You ain't the first ~ Izzy x Duff

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El sol se asomaba tenuemente por las cortinas, era el sol del invierno que apenas comenzaba. Ese que calentaba pero no del todo. La taza de café entre las manos de Izzy soltaba humo caliente que se elevaba con gracia. Él soplo un poco sobre el borde de la taza antes de beber de ella. Tan amargo, exactamente como le gustaba.

Miraba la espalda del hombre que ahora era su esposo, apenas llevaban un mes de casados. Él terminaban de preparar unas tostadas. Cuando se dio la vuelta con el plato, le sonrió al mayor.

-¿Qué tanto mirabas? -preguntó con picardía, suponiendo que tenía la mirada sobre su trasero.

-Tienes la espalda tan delgada.

Duff rio ante ese comentario, poniendo una mano sobre su cintura. Dejo el plato de cerámica sobre la mesa redonda y se sentó en la silla frente a él. Al rededor de la mesa había cuatro sillas, ellos esperaban que las otras dos restantes fueran ocupadas pronto por un par de niños.

-¿Qué pasa? -dijo el rubio, mientras se llevaba una tostada con mermelada de fresa a la boca. -Anoche te levantaste varias veces de la cama, ¿Te sientes mal?

-Ah, no, sólo que... -comenzó a divagar, revolviendo su café con una cuchara de plata, regalo que su madre les había hecho por su boda. -Hay cosas que creo que debería decirte ahora que estamos casados.

-Puedes decirme lo que quieras. -le sonrió con dulzura, buscando tomarle la mano que había dejado sobre la mesa, acariciando despacio.

Izzy suspiró, era ahora o nunca y nunca sería peor.-No eres el primero.

-¿Cómo? -lo miró sin comprender a qué se refería exactamente.

-No eres mi primer esposo, ésta no es la primera vez que me caso.

El silencio entre ellos lleno la habitación. Duff miro hacia abajo con sus labios entreabiertos y el ceño ligeramente fruncido, soltó la mano ajena.

-¿Por qué me lo dices ahora?

-Porque-, no lo sé en realidad.

-¿Tienes hijos con alguien más? -eso era posiblemente lo que más miedo le daba.

-No, eso no, pero tuve otro esposo antes.

-¿Y qué pasó con él?

-Me dejo por un camionero de Texas, supongo que era mejor que yo.

McKagan no sabía que decir, estaba tan confundido ahora pues se sentía engañado de alguna manera. Si tanto confiaba en él, ¿Por qué nunca se lo comentó antes? Fueron novios durante cuatro años antes de contraer matrimonio y tuvieron un año entero comprometidos, ¿No hubo momento en todo ese tiempo para decirle aquello?.

-Fue hace mucho ya, apenas terminada la escuela -le dijo, buscando que quitara esa expresión de decepción del rostro. -. Eramos jóvenes y en serio creíamos amarnos.

-Yo... -suspiró-Esto es fuerte para mí.

-Debe de serlo, realmente lo siento, sé que tendría que haberte dicho antes.

-Te equivocaste al no hacerlo -dejó un poco de silencio entre ellos, meditando la situación. -Pero te amo de todas formas -sonrió. -. Eres el hombre al que amo en serio, para ti es igual, ¿Verdad?

-Claro, como no te lo imaginas. -tomó su mano otra vez, acariciando con ternura. Su café ya estaba frío. -Podrás no ser el primero pero para mí eres el único, él no me hizo sentir lo que tú. Eres muy especial como para no amarte.

-Creo lo mismo, aunque haya habido otro antes que yo.

-Ven a mis brazos, amor -pidió Izzy, colocándose para dejarse abrazar.

Duff se levantó con sus brazos extendidos para poder rodear su pareja. Se sentó sobre su regazo y se escondió en su pecho. -Te amo. -dijo contra su oido.

-Y yo a ti.

One-shots; Guns n Roses Donde viven las historias. Descúbrelo ahora