ENAMORANDOME DE ELLA

NOCHE LOCA

Cuando estaba por salir de la habitación sentía que me estaba observando fijamente la espalda, eso me hizo sentir rara y apresure mi paso, soy una cobarde. El día transcurrió sin problemas después de lo sucedido en la mañana.

Faltaba una hora para que mi turno terminara, asi que examine dos pacientes mas para después dejar instrucciones a los internos sobre que deben hacer durante el turno nocturno, fui a la sala de descanso y me quite mi uniforme para ponerme mi ropa de civil.

Estaba esperando a que el ascensor se detuviera para subir en el, entre y oprimí el botón que va hasta el primer piso. Sali del ascensor y en mi camino me iba despidiendo de mis colegas, llegue a mi auto y me subí en el, necesitaba comer algo. Asi que decidí que compraría comida para llevar, al llegar a casa me quite mis zapatos y mi chaqueta, fui por algo de beber a la cocina y me senté frente al televisor, cene mientras veía mi programa favorito.

No supe en que momento me quede dormida en el sofá, mi cuerpo crujía a medida que me estiraba, apague el televisor, recogí el desorden y me fui a mi habitación, me puse ropa cómoda para dormir y me metí en la cama, mañana tenia el día libre, asi que aprovecharía para recuperar horas muchas horas de sueño.

Mirada profunda, ojos verdes, labios carnosos, cabello castaño. La imagen no salía de mi mente... maldita sea, ¿Qué me sucede?. Se notaba que era una mujer poderosa, que atrae y tendrá muchas y muchos detrás de ella. Pero el pensar en ella hacia que una parte especifica de mi cuerpo despertara, y al no poder conciliar el sueño por los pensamientos impropios que estaba teniendo me pare de la cama, tome mi teléfono y le envié un mensaje a Bellamy.

Ven a mi casa, necesito liberar estrés. C.

Pasare por ti en 20 minutos, ponte guapísima. B.

No me mal entiendan, soy una mujer soltera y no tengo que darle explicaciones a nadie. Y el hecho de tener la imagen de esa mujer me tiene caliente. Bellamy es mi mejor amigo desde hace muchos años, pero también es mi amigo para las noches de locura.

Puede que el mundo crea que esta mal que una mujer se divierta igual que un hombre, que viva y disfrute de su sexualidad abiertamente y sobre todo plenamente, pero eso solo significa una cosa; MACHISMO. No entiendo porque las mujeres se les trata de putas por no querer nada serio con nadie y querer divertirse, el hecho de que queramos vestirnos y salir con quien queramos no significa que lo seamos, la sociedad esta acostumbrada a juzgar y criticar este comportamiento en las mujeres, pero... ¿Por que lo consideran normal en un hombre?, pues sencillo y ya lo dije Machismo.

Me encontraba viéndome por ultima vez en el espejo para asegurarme que todo estuviera en orden, hasta que escuche el timbre sonar. Tome mi cartera las llaves, teléfono y suficiente dinero. Abrí la puerta y ahí estaba mi mejor amigo-amiga. ¿Les dije que Bell es Gay? bueno lo es, los dos nos conocimos hace siete años cuando visite por primera vez el club Arkadia, aquí en San Francisco. Para quien no lo conozca es un club sumamente exclusivo, donde puedes encontrar todo lo que imagines; Swinger-Inter-BDSM-Trasns-Gay-Voyerismo... etc; Para los gustos los colores. Todo esta aquí, hasta lo que no te imaginas. Son sumamente estrictos, no cualquier logra una membresía, tus identidad es cuidada y hay un excelente protocolo de seguridad e higiene.

-Estas hermosa!.- dijo besando mi mejilla.

-Tu igual.- contesto sonriendo.

-Nos vamos?

-Claro!

-Que tal tu día?.-me pregunta una vez que estamos en el coche.

-Se podría decir que bien, perdí un paciente, otros están mejorando y otros no tan bien.- dije.

-Entiendo, lamento lo de tu paciente.- me dijo sosteniendo mi mano.

-Esta bien es el proceso de vida y todos tenemos que enfrentarlo.- Suspire.

-Noche de locura?.- me dice mirándome a los ojos, mientras el semáforo esta en rojo.

-Noche de locura.- Confirme.

-Muy bien!

Tardamos 30 minutos en llegar al club, bajamos por la rampa hacia el estacionamiento subterráneo, donde nos esperaba el valet parking, nos bajamos y caminamos hasta la entrada. Ingresamos nuestras tarjetas y entramos saludando a uno de los guardias, éramos clientes antiguos asi que conocíamos a la mayoría de los empleados, a parte Miller era uno de los ligues de Bell.

Al entrar podíamos ver algunas mesas que estaban ocupadas por personas que tenían acompañantes y otros soleteros, también habia otras personas que cruzaban unas puertas negras, estas daban a los pasillos que daban a las diferentes salas, unas eran privadas y otras eran abiertas, asi como también se dividían por categorías, las que ya les mencione antes.

En una sala abierta fue que conocí a Bell, tuvimos una noche de locura con otro chico y desde entonces nos hicimos amigos, no negare que hemos jugado unas cuantas veces mas, pero desde que nos hicimos amigos eso no volvió a suceder nunca mas, decidimos que era lo mejor para mantener nuestra amistad intacta y el junto a Raven y Octavia son las que mejor me conocen a parte de mis padres adoptivos.

Verán mi vida durante mi niñez y parte de mi adolescencia fue una mierda, sufrí día tras día y eran incontables el numero de golpizas que recibí por parte de mis padres biológicos. Hasta que un día, gracias a una vecina pude huir de ellos, pero aun hoy los recuerdos me atormentan.

Las dos personas que mas e odiado en el mundo aun logran afectarme a través de mis sueños, a causa de lo que ellos me han hecho sufro insomnio y desconfió de las personas, pero mi experiencia aunque traumática me ha ayudado a convertirme en la mujer que soy hoy en día; fuerte y no permito que nadie se meta conmigo, menos que trate de lastimarme. No sin defenderme y que reciba un castigo de mi parte.

No llevamos ni diez minutos de estar sentados bebiendo una copa, cuando vi que un hombre se acercaba a Bell. Este sonreía de medio lado por saber la diversión que tendrá esta noche.

-Nos vemos luego querida, me iré a divertir. Espero que no te moleste que me vaya primero.- dijo mientras se levantaba.

-Tranquilo, ve sin problemas. Diviértete y oye.. relaja la pelvis.- le digo riéndome con el.

-No olvides llamarme si sucede algo, estaré en la misma sala de siempre.- se despide con un beso en la mejilla.

-Esta bien, igual tu.

-Te quiero cangurito.- me dice.

-Y yo a ti cangaron.- le respondo con una sonrisa.

Vi como Bell iba desapareciendo detrás de las cortinas negras junto aquel desconocido, decide que me quedaría unos minutos mas bebiendo mi copa y luego iría a las salas,  hoy visitaría la sala de Intersexual, hacia unos meses habia conocido a una chica inter Ontari, la pasamos bastante bien, asi que probaría suerte esta noche.

Después de 15 minutos me fui acercando al área de las salas, no llamaba ninguna mi atención, hasta que llegue a la ultima, habia un grupo de personas donde estaban teniendo un orgia, me quede observando como jugaban entre ellas, hasta que sentí que alguien tocaba mi cintura y se acercaba poco a poco para hablarme al odio.