|39|Simplemente no
Sonrisas, lágrimas y miradas enternecidas inundaron la antigua iglesia al momento de en qué las enormes puertas de madera se abrieron dejando pasar primero a la pequeña Cinnia con hermoso vestido carmesí, su cabellos rubio estaba suelto adornado con una carona de dalias rojas sosteniendo su canasta. Ciccio sonrió orgulloso al ver a su pequeña tirando los pétalos de rosas rojas en su camino. Ercole junto con sus dos padrinos sonrieron al ver a la "hermosa" dama de honor entrar, con una corana parecía a la de su ahijada y sosteniendo un ramo sencillo de rosas blancas y rojas. Guido caminaba al altar luciendo su vestido y un aura dominante. Muchos en verdad creían que era mujer e incluso algunos miraron a la "pelinegra" con interés.
Lástima que "ella" tenía su mirada fija en uno de los invitados que le sonreía coquetamente y "ella" le devolvía la sonrisa cosa que no paso desapercibido para Ciccio y Ercole que miraron con enojo al vaquero, pero él los ignoraba por estar perdido en lo hermosa que era su novio. Alberto no pudo evitar reírse en bajo al verlos. No obstante toda su atención cambio de lugar al ver entrar a Luca sostenido del brazo de Alessia que tenía el mismo vestido que Guido, ambos le sonreían a sus respetivas parejas mientras caminaban al altar con el melodioso sonido del piano tocado por Miguel. Ambos "damas" se colocaron al costado de Guido y le sonrieron a Ercole, quien respiro hondo para recibir a la novia.
Todos se levantaron al verla por fin, oculta bajo el velo que alguna vez le perteneció a su madre. Ercole se quedó con la boca abierta al ver a su amada caminando hacia él, sostenida de los brazos de sus padres. Massimo con un elegante traje negro y Lilian con precioso vestido amarillo, se preparaban para entregarle a su yerno lo más preciado para ambos. Alberto podía jurar que era la primera vez que veía a su cuñado y hermana así, alegres como nerviosos; Giulietta quería llorar bajo su velo, no dejaba de sonreírle a su amado y él solo reía nervioso. Jamás en su adolescencia pensó que terminaría casándose con la apestosa Marcovaldo. Ahora no solo sería su esposa, también pronto seria la madre de sus hijos.
Luca y Alberto compartieron miradas y sonrisas, orgullosos por su pelirroja. Aunque estaban felices por ella, no obstante sentían que ellos jamás estarían en su lugar.
Por otro lado Ciccio se acercó al novio para susurrarle:
–Vaya que eres jodido afortunado, Visconti –dijo sin dejar de sonreírle a su amiga.
Ercole esbozó una sonrisa, hasta las mejillas le dolían por tanto sonreír.
–Zitto, stupido.
Guido y Ciccio rieron al escucharlo. Ambos sabían que su maldito amigo se sacó la lotería al casarse con una mujer que no solo era hermosa, sino también valiente e inteligente.
Al momento en que Giulietta llego rio nerviosa al estar en frente de él. Ercole tenía ganas de quitarle el jodido velo para verla, pero se aguantaba. En lo que los padres de la novia abrazaban y felicitaban al nuevo miembro de la familia como también que pedirle de corazón que cuide y ame a su pequeña, Ercole asintió, abrazo a la mujer y estrecho su mano con su suegro mientras que Giulia le entregaba su ramo a su madre antes de que se fuera su lugar. Lilian no pudo evitar llorar y abrazar a su pequeña, Massimo solo la miro y dio media vuelta. La pelirroja ya sabía que su papá no quería que lo viera llorar.
Una vez que los dejaron en las manos del padre, Visconti tomo sus manos y le sonrió dejando ver su sonrojo junto la emoción del momento.
–Te odio con toda mi alma, apestulia –murmuró con sentimiento, soltando un momentos sus manos para meterlas (sin levantarlo) debajo de la fina tela del velo y lograr limpiar con delicadeza las lágrimas de la quien sería su mujer.
Ella rio dejando caer su rostro en su mano.
–Eres un maldito asco, pez gato, todos te odian y nadie te ama solo te tienen miedo –susurró ella con la voz entre cortada y sin dejar de sonreírle.
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Entre Nosotros || Luberto
FanfictionEra la temporada de lluvias en la ciudad italiana de Génova e inicios del año 2001. Luca Paguro un reconocido profesor de las ciencias astrofísicas de una de las universidades más prestigiosas de Europa, tenia una vida común y llena de logros para s...