chapter two: art class

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capítulo dos: clase de artes.
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Cualquiera que conociera a Morgan podría decir con certeza que la chica odiaba la impuntualidad

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Cualquiera que conociera a Morgan podría decir con certeza que la chica odiaba la impuntualidad. El tiempo le parecía la pertenencia más preciada del ser humano. Era justo por eso que, al despertar 10 minutos más tarde de lo habitual, su día se volvió un desastre, pues fue el inicio de una serie de eventos desafortunados.

Al sentir que ya había dormido demasiado, abrió sus ojos de golpe y se descubrió para ponerse de pie con un solo salto. Atolondrada, limpió un poco de saliva de su mejilla con la palma de su mano y corrió a la cocina.

─¿Por qué no me despertaron? ─recriminó, rodeando la mesa para salir hacia el patio trasero.

Su madre, que estaba sentada en la mesa con un café en su mano izquierda y un cigarrillo en la derecha, cerró sus ojos un momento. Había olvidado por completo que tenía que despertarla.

─Voy a llegar tarde─se escuchó el lloriqueo de Morgan cuando volvió a entrar a la casa y fue directo a su habitación.

─Cariño, la escuela no va a desaparecer porque llegues unos 15 minutos tarde─trató de animarla Joyce, viendo como su hija intentaba abrir la puerta del baño─. Se está bañando Will.

─Genial─masculló, dejando caer sus brazos y cabeza con dramatismo─. Muévete, Will, tengo que entrar─gritó pegándose a la puerta.

─¡Acabo de meterme! ─exclamó el menor desde adentro.

Morgan cerró sus ojos e inhaló aire para relajarse. Tenía un horario estricto justo por eso; solo hacían falta 10 minutos para que todo saliera mal, o al menos así lo sentía ella.

Abrió los ojos cuando sintió una mano en su hombro. Joyce se había levantado para ir a su lado; sabía que el estrés constante era un gran problema en la vida de su hija, y no sabía cómo ayudarla, así que solamente podía darle su apoyo.

─Necesitas relajarte─le dijo firmemente cuando Morgan la volteó a ver con cansancio─. Los voy a llevar yo, así que no llegarás tarde.

─¿No vas a ir a trabajar? ─preguntó confundida, arrugando sus expresivas cejas. Joyce frunció su nariz con gracia y negó suavemente.

─Me dieron el turno de la tarde. Peter se enfermó, lo que significa que tiene resaca.

Morgan soltó una risa nasal e hizo su cabeza hacia atrás; eso generó una sonrisa en su madre, quien amaba escucharla reír.

Morgan soltó una risa nasal e hizo su cabeza hacia atrás; eso generó una sonrisa en su madre, quien amaba escucharla reír

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THE SONG OF LOVE-STEVE HARRINGTONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora