Perfectamente imperfectos

IX

K a i r a M o o n.

—Mamá estoy bien — me alejo un poco de ella —Dios — me quejo.

—Pero es que estas golpeada — intenta acercase a mí.

—Sí y ya te he dicho por qué — rodo los ojos— me he caído.

—O alguien te golpeo — enarca una ceja.

—Si alguien me hubiera golpeado ten por seguro que esa persona estaría en el hospital ahora — me alejo de ella.

—Kai —

—Estoy bien, ya.

Subo las gradas y luego me adentro a mi habitación, me dirijo a mi escritorio y me siento enfrente de la computadora, empiezo a teclear algo sobre las cámaras de seguridad de la casa, quiero las de afuera, tal vez captan algo del auto de anoche o a las personas que venían dentro de él. por cierto, ¿Cómo seguirá Drazhan? Ojalá se haya desangrado mucho que haya muerto.

Siento unas leves garrar sobre mi pants y luego Brekker se sube a mis piernas, luego se coloca de pie para subirse al escritorio y pasearse sobre él. Entro a la carpeta de las cámaras y busco las de anoche y la hora. Pero, ningún cámara da hacia el parque, ni siquiera un mínimo reflejo.

—Oye, quítate del teclado — empujo a Brekker con la mano.

Ingreso a los documentos privados que he sacado de la empresa, puede que no esté en la empresa al 100% pero, siempre me gusta divagar sobre ellos. Aunque sé que ningún documento privado que hay acá, es el que busca Drazhan. Son solo sobre ventas y adquisiciones, unos que otros planos, cualquier cosa que se mantenga fuera de los medios, sin tanta relevancia.

También tengo que bajar a la oficina de mi madre, pero oh sorpresa, aún no ha salido, siempre sale, todos los días a la empresa, menos hoy. Que descaro. Además, tampoco es como si pudiera hacer tanto, Drazhan quiere información, pero primero necesito saber cuál es la información en especifica, pero el idiota ni eso me dice.

Tecleo su nombre en el buscador y me aparecen un par de cosas, "Drazhan Biersack celebra su cumpleaños número 18 en Inglaterra. Drazhan Biersack celebra su cumpleaños número 22 en los cabos". Información irrelevante sobre él. Ni siquiera están sus redes sociales, nada, bueno, sí, tengo su número de teléfono lo he sacado de la información pasada que estaba en la empresa sobre los Biersack. Pero no voy a llamarlo, pero, tal vez pueda contactar a sus amigos. —Aunque ni siquiera sé si sigue siendo el mismo—.

Kiara y Gilbert. Kiara me da miedo, mejor Gilbert. Tecleo parte de su nombre y me aparecen varios, miro sus imágenes y capto al que quiero, Wynnston Gilbert, — oh, su nombre es Wynnston—. Él sí tiene redes sociales a la vista. Ingreso a ellas y no tiene nada, ¿estará bien si le escribo? No es como si tenga otra opción.

Digo, estoy buscando varios archivos, pero no sé cuál es el que busco en específico, y si no lo encuentro, Drazhan seguirá amenazando a Lucas o peor, a mi familia en general y digo, no creo que el archivo que quieran sea TAN importante, puedo dárselos y ya, no creo que con eso destruyan mi empresa.

—Saldré, Brekker, te portas bien — digo, dejándolo en su casa.

Me arreglo, bueno, solo me coloco una sudadera, estoy toda golpeada de los codos, no quiero que los medios vean eso. Salgo de casa a escondidas de mi madre, no quiero darle explicaciones que saldré, porque posiblemente me diga que no lo haga, pero está encerrada en su oficina.

Subo al auto, con Diggle de conductor, le he escrito diciendo que nos viéramos en el bistró de la otra vez, de Florita, no me dijo nada, solo me dejo en visto, tal vez no vaya o tal vez sí. No sé, pero quiero estar segura de igual manera, aunque si va con Drazhan será un buen momento para desaparecer.