⁰

Cuando el festival Irodori hubo terminado, fue el momento para empacar todo y despedirse, pues seguramente no volverían a la región de la eternidad en un largo tiempo.

A todos les dolió la despedida, más a Yoimiya pues se había encariñado mucho con el pequeño sol de Mondstadt.

La despedida de los niños también fue emotiva, los seis pequeños se habían vuelto muy unidos, pero Sayu debía quedarse en Inazuma, Qiqi, Diona y Klee debían regresar a sus respectivas regiones y también Teucer, debía cumplir la promesa que hizo con su hermano, la cuál consistía que el debía regresar a casa en cuanto el festival terminase.

Los demás habían regresado a Mondstadt, no sin antes haber dejado a Qiqi con Baizhu.

- Es hora de ir hacia la sima- Comento Paimon algo emocionada.

- Si, una nueva aventura nos espera- Le respondió Lumine.

El par de chicas milagrosamente, tenía algo de tiempo solo para ellas, pues los varones no estaban cerca, así que había aprovechado para platicar un rato.

- Lumine... ¿Cómo te sientes?

- Me siento cansada Paimon, creeme que la sola idea de salvar otra nación suena agotadora, y eso me retrasa mucho, yo solo quiero encontrar a mi hermano, no quiero ser una heroína- Contesto la rubia, el tono de voz que había usado, confirmaba lo que decía.

Paimon lo había notado, los momentos de felicidad verdadera habían sido breves.

- Y has pensado ¿Qué va a pasar con tus enamorados?

- No lo sé, ellos son muy lindos y atentos y creo que me atraen físicamente, pero no sé si esté lista para afrontar mis sentimientos o para tener una relación y aunque así lo quisiera,

- Veo que tu cabello está un poco más largo- Comentó tratando que la rubia no pensará más en ello.

Lumine estiró su mano solo para tomar un mechón de su cabello.

- Es verdad, no lo había notado.

Ella mentía, si que lo había notado pero cuando intento cortarselo no pudo.

- Con que aquí estaba mi hermosa Caballera honoraria- El moreno llegó con las chicas con una sonrisa brillante- Ya tenemos todo listo para partir.

- Entonces vayamos a despedirnos de todos.

Kaeya le tendió la mano a la rubia quien lo acepto gustosa.

(•••)

Cuando llegaron a la sede de caballeros, todos ya estaban ahí esperándolos.

- Bueno, es momento de irnos.

- No pueden quedarse más tiempo?- Suplico Klee.

- Lo siento Klee, pero debo buscar a mi hermano, pero te prometo que vendremos a verlos.

Klee asintió y fue hasta Kaeya y Albedo para abrazarlos.

Los mellizos lloraron cuando Lumine los abrazó y les dió un beso en la frente.

No había duda de que ellos también se habían encariñado con la viajera.

Poco después se teletransportaron hasta hasta Liyue.

.
.
.

- Tengo una pregunta- Dijo Bennett de la nada.

- ¿Que es Bennett?

- ¿Por qué vamos hacia las minas de Liyue?

- Eso es por qué Ayato tiene que hacer una investigación, y Lumine tiene un encargo que ha estado posponiendo desde hace un tiempo- Le explico Paimon.