ENAMORANDOME DE ELLA

TODO EN ORDEN

Clarke

Al volver a casa, estaba con una enorme sonrisa en mi rostro. Me habia gustado mucho ir a caminar con Lexa por el parque, solas nosotras dos. Ver a esos niños con sus familias felices, fue muy satisfactorio. Muchas imágenes pasaron por mi mente, en unas teniendo a mis bebes en mis brazos, en otras a Lexa persiguiéndolos por el parque mientras los pequeños reían. Solo habia felicidad en mi mente, por lo cual sonreí todo el tiempo.

Estábamos en nuestra habitación descansado, cuando escuchamos un grito Lexa sale corriendo primero, yo voy tras ella y encontramos a mi madre gritando por ayuda. Gustus estaba tirado en el suelo inconsciente, corro hasta el para darle auxilio. Su pulso y respiración son débiles, debíamos llevarlo al hospital para examinarlo.

-Debemos ir al hospital.- expreso con voz temblorosa.

-Te ayudare.- dice mi padre.

-Entre mi padre y dos de los guardias suben a Gutus al auto, y Lexa se va con ellos rumbo al hospital, el resto nos vamos en otro vehículo. Al llegar al hospital bajo corriendo y solicito una camilla.

Las enfermeras corren hasta donde estaba Gustus, les indico que hay que llevarlo de inmediato a tomografía, Lexa y los demás se quedan en la sala de espera y yo entro con las enfermeras.

Me quede viendo las imágenes en la computadora, ya que no podía entrar a la sala por mi embarazo. Comenzamos con la tomografía.

-No puede ser!.- susurro al ver las primeras imágenes.

-Lo lamento.- dice el Dr. Jackson que estaba de turno.

-Yo hablare con ellos.- digo.- ¿Puedes encargarte del resto de los exámenes?.- pregunto.

-Claro, no te preocupes. Lo hare.- dice.

-Gracias.

Salgo de la sala y camino unos cuantos pasos, pero mis piernas se debilitan, haciendo que caiga al suelo. Trato de calmar mi respiración para poder ir con mi familia y dar las malas noticias. Sabia que algo andaba mal con el, pero me siento culpable por no haberlo traído antes para revisarlo.

Tardo mas de diez minutos en calmarme, me levanto y voy de regreso a la sala de espera, donde estaban todos. Me acerco a ellos a paso lento, Lexa se levanta del asiento apenas me ve.

-Síganme.- digo.

Me doy la vuelta y camino hacia mi oficina. Mis padres, Lexa y Becca entran detrás de mi.

-Que sucede?.- pregunta Lexa con su voz quebrada.

-El...- tartamudeo.- su aneurisma, ha crecido mas de lo que esperábamos. Creímos que estaba controlada luego de eliminar el veneno de su cuerpo, pero ...- mi voz se apaga.- no le queda mucho tiempo, lo siento.- sollozo.

Todos se quedan en silencio, luego de escuchar mis palabras.

-Cuanto tiempo?.-su pregunta me recuerda al día que nos conocimos.

-No mucho!

-Cuanto?.- insiste.

-Quizás un par de meses, si intentamos un tratamiento agresivo.- digo.

-Crees?.- pausa su hablar.- ¿crees que pueda llegar a conocer a nuestros hijos?.- me pregunta con lagrimas en sus ojos.

-No lo se.- respondo.

-Espero que pueda, el desea conocerlos.- dice antes de derrumbarse.

Todos estamos tristes ante lo que sucedía. Gustus era la persona mas buena y amorosa que he conocido en mi vida. Es maravilloso, me siento tan afortunada de que llegara a mi vida. Saber que en cualquier momento podría partir me hace estar demasiado triste y siento un dolor en el pecho.