|41|No hay tiempo (parte 2)
Odiaba con toda su alma los hospitales. Ver gente llorando mientras las manecillas del reloj se movían con tal lentitud; murmullos, lágrimas y desespero se lograba sentir en todo el ambiente. No ayudaba mucho que ellos se encontraban sentados tres hombres afuera del área de cuneros. En especial cuando sentía la mirada horrorizadas sobre él al aun portar su traje blanco manchado de sangre mientras en sus brazos cargaba a Mina dormida. Desde que se llevaron a Alberto en la ambulancia no quería soltarla por miedo a que se la quitaran.
Giro su vista a su costado, alejado de todos Camilo rezaba en baja y en español sosteniendo con miedo aquel rosario negro que siempre llevaba bajo su ropa. Era obvio el miedo que sentía ante la delicada salud de su mujer y su hija. Todo paso demasiado rápido cuando las ambulancias llegaron, ni siquiera podían procesar las imágenes cuando se llevaron a Alberto y a Mirabel. Aún recuerda como la barriga de su amiga ya no estaba y envuelta en una sábana blanca Guido cargaba un bulto mientras que Antony bajo las órdenes de Rivera le daba oxígeno manualmente con un aparato raro cada cierto tiempo, la bebé tenía apenas seis meses y sus pulmones no estaban preparados aun. La pareja subió con Mirabel concentrados en seguir cuidando a la bebé mientras que Miguel se fue con Alberto. Dejaron a los niños con Ercole, Ciccio, su esposa y sus padres, ellos encargarían de calmarlos y hacer la denuncia hacia el padre biológico de Mina. Aun no podía creer todo lo que paso, jamás había vivido algo así. Miro a su bebé tan delicada y tranquila, ¿Cómo ella podía ser hija de un maniático que solo quiere hacer sufrir a todos?
–Ella puede compartir su sangre, pero no será como él –escucho la voz de Hiro.
Levanto la mirada, encontrándose con su amigo; quien se acercaba con tres envases de café que consiguió en la cafetería del hospital. Lo miro extrañado al saber qué es lo que pensaba, él suspiro y tomo asiento a su lado. Miro también a Mina y susurró:
–Tienes la misma mirada que la que tuvo Miguel al conocer por primera vez a Luan y Luis.
Luca lo miro algo sorprendido, Hiro volvió a suspirar al recordar la primera vez que conoció a sus hijos.
–Los padres biológicos de ellos eran una basura humana; Miguel al salir a altas horas de la noche en plena nevada pudo observar como dos drogadictos tiraron una caja al costado de un canal congelado. No le tomo importancia hasta que escucho el fuerte llanto de dos bebés. No lo pensó y corrió hacia ellos, incrédulo abrió la caja dos bebés desnudos con la cara congelada lloraban con fuerza –miro al suelo y apretó con fuerza sus puños, ante la rabia guardada–. Según él fue la peor imagen de su vida, algo que crees que es mito, que nadie en su sano juicio no se atrevería hacer algo así. Esa noche llego tarde, ocultos y protegidos en su abrigo que había quitado para protegerlos de la nieve, estaban ellos. Fue difícil, ambos bebés mostraban desnutrición y casi mueren de pulmonía...gastamos demasiado dinero para que se recuperaran y pagar un abogado para hacer el trámite de adopción. Miguel tuvo que conseguir otro trabajo como enfermero en un hospital cercano para poder lograrlo mientras yo me quedaba a cuidarlos. No planeábamos tener hijos, pero ellos llegaron a nuestra vida para quedarse, sin importar con quien comparten sangre, Luan y Luis son nuestros hijos como Mina es hija de Alberto al igual que tuya.
–Nunca nos los dijeron –murmuró.
–Queríamos guardar el secreto –miro el cristal de los cuneros y exhaló–. Algún día ellos sabrán la verdad y estaremos allí para aclarar sus dudas. Algo que deberían estar preparados tú y Alberto. Ellos tienen todo el derecho de saber de dónde vienen, si se enteran por otros medios será difícil de aceptarlo.
Luca no contesto, miro a su hija, algún día ella crecerá y se dará cuenta de las cosas. La abrazó contra su pecho y la acerco un poco para besar su frente. Él estaría allí para ella.
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Entre Nosotros || Luberto
FanfictionEra la temporada de lluvias en la ciudad italiana de Génova e inicios del año 2001. Luca Paguro un reconocido profesor de las ciencias astrofísicas de una de las universidades más prestigiosas de Europa, tenia una vida común y llena de logros para s...