Trans Boi

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La mirada intensa de Smaug no dejaba de perforarlo desde que despertaron de la siesta. Bilbo podía sentirla clavada en su persona, aún si el mayor quería disimular moviendo la cabeza de vez en cuando, pero sus ojos siempre terminaban sobre él. Bilbo suspiró y le sonrió dejando de lado el libro que estaba leyendo y girando levemente la cabeza para verlo.

-Tienes preguntas, ¿no?

-....

-Está bien, puedes hacerlas

Smaug apretó el abrazo alrededor de Bilbo y pegó mas su pequeña espalda a su pecho. La cicatriz en su pectoral ardía, se preguntaba si las de Bilbo también dolían. Se preguntaba muchas cosas, pero no quería incomodarlo abordandolo con tantas preguntas, ya debió pasar por eso en su momento.

-Solo una

-Adelante

-¿Por qué la cicatriz de la pierna?

-¿Huh?

-Si tu operación fue una extracción..- la mano de Smaug se posó suavemente en el pecho de Bilbo, -¿para qué sacar más piel de la pierna?

-Oh, bueno, eso es porque soy hombre

-...

-Y al ser hombre me gustaría tener un cuerpo mas completo

-...

-Tener cosas que antes no tenía..

Smaug frunció el ceño y miró a Bilbo desde arriba, pasando por su pecho hasta la entrepierna. Entonces creyó entender.

-¿Tienes pene?

-Oh por Dios

Bilbo se cubrió el rostro de vergüenza y soltó una risa nerviosa. Asintió levemente con la cabeza y apartó las manos para ver a Smaug.

-Sí, sí tengo

Smaug abrió la boca para hablar pero Bilbo se le adelantó.

-La operación fue hace unos años así que no se siente nada raro, no duele y ya es completamente funcional, para todo

-Pero nunca haz..

-Nunca tuve relaciones

-¿Y tú mismo?

-Pues...no

-¿Ni por curiosidad?

Bilbo torció los labios y posó sus manos sobre los brazos protectores de su novio bajando la mirada.

-Esto es algo que yo quise, pero aún si era mi deseo, el tener un cuerpo diferente en un abrir y cerrar de ojos...da miedo. Mirarte al espejo y sentir que finalmente eres tú mismo pero al mismo tiempo verte diferente a lo que estás acostumbrado desde nacimiento...Estaba feliz pero asustado, no quería tocar algo que, aunque era mío, se sentía ajeno al principio

Smaug sintió el agarre en sus brazos con mas fuerza.

-Contrario a lo que uno pensaría, estuve con depresión los primeros meses. Me costó adaptarme a mi nuevo cuerpo. Como una madre que cae en depresión al dar a luz, por mas que ame al niño, no le permiten ver al bebé o no lo quiere hacer hasta mejorar mentalmente, ya que por instinto animal podría matarlo

-¿Tenías miedo de odiar tu cuerpo si lo veías?

-Tenía miedo de estar equivocado. De verme como soy y darme cuenta de que fue un error, de que los demás tuvieran razón y solo fuera "una etapa". Así que para responder a tu pregunta, nunca me he tocado por miedo a...desconocerme

Bilbo sintió a Smaug ocultar el rostro en el hueco de su hombro y cuello y hacer mas apretado el abrazo. Creyó que era una simple muestra de afecto, pero lo recorrió un escalofrío cuando el mayor comenzó a lamer y dejar besos a lo largo de su cuello.

-¿Qué haces?

-Te amo

-...

Bilbo intentó separarse del mayor pero el abrazo se volvió un amarre y le fue imposible alejarse.

-¿Qu-Qué dijiste?

-Te amo

-Si,uh... ¿Po-Podría ver tu rostro mientras lo dices?

Smaug lo soltó y Bilbo inmediatamente se arrastró al otro lado del futón.

-Okey...Dilo

Smaug se quedó callado, mirándolo fijo. Bilbo se mojó los labios y se acercó un poco.

-Dilo

-...

Se acercó otro poco más.

-Smaug, dilo

El mayor estiró la mano y una de sus largas uñas acarició la mejilla del Bilbo.

-Te amo, Bilbo Baggins

🔞

Smaug se acercó esta vez y agarró el rostro del castaño con ambas manos, su pulgar acarició la suave piel de su mejilla izquierda y sus alientos se mezclaron por la cercanía.

-¿Me dejarías ser el primero en tocarte?

Bilbo tenía las pupilas dilatadas, los labios separados y latiendo a la espera de un apasionado beso y las manos apretando la tela de la camiseta ajena. Devoraba a su sexy novio con la mirada y se había olvidado de la situación anterior con solo tener su firme mandíbula tan cerca y escuchar esa inesperada y erótica pregunta. Su expresión sumisa y el leve asentimiento que le dio a Smaug fueron suficientes para que el mayor se lanzara a besarlo.

Bilbo cayó en el colchón sobre su espalda y esta vez sus prendas superiores fueron rápidamente removidas. Smaug lamió y besó suavemente el largo de sus cicatrices provocandole espasmos y escalofríos al menor. Sus manos, en una oportunidad única, bajaron hasta el pantalón de Bilbo y tiraron de el para quitarlo de en medio junto a la ropa interior. Contrario a las de Smaug, las manos de Bilbo no estaban ocupadas, simplemente tiraban y despeinaban la cabellera negra que seguía bajando gradualmente por su cuerpo.

Finalmente llegó hasta abajo. Se tomó su tiempo para estimular y apreciar el extrañamente perfecto miembro del menor y todo lo que lo conformaba. Todo era suave y sensible al tacto, el rose de sus uñas contra la piel provocaba placenteras sensaciones en Bilbo que se reflejaban en su voz. No era necesario preguntar, Smaug sabía que Bilbo lo estaba disfrutando, y por eso pasó a lo siguiente.

Bilbo apretó los labios y los separó bruscamente soltando un jadeo de placer cuando su miembro fue tomado por la boca de Smaug. Podía sentir la lengua, el piercing, los labios y los dientes, todos rosando contra su piel en un profesional acto oral.
Y usando eso de distracción, Smaug se abrió pasó por la entrada del menor con un dedo a la vez. El calor se sentía en el cuarto, los sonidos indecorosos llenaban la habitación y el sudor cubría sus cuerpos. Ambos lo estaban disfrutando y nisiquiera habían llegado a la mejor parte.

Smaug se arrodilló una vez Bilbo acabó y se quitó la camiseta. Planeaba seguir con su plan, pero Bilbo, siendo mas erótico de lo que parecía, se levantó rápidamente y lanzó a besarlo arrodillados en el colchón. Las manos del menor paseaban por todo el torso de Smaug, recorriendo cada hendidura formada por huesos y musculosos tonificados. Su favorito era el piercing del ombligo, Smaug lo sabía y Bilbo lo dejó en claro cuando se agachó y comenzó a jugar con el utilizando su lengua. Ignoró a propósito la obvia erección en los pantalones del mayor y jugó con la perla de plata hasta que Smaug no pudo aguantar más.

Volvió a recostar a Bilbo, levantó sus piernas para posarlas en sus hombros, alzó su cadera con fuertes manos y se alineó a su entrada. Bilbo jadeaba a la espera de tan desconocida sensación para él, ansioso por descubrir el placer que movía la mente de Smaug. Cerró los ojos con fuerza cuando sintió presión y soltó su primer gemido cuando fue penetrado. Smaug se quedó quieto unos segundos y comenzó a moverse cuando Bilbo fue capaz de relajarse y abrir los ojos. Ahí se concretó su unión y comenzó una de las mejores noches de sus vidas.

Dark Boyz (Freebatch Crossover)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora