ENAMORANDOME DE ELLA

NO ROMPAS TUS PROMESAS

No dejaba de pensar en como recompensar a Clarke por mi error, llevaba pensando suficiente tiempo y no se me ocurrió nada, soy una mujer inteligente y enérgica, pero mi mente con Clarke no funciona igual.. me quedo en blanco.

-Que hago?.- murmuro viendo al techo.

Me fue imposible dormir, primero por que no dejaba de pensar en lo idiota que fui y segundo, por que no tenia a Clarke a mi lado. Veo la hora y eran mas de las tres de la madrugada, me levando del sofá y voy hasta nuestra habitación, para ver si corría con suerte y encontraba la puerta sin seguro y poder dormir a su lado, pero no fue así. Regrese a la sala y me obligue a dormir, pero no lo consigo.

Siento los pasos de Clarke al bajar por las escaleras, vi el cansancio en sus ojos y me siento culpable. Después de que se fue al hospital yo no tenia ánimos para nada, así que llame a mi asistente para que cancelara toda mi agenda del día.

Me fui a nuestra habitación y me recosté en nuestra cama, su olor me tranquiliza y solo asi pude dormir un par de horas, hasta que escucho mi teléfono sonar.

-Hola?.- pregunto somnolienta sin ver el identificador.

-Señora Woods, llamamos del hospital, para informarle que su abuelo ha despertado y pregunta por usted.- menciona la voz del teléfono.

-Iré enseguida!.- cuelgo.

Me levante de la cama con un gran dolor de cabeza, me tomo dos analgésico y entro en la ducha, me di un baño rápido para salir volando hacia el hospital.

Cuando llego solo estaba Abby la madre de Clarke.

-Hola!.- saluda.

-Lexa.- saluda mi abuelo en un tono que no me gusta, es como si estuviera enojado.

-Los dejare a solas, debo volver a casa.- dice Abby y sale de la habitación.

-Que hiciste?.- pregunta mi abuelo, apenas Abby se va.

-A que te refieres?

-Supe que duermes en la sala, la pregunta es por que?.- dice.

-Olvide ir a la ecografía.- confieso.

-Por que lo olvidaste?.- pregunta enojado.

-Me encontré a Anya Weber al terminar una reunión, nos sentamos a hablar y no me di cuenta de la hora.- omito las llamadas.

-Anya?

-Si!

-La pequeña Any?.- vuelve a preguntar.

-Si abuelo, la misma. Ha venido de vacaciones, ese día nos encontramos y tu sabes teníamos años de no vernos y hablamos, por eso se me fue el tiempo y olvide la cita.- Explico.

-Ya veo, me alegra saber que la pequeña Anya esta bien y se reencontraran. Pero, hiciste mal al dejar a tu esposa a un lado y mas en algo tan importante, como son tus hijos.- me regaña.

-Lo se.- suspiro.- se que me equivoque, admito mi error, pero no se que hacer para que me perdone.- vuelvo a suspirar.

-Discúlpate con ella, suplica si debes hacerlo. Deja tu orgullo a un lado y pide perdón.- dice.

-Ya lo hice, pero no me ha perdonado.- dije enojada.

-No importa lo que tengas que hacer, pero debes arreglarlo. No solo es tu esposa, si no la madre de tus hijos y la mujer que amas. No la pierdas.- dice.

-No pienso perderla.- digo con firmeza.

-Adivina quien ha venido a visitarte.- escuchamos a alguien en la puerta y era mi madre.