ENAMORANDOME DE ELLA

TODO PUEDE PASAR

Después de que Lexa me explicara el por que de su molestia cuando apague mi teléfono y de prometerle que no lo volvería hacer, me relaje con sus caricias y me quede dormida. Cuando despierto, estiro mi mano hacia donde estaba durmiendo Lexa y me doy cuenta de que no esta, estaba sola.

Me levanto de la cama y me asusto al ver la hora, eran mas de las dos de la tarde, debía apurarme e ir al hospital, y pedir disculpas por mi retraso. Corro hasta el baño y me doy una ducha rápida, cepillo mis dientes y me visto con lo primero que encuentro, estaba arreglando mi cabello cuando Lexa entra en la habitación.

-Cariño a donde vas?.- me pregunta.

-Me quede dormida, voy tarde al trabajo.- dije corriendo de un lado a otro.

-Hace horas llame e informe que estabas indispuesta, no tienes que presentarte hoy.- dice atrapándome entre sus brazos para que dejara de correr.

-De verdad llamaste?

-Si!

-Vaya.. que bien. En verdad necesitaba descansar.- Dije relajándome de las prisas que traía.

-Lo se, por eso llame. Pensé que querrías dormir un poco, jamás me imagine que tanto y menos que roncaras.- dice burlona.

-Yo no ronco!

-Lo haces.. un poco, solo cuando estas demasiado cansada.- dice sonriendo.

-No lo hago!

-Si lo haces.- me contradice.

-Que no!.- hago un puchero.

-Esta bien, no lo haces.- se rinde.- ven a comer, debes estar hambrienta.

-Eso creo.- mi estomago parece tener vida propia, ya que con solo mencionar la palabra comer, ha rugido fuerte lo cual hace que soltemos ambas una carcajada.

-Ven.- dice tomando mi mano.

-Por cierto, ¿por que no estas trabajando?.- pregunto.

-Quise tomarme el dia para pasarlo contigo.- comenta.

-De verdad?.- pregunto feliz.

-De verdad.

Bajamos las escaleras, sin soltar nuestras manos. Una vez que estamos en la primera planta de la casa, observo que hay muchas personas afuera de la casa.

-Quienes son?.- señalo a los hombres que habían afuera.

-Son los guardaespaldas.- dice tranquilamente.

-Tantos?

-Si, Roan encontró 11 candidatos, son los mejores y según nuestro trato, dos hombres iran contigo, dos conmigo y el resto con tus padres, mi madre y mi abuelo. Clarke.. debes ir con ellos a todos lados, ¿esta bien?.- pregunta.

-Si, esta bien.- respondo sonriendo.

Me siento a la mesa a esperar que María me sirva mi comida, la cual esta deliciosa, es estofado de res, y tengo que repetir plato. Esto de tener dos criaturas creciendo dentro de mi, hace que gaste demasiadas energías. Lexa no se sorprende ni comenta nada, es como si disfrutara viéndome comer de todo, excepto jamón por supuesto. Apenas termino de comer, me lleva a la sala donde estaban todos. Por sus caras pude ver que no sabían nada de lo que pasaba y que esperaban respuestas.

-Lexa, ¿Qué esta pasando?.- pregunta Becca.

-Por que hay tanta seguridad?.- Pregunta Gustus.

-Debemos hablar!.- les dice Lexa.

-Que pasa?.- pregunta de nuevo Gustus. 

Tomo la mano de Lexa, para infundirle valor. No es fácil lo que vendrá para nuestras vidas, pero por el bien de todos, deben saber lo que sucede.