Papa Emeritus III se quedó mirando el fuego rugiente ante él. Finalmente estaba solo después de su largo viaje con El cardenal, apoyó suavemente la cabeza contra el gran sillón, su postura era relajada, pero preocupada.
Una hermana le había ofrecido su compañía la noche anterior, y él la había aceptado, nunca deseando negarle a nadie que buscase la iluminación, y sin embargo, durante la noche se había despertado después de un sueño sobrecogedor, había estado despierto desde entonces, tanto tiempo que había visto cómo la noche se convertía en amanecer y el amanecer traía la luz.
Si no estuviera nublado, todo estaría mejor, ya eran las nueve de la mañana, y sus súbditos lo estarían esperando, en la corte ansiosos por saber lo que él y El cardenal habían descubierto, acababa de terminar de vestirse, colocándose la Mitra papal en la cabeza, cuando sonó un golpe en la puerta.
-Venga. -Ordenó, observando su reflejo, uniéndose a él estaba un Ghoul, una Ghoulette y Sister Imperator.
Su rostro ya estaba arrugado pero hablaba de un tiempo atrás cuando ella era una verdadera belleza.
El Ghoul quedó inmóvil cerca de la pared, con los brazos cruzados detrás de él.-Papa, confío en que tu noche haya sido suficiente. -Dijo la Ghoulette.
Papa respondió con un"Si lo fue." , pero realmente el soñaba despierto y su sueño lo había dejado aturdido, no lo había disfrutado, ni siquiera se sintió presente, y por lo general proporcionaba más, pero esta vez fue corto, pensó que era mejor mentir que explicarle su calvario.
-¿Por qué has venido? ¿Papá Nihil? está bien, yo sé llegarias a desayunar en cualquier momento, pero vine para alertarte de un evento alarmante. -Dijo Sister, bajando la voz y acercándose. -Esta mañana temprano, nuestros Ghouls estaban patrullando como de costumbre cuando se encontraron con algo muy desconcertante. -Explicó, retorciéndose las manos.
-¿Sí? -Camino, inclinándose más cerca. ¿Qué podría haber preocupado tanto a la sister Imperator? El pensó, la curiosidad y un leve indicio de esperanza burbujearon dentro de él.
-Una niña, Papa. -Los Ghouls descubrieron a una señorita en el borde del bosque.-Dijo Ghoul Omega exaltado.-Por su aspecto, había atravesado todo el bosque.
Las cejas de Papa se alzaron ante la noticia.-¿Y ella está... ilesa? inquirió, curioso. El sentimiento de esperanza aún permanecía, tal vez ella podría ser la respuesta que estaba buscando.
-Eso parece, ahora está descansando, y les he dado instrucciones para que me avisen tan pronto como se despierte, Sister Imperator informó mientras salía de la habitación.
-Bueno, venga Papa Emeritus, tenemos un día ocupado. -Dijo Copia, Papa suspiró y volvió hacia el espejo una vez más.
Se preguntó por la recién llegada, se preguntó cómo se vería, cómo sonaría, incluso sexualmente se preguntó a qué sabría, se dio la vuelta y salió de la habitación, desesperado por saber si ella era la persona con la que había soñado despierto apenas unas horas antes.
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-Vamos Eli, ya no debes preocuparte por ellos, Agatha ordenó colocando la olla de estofado en su pequeña mesa, Elizabeth se apartó de la ventana y miró a su hermana, Agatha se apartó los largos mechones rubios de su cara y tomó asiento mientras Elizabeth se unía a ella en la mesa.
-¡Oh! ¡Se está moviendo! -Ella gritó, mientras ponía su mano en su estómago, y aún debajo del vestido, su barriga apenas comenzaba a mostrarse.
-Todavía creo que es un niño. -Replicó Elizabeth mientras servía el estofado para ambas.
Antes de que Agatha pudiera informarle que las cartas de hecho decían que tendría una hija, sonó un fuerte golpe en la puerta.
En un instante, como golpeada por una ola un deja vu se hizo presente, Elizabeth se congeló, observó paralizada, cómo su hermana se levantaba y se acercaba a la puerta.
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Ardiendo en el deseo.
RandomLa hermana y el sobrino de Elizabeth son quemados por brujería, ahora Elizabeth es la siguiente. Solo hay un problema, Agatha era inocente, pero Elizabeth no lo es. Ahora, la única forma en que puede sobrevivir es correr. Huir de todo y hacia el v...