«Noche buena»
Angela.
La idea de vivir con Álvaro no me emocionaba, es decir; jamás me imaginé si quiera en algo así. Han pasado tres semanas desde que me decidí en hacer una locura cómo esta, admito que he disfrutado el tiempo que Álvaro y Chiara me han ofrecido, desde que llegué me han llenado de atenciones que jamás pensé recibir. No he traído todo por completo, aún me faltan muchas cosas que más adelante pienso traer aquí, pues cuando mamá me convenció en mudarme con Álvaro, yo aún me encontraba perdida en la vergüenza. Él lo tomó de maravilla, ya que desde el primer día ha estado atento conmigo, la relación entre los dos aumentó y no puedo quejarme de lo bien que la he pasado. Me ha demostrado el increíble hombre que es, todos los días me sorprende con cosas que no le conocía, pero que sin duda son muy importantes para la relación que estamos formando, y no solo como padres, también como pareja. Hemos pasado estas semanas para enfocarnos en nuestro bebé, que ha crecido de una manera impresionante. Mi vientre ya no es un pequeño bulto, ahora se nota mucho más y hasta he sentido cómo se mueve, que por cierto solo lo hace por las noches.
Nos hemos enojado, hemos hablado y sobre todo nos hemos conocido mucho más. Chiara está muy feliz de tenerme en su casa, hace todo lo posible por hacerme sentir cómoda y yo no podría estar más agradecida. También he hecho terapias de embarazo, Álvaro se ha encargado de buscar todo tipo de especialistas para que mi embarazo marche con normalidad. Aunque se haga el estúpido y le cueste mostrar su afecto para con mi bebé, puedo notar como se ha encariñado con el pasar de los días, ahora parece que necesita una dosis diaria de mi vientre, ya que al despertar lo primero que hace es susurrarle cosas mientras yo estoy dormida. Y claro que escucho todo lo que le dice, es emocionante ver todo lo que hicimos juntos en tres semanas que llevo en esta casa.
La doctora está más que feliz por mi decisión, ahora está más al pendiente y viene dos veces por semana para asegurarse de que yo me encuentre bien, ya que Álvaro no la deja en paz.
El enorme armario de Álvaro quedó completamente lleno de mis prendas. Me he encargado de llenarlo con ropa hermosa de maternidad, todo me encanta, mi madre no deja de traerme cajas y cajas de ropa nueva, cosa que la hace muy feliz y por supuesto, a mí también.
Ahora la casa tiene un aire más cómodo, Chiara y yo nos hemos encargado de decorar todo de navidad, desde los baños hasta la piscina, el árbol navideño es enorme y el jardín quedó completamente lleno de luces de todos los colores. Álvaro se exaspera a cada nada, ya que siempre está tropezando con adornos y renos por todos lados. Yo no podría estar más feliz, la verdad es que estos días me han llenado de una felicidad inexplicable.
Con respecto al sexo... bueno. Álvaro se ha encargado de hacerme llorar de placer todos estos días. El sexo se ha vuelto una rutina para ambos, al despertar ya tengo a ese hombre entre las piernas, embistiéndome sin compasión. No miento que temo a volverme adicta a eso, pero es imposible tenerlo cerca y no querer desvestirlo u desvestirme. El embarazo no solo me volvió sensible, también muy caliente ya que a cada nada quiero estar montada en la verga de Álvaro.
Lo único que no me ha gustado de todo esto, es la relación que mi abuelo mantiene con la fastidiosa de Claudia. Aunque ella intentó convencerme de que quiere limar ásperas entre las dos, yo no le creo absolutamente nada. El viejo sin vergüenza de Gabriel, se atrevió a insistirle a Kate para que regresara a Londres, con la excusa de que necesita tiempo. La pobre mujer no tuvo otra opción más que largarse ante la indiferencia de mi abuelo, que ahora se la mantiene muy contento con la peli negra. No puedo creer hasta donde puede llegar el descaro de esa mujer, quien no se ha separado de mi abuelo desde que le conoció. Álvaro me contó que la misma tarde que se conocieron, los vió follando en la oficina de Claudia y claro, no puedo sorprenderme ya que es algo muy normal en personas como Gabriel.
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Más allá de mi orgullo// EDITANDO.
Short StoryÁngela Maltés, cuyo orgullo compite con su ego. Arrogante, sin sentimientos y misteriosa, dispuesta a cualquier cosa por conseguir lo que quiere sin importar a quien lleve por delante. Es una mujer segura de sí misma y que jamás le bajaría la cabeza...