Aquí Empieza El Juego

Capitulo 20

-Te vez horrible-es lo primero que dice Fred cuando me ve llegar a la mesa donde el esta sentado en la cafetería de la escuela con Aniel y los otros dos chicos que volví a olvidar sus nombres-Irte a ese campamento fue lo peor que pudiste hacer-se burla.

-Cierra la boca Blake-le gruño, la verdad es que hoy estoy mas insoportable que nunca, ni siquiera yo misma me soporto.

-Volviste mas salvaje que antes-se burla Aniel- Debiste ir un campamento cristiano y no a uno que te enseñe a como ser una fiera-los chicos se ríen y yo ruedo los ojos.

-¿Nunca te cansas de decir idioteces?-pregunto con ironía mientras me siento al lado de Fred-Te extrañe rubio falso-le confieso mientras le doy un codazo

-Yo a ti,  estúpida-el me sonríe y yo le devuelvo el gesto, esa es nuestra forma de demostrarnos cariño.

-Lo bueno es que a mi no me extrañaste ¿verdad?-dice el amigo de Fred mientras se cubre las costillas.

-Ustedes son tan raros-dice Aniel.

-¿Por que sigues siendo amigo de el?-le pregunto  a Fred en un susurro que escucharon todos.

-Por que el tiene mucho dinero y nos puede invitar la comida todo el tiempo-me responde Fred de la misma forma en la que hable  y Aniel pone su mejor cara de indignado.

-A ti también te extrañe muchos ¿sabes?-le espeto a Aniel mientras me paro a su lado y le  doy un abrazo, en medio del abrazo extiendo mi mano y tomo una barra de chocolate que este tenia en la mesa sin que nadie se diera cuenta.

-Eso fue raro-manifiesta el entrecerrando los ojos a mi dirección.

-¿Que es raro?-cuestiono de manera cínica mientras le doy un mordisco a su chocolate el abre los ojos mas de lo normal al darse cuenta que le había robado su chocolate.

-Ya sabia yo que había algo raro aquí-los chicos se ríen y el niega en su dirección- Que malos amigos son ustedes-ellos ríen aun mas fuerte.

-¿Quieres un poco?-le ofrezco mientras saco la lengua y le muestro un pedazo que hay en ella, el pone una cara de asco y niega-Tu te lo pierdes-le digo justo cuando me voy a terminar de comer lo que me faltaba del chocolate Fred me lo quita y se lo come.

-Eres muy lenta-se burla el con la boca llena de chocolate.

-Que hijo de puta  saliste-le espeto indignada-Pensé que éramos amigos- dramatizo mas de la cuenta.

-Ya sabes lo que dicen Kari-el traga antes de continuar-Camarón que se duerme se queda sin chocolate-niego con la cabeza mientras me pongo una mano en el pecho.

-¿Los camarones comen chocolates?-me carcajeo sin poder evitar lo al escuchar la pregunta de Aniel.

-Obvio tarado-le responde uno de los chicos.

-Te lo juro que no soy así  de idiota como Enzo y Aniel-se defiende  el otro chico.

-Que tonto son-se burla Fred-¿A que vienen a la escuela?

-Por que es obvio que te enseñan que comen los camarones en la escuela ¿no?-le digo irónica.

-Cierra la boca Karima, me avergüenzas-se queja el, los chicos se ríen.

-¿Vas a venir con nosotros esta noche?-me pregunta  el chico que ahora recuerdo que se llama  Enzo.

-No gracias, la ultima vez que me invitaron a salir estuvimos en un cementerio-sentí un escalofrió al recordar aquello.

-Tienes miedo de que Morticia Adams te aparezca-se burla el otro chico y no se por que su comentario me molesto un poco, pero al parecer no fui la única por que el cuerpo de Fred se tenso.

-Cierra la boca-espeto rodando los ojos con notable fastidio.

-Deberías venir a divertirte un poco luego de durar diez  días perdida en un campamento en medio de la nada-me alienta Fred, cambiando de tema.

-Necesito descansar-me excuso-Dormir en el piso es de lo peor-ellos ríen al escucharme  decir eso, y no mentía si dormí en el piso pero no del bosque como les hice creer si no en el piso de mi sótano. 

Que irónico  ¿no?

-Tu te lo pierdes-proclama el otro chico justo en el momento que tocaron el timbre para que volvamos a el aula.

-Joder pero si acabamos de salir-se queja Aniel.

-Anda levanta tu trasero de ahí-lo anima golpeando su espalda.

Salimos todos junto de la cafetería, cada quien se va a el aula que le toca pero antes de entrar al mío Fred me toma del brazo y me arrastra hasta el cuarto del conserje.

 -¿Que haces?-cuestiono confundida.

-Necesito tu ayuda-me pide desesperado, nada que ver con su actitud calmada de hace un rato.

-¿Que pasa?-cuestiono un tanto preocupada.

-¿Recuerdas cuando te dije que la tumba de Morticia estaba vacía y que todos en el pueblo quieren respuestas?-asiento sin entender mucho-Estos días en los que no estuviste aquí las personas de Deadwood  se volvieron locos queriendo respuestas de por que ningunos de sus allegados fallecidos están en sus tumbas y  como mi papá no se las da lo quieren quitar de su puesto.

-¿Y en que yo puedo ayudarte?-le pregunto sin entender mucho donde entraría yo en aquella historia.

-Se que tienes una relaciona con ellos mas allá de  unos simples vecinos-yo abro los ojos mas de la cuenta y cuando voy a defenderme el habla-Y no lo niegues por que ellos lo dejaron muy claro-frunzo el ceño sin entender.

-¿De que hablas?-cuestiono.

-Ellos fueron a mi casa cuando no estabas y me dejaron bien en claro que tenían una relación contigo-abro la boca para hablar pero el me detiene-No creas que te estoy juzgando, en parte me duele que no me lo hayas dicho tu pero eso ya no importa- yo niego con la cabeza rápidamente.

-No tenemos ningún tipo de relación te lo juro-el me toma de los hombros.

-Lo se y eso es justo lo que te quiero pedir-su mirada se cristaliza-Después de que  mi mamá se fuera lo único que mantiene cuerdo a mi padre es el trabajo y si se queda sin el no se que pasara con nosotros, esto te va a sonar como una autentica locura pero quiero que te acerques mas a ellos y le saques toda la información que puedas ya sea buena o mala.

-¿Crees que ellos tiene algo que ver?-interpelo sin poder evitarlo.

-La verdad es que no se que creer-el baja la cabeza-Solo quiero que consigas pruebas para mostrar su inocencia.

-¿Y que pasara si son los culpables?-el levanta  la mirada.

-Creo que no lo son-el los defiende.

-¿Por que lo crees?-interrogo 

-Los conocí y me di cuenta quizás los juzgamos mal-esto se puso interesante.

-¿Crees que los juzgamos mal?-digo sin poder creer que el haya dicho eso.

-Si eso creo, pero ese no es el tema ahora ¿lo vas a hacer?-el cuestiona esperanzado.

-Bien, lo hare tratare de sacarle información pero no prometo nada-el me abraza.

-Gracias, Gracias, Gracias-repite una y otra vez.

-¿Puedes soltarme? rubio idiota-le reclamo y el se ríe mientras se aleja de mi.

No se en que me metí pero todo sea por Fred.