La noche era silenciosa y fría. Era raro no ver a Edward por aquí, pues era la única persona que me cuidaba por las noches voluntariamente, ahora tenía que acostumbrarme a la idea de no verlo seguido los aquí teniendo a Bella a un lado. Y ahora el no estaba. Que difícil sonaba se un vampiro.
– Hola señorita Dorian ¿Está lista para dormir? - Jasper acababa de entrar a la habitación. Era costumbre que el estuviera por las noches aquí, solo mientras me dormía.
– En realidad no, no tengo sueño.
– Todo en orden?
– Si, solo está muy silencioso sin el. Creo que me acostumbré a su presencia y ahora es raro no verlo.
– Suele pasar muchas veces. Pero volverá, si eso es lo que te preocupa.
– Lo sé. Pero tendrá que cambiar, Bella está a un lado, y el… bueno, ya sabes - guardamos silencio un momento.
» Sabes que no es forzoso que estés aquí, digo, también eres como Ed, te puedes ir si así lo prefieres. No tengo problema en eso.
– Lo dices por… Bella?
– Si.
– Estoy bien, no me molesta, no aún. Tu sangre opaca la de ella.
– ¿Eso es un halago? Porqué lo tomaré como uno - sonrió.
– Algo así. ¿Quieres seguir hablando o mejor me calló?
– Puedes hablar de lo que quieras, prácticamente te tengo como un prisionero.
– No tanto, Edward me pagará - se rió por aquella broma.
– Espero que por lo menos te pague bien.
– No, no lo hará - Edward tacaño.
– Entonces tendremos que meterle una demanda - tome una libreta y un lápiz simulando escribir - por… ¿Exceso de trabajo?
– Y mala paga, sin seguro médico, sin prestaciones - hizo una pausa simulando pensar.
– Algo más?
– Por ahora está bien.
Reímos, y quedamos en silencio una vez más.
– Ahora si me dió sueño. Espero que no tengas nada que ver.
– Para nada.
– Buenas noches Jasper.
– Buenas noches Dorian.
Me quedé dormida en un profundo sueño. No me preocupaba más, Jasper impedía que los malos sueños me lastimarán y me hacía dormir tranquilamente. Amaba a Jasper y era una lastima que no estuviera a la venta.
⏃
– Buen día a todos - saludé con alegría.
– Alguien está feliz o es mi imaginación? - se burló Ced.
– Es un lindo día y me gustaría compartirlo contigo - mire a Cedric.
– No pasara por ti Edward? - pregunto Charlie.
– No, le dió alergia y pasará tiempo en su casa hasta que se recupere, hasta entonces no se le verá por aquí.
– Adiós días buenos - se quejo Cedric.
– No lo arruines, estoy de muy buen humor hoy.
– Aprovéchalo, no todos los días son iguales - los dos únicos hombres de la habitación rieron cómplices.
ESTÁS LEYENDO
Otro Universo
FantasyCedric y Dorian llegan al frío Forks por accidente, un lugar parecido al suyo. Intentarán regresar a casa lo más pronto posible, su mundo podría estar en graves problemas. ¿Regresarán al Londres que conocen? ¿Qué pasará con ellos? Los personajes pe...