ENAMORANDOME DE ELLA

AMENAZA

Al fin le dijimos a la familia sobre la llegada de nuestros bebes, todos estábamos felices. sobre todo Gustus y mi mama.

Al terminara la cena, nos fuimos a casa. Me estaba sintiendo muy cansada, durante el trayecto me quede dormida, cuando abrí los ojos ya habíamos llegado, Lexa me ayudo a bajara y me abrazo guiándome hasta nuestra habitación, me quito la ropa para ponerme algo cómodo.

-Descansa mi amor!.- me besa.

-Descansa.- contesto somnolienta.

Lexa se recuesta a mi lado y comienza a hacerme cosquillitas en mi espalda lo que provoca que me abandone a un profundo sueño. Al día siguiente la alarma me despierta, me levante de mala gana y en cuanto me puse de pie sentí un horrible mareo y caía en la cama, trato de respirar para calmarme y escucho a Lexa hablarme.

-Amor que sucede?.- pregunta preocupada.

-No es nada, solo fue un mareo.

-Te llevare al hospital.

-No es necesario.

-Te voy a llevar.- insiste.

-Lexa, no iré. Solo....- no pude continuar salí corriendo al baño para vomitar.

-Definitivamente te llevare al medico.- dice Lexa sosteniéndome el cabello.

-No es necesario, solo son efectos del embarazo. Creo que será algo de todas las mañanas.- le sonreí.

-Estas segura?

-Si, es normal que den mareos y nauseas.

-Preferiría llevarte al doctor.

-Si no me crees llama a tu amigo y consúltalo.- dije mientras comenzaba a cepillarme los dientes.

-Eso estoy haciendo.- dice con el celular en su oreja.

Escucho atentamente su conversación y vi en sus ojos, que se ha calmado, habla un rato mas con su amigo pero sin dejar de observarme.

Hablaban sobre un evento, así que aproveche para darme una ducha, ella no me quitaba la mirada de encima y note como su entrepierna reaccionaba, me causo gracia y ella se da cuenta de que la estoy viendo.

Pasaba mis manos sobre mi cuerpo enjabonándome de forma sensual, fingiendo que solo tenia interés en darme una ducha. Ella nota cada uno de mis movimientos, se pierde en la conversación por ratos. Termino de bañarme, seco mi cuerpo con una toalla y me acerco a ella despacio dejando a un lado la toalla.

Beso su cuello mientras desato el cordón de su pijama, ella sonríe de medio lado por lo que yo estaba haciendo, dejo caer sus pantalones y me agacho, ella no aparta su mirada de mi. Comienzo a torturarla suavemente con mi boca, veo el deseo y la lujuria en su mirada. Le cuesta respirar y mantener la conversación, trata de seguir la corriente de lo que dicen y mueve sus caderas al mismo tiempo.

Por casi dos minutos estuvimos así, hasta que no resiste mas, deja su teléfono de lado, para llevar sus manos a mi cabello, sin dejar de mover sus caderas. Siento como me levanta y sube sobre el lavamanos, se posiciona en medio de mis piernas y entra suavemente en mi.

Me sentía en el cielo con ella dentro, desde que supimos de nuestros bebes Lexa es mas dulce y delicada conmigo, no queremos correr riesgos.

-No pares.- pido.

-Tus deseos son mis ordenes!

Lexa estimula mi cuerpo de una manera increíble, pero desde que estoy embarazada mi cuerpo es mucho mas sensible. Después de dos maravillosos orgasmos, debíamos parar, teníamos que trabajar.