Pureza & Maldad (+18)

Capítulo 23

¿____?

Phebe.

Septiembre 19, 2022

El fin de semana se la paso timbrando mi teléfono pero no atendí a nadie por dos razones, estoy en mis día de regla y dos no soporto a nadie. Por lo que me la pase encerrada planeando una nueva semana y atendiendo mis ganas de comer chocolate. Jackson rondaba como abeja a la miel desesperado y molesto. Quería que atendiera el teléfono. Pero yo no quería y ya esta.

Me encanta tener espacio para mi misma y que me estén molestando todo el tiempo no me gusta, pensé muchas veces en verlos ya que van siete  días sin ellos, pero no me apetece verlos en estas condiciones sabiendo que lo único que hacemos es follar.

Además de haber echo una fiesta por teléfono con Maya, le rogaba a Dios que me llegara la dichosa menstruación, eh follado sin condón y necesito urgente una cita al ginecólogo.

Salgo de la escuela en busca de quien viene por mi, lo veo y me voy a sus brazos como cuando era pequeña saliendo del preescolar.

—Quiero una paleta — lo molesto con voz de niña pequeña.

—Lo que quieras, siempre serás mi pequeña — dice y suelto a reír mientras me abraza.

Me despido de mis colegas a lo lejos y antes de entrar se estaciona un auto detrás de mi padre. <<Jackson>>, su mirada de terror me lo dice todo .Mi padre se acerca al auto.

—No te preocupes muchacho, yo me hago cargo, además llegaste tarde — le dice mi padre.

El me hace un gesto con lo ojos y me acerco también.

—Si lo siento — titubea — Puedo decirle algo señorita — cuestiona nervioso y mi padre achica los ojos.

—Claro, padre voy enseguida — el me mira mal, pero se va al auto, desde el espejo puedo ver que nos ve por lo que volteo mi rostro para que no pueda leerme los labios. — Habla. — Mascullo entre dientes.

—Me van asesinar si no viene ahora conmigo — dice fingiendo una sonrisa.

—No puedo, tengo una cita ahora… — el abre los ojos — Me voy a mudar y necesito hacer esto.

—Pero mi cuello está en juego, no me obligue a secuestrarla…

—¡Perderemos la cita hija! — me grita mi padre desde el auto.

—¡Ya voy! — miro Jackson — lo siento pero tendrán que esperar…

Camino a la camioneta de mi padre y me subo de copiloto… conduce por las calles en silencio pero se que tiene la pregunta en la lengua.

—No es el chófer si es lo que piensas — le suelto y resopla aliviado.

—Por un momento creí que te metías con un criminal, casi me da un infarto.

—¿Un criminal? — me asombro que el sepa eso.

<<ya me descubrió>>.

—Si bueno, el tiene un expediente bastante extenso, de la milicia a un criminal, que en estos momentos está ah aprueba —sigue conduciendo — Ser un escolta bien servido le ayudará, además de que no escolta a cualquiera. Eres la hija de un Detective muy importante.

—Ah, Dios nunca me cuentas nada — lo golpeo en el brazo molesta.

—Solo lo sé yo, bueno ahora tu, pero no estas en peligro créeme. Jamás dejaría a mi hija en manos de criminales sin saberlo…

¡Ay papá!

Lo que no sabes es que ese escolta sigue siendo un criminal, y trabaja para ellos.

***