CUENTAS CANCELADAS

1.1K 98 3
                                    

Me dolía la cabeza terriblemente por haber llorado tanto con esas películas, en definitiva tratare de no ver mas televisión. Creo que las hormonas me torturaran los meses restantes de mi embarazo.

Me levanto para arreglarme y como siempre Lexa se ha levantado primero que yo, desearía algún día poder despertarme primero, pero es casi imposible. Y mas desde el embarazo me la paso con hambre y sueño. Cuando estoy lista bajo las escaleras en busca de alimento. Entro en la cocina y ahí están, Lexa y Gustus. Me acerco a los dos y les doy un beso y un abrazo a cada uno.

-Que te gustaría desayunar mi niña?.- me pregunta Gustus.

-Cualquier cosa que no lleve jamón esta bien para mi.- dije sentándome a su lado.

-Bien, te prepare unos deliciosos huevos con tocino y jugo. ¿Qué dices?.- pregunta contento.

-Me parece estupendo, gracias Gustus.- digo sonriendo de felicidad.

El se levanta despacio y va a la estufa para empezar a prepara el desayuno que me ha ofrecido.

-Crees que este bien?.- le susurro bajo a Lexa.

-Lo estará!.-me responde en el mismo tono.

-Me preocupa un poco.- digo.

-Que te preocupa?

-No lo se, siento que algo anda mal con el. Creo que lo llevare a que le hagan un chequeo. Mo intuición me dice que pasa algo.- dije preocupada.

-Esta bien, tratare de convencerlo para que vaya.- ofrece Lexa.

-No, lo hare yo!

-De acuerdo.

-Que están murmurando?.- pregunta Gustus.

-Que huele delicioso!

-Segura?

-Si!.- dije.

Espero unos minutos y Gustus pone frente a mi, unos deliciosos huevos con tocino. Realmente olía delicioso, al terminar mi desayuno agarro mis cosas para irme al trabajo.

-Estas lista?.- me pregunta Lexa.

-Si!

-Hoy no podre llevarte, debo ir de inmediato a la oficina. Andrés y Diego irán contigo, ellos estarán siguiéndote a cada paso. No lo olvides.

-Lo se, no te preocupes. Que te vaya bien cariño.- la beso.

-Cuídate mucho, no dudes en llamarme si algo sucede. Incluso si deseas comida, correré para llevártela.- sonríe.

-Eres la mejor!.- le devuelve otro beso.

Me subo al nuevo auto que me habían asignado, una camioneta blindada. Ella también se va en una de esas, y en casa se quedan dos mas, para mover a mis padres y a Lea. Gustus habia informado que no pretendía salir de la casa en un tiempo.

La llegada al trabajo fue algo incomodo, ya que todo el mundo observaba a los dos grandes y musculosos hombres que iban detrás de mi. Decio ir a la oficina del director para pedir la autorización correspondiente.

-Buenos dias señor Director.- saludo a penas me permite el paso.

-Buenos dias Dra. Griffin, ¿Cómo se siente el día de hoy?.- pregunta.

-Mucho mejor, gracias.- dije.

-En que puedo ayudarle?.- directo al grano.

-Quería pedirle un permiso!.- dije.

-De que se trata?.- cuestiona.

-He recibido ciertas amenazas que ponen en peligro a mis hijos.- llevo mi mano a mi vientre.- Por tal motivo mi esposa a contratado a dos hombres para preservar mi seguridad. Esperaba me diera su apoyo y autorización para que ellos puedan permanecer a mi lado cuidándome dentro del hospital.- explico con honestidad, pero saltándome algunos detalles.

ENAMORANDOME DE ELLADonde viven las historias. Descúbrelo ahora