Vidas alternas (1)

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Se sentía perdida en la gran inmensidad de aquel vacío donde se encontraba, no importaba hacia donde mirara, todo era oscuro y lúgubre con un ambiente gélido que le helaba los huesos. Poco recordaba acerca de lo que la llevó a estar en un lugar así de horrible, en un momento estaba peleando contra un villano y al otro ya estaba en ese lugar oscuro. Tenía que encontrar la forma de regresar con Darien y las chicas, sentía que se ahogaría en cualquier instante, el aire de ese lugar era muy denso. Caminaría hasta lograr encontrar de nuevo una luz o algún camino que la saque de ahí, no se iba a rendir así de fácil.

—Ella se pondrá bien, ¿Verdad? —preguntaba angustiada la guerrera del trueno a sus dos compañeras que estaban revisando el estado de la rubia dormida en sus brazos. 

La pelinegra la ignoró, no con mala intención pues estaba concentrada en leer el aura de la inconsciente de sailor moon; pero la otra chica le miró con sus ojos cansados, se acomodó sus gafas sobre su nariz y por primera vez en la noche se alejó del cuerpo de su amiga para ir por su pequeña computadora de sailor mercury. Al regresar le mostró la lectura de signos vitales que su máquina había realizado, eran un montón de números y símbolos que carecían de lógica para Lita pero que cobraban mucho sentido para Amy; y visto desde los ojos de la sailor del conocimiento, aquello no era muy alentador. 

Mina, quien sabía leer las caras de las personas, sabía que el diagnóstico espiritual de Rei eran tan desolador como el de Amy. Lo que la molestaba era que la triste situación de su amiga no le sorprendía para nada, no después del villano con habilidades problemáticas que las había tomado por sorpresa en un día de campo fuera de la ciudad. Aún recordaba el pánico que la recorrió cuando sailor moon dejó ir la oportunidad de acabar con el villano para proteger al niño que había llamado la atención del villano, recibiendo ella misma una descarga de poder del enemigo. 

—¡Ahí está! —exclamó Rei de repente, captando la atención de las tres que esperaban ansiosas a que su lectura terminara. —El alma de Serena, al fin la encontré. 

Su corta explicación deja confundidas a sus compañeras, quienes poco entienden el idioma de la azabache cuando habla sobre espíritus o elementos sobrenaturales, Rei se da cuenta de la situación y les explica paciente el estado de su amiga.

—No sé cómo, pero de alguna manera el ataque logró perforar su alma y su cuerpo entró en shock, ahora intenta reparar la ausencia del pedazo de alma que le hace falta pero no podrá hacerlo y sufrirá hasta que su aura sea restaurada por completo. —En ningún momento Rei apartó la vista de su amiga rubia, su situación era, por mucho, delicada y era apremiante que Serena sobreviviera las próximas horas en aquel limbo donde quedó varada o quedaría atrapada para siempre en ese lugar.

—¿Cómo le regresamos el alma? —Mina estaba atenta a los gestos de su amiga y el ceño impotente le instaló un terrible sentimiento en su pecho. 

—No podemos, ninguna de nosotras puede...Solo Serena es capaz de salvarse —declaró como última palabra.
Omitió un detalle que resultaba crucial para que su amiga regresara: para poder encontrar el camino de vuelta, Serena debía recordar su identidad todo el tiempo. Y aquello era algo imposible de lograr, ninguna de las pocas personas que les sucedió algo similar a lo largo del tiempo pudieron regresar a la normalidad. Sin embargo, si algo sabía la sailor de Marte, era que nada era imposible para sailor moon.

❁❁❁

Dejaba el control del estéreo sobre la mesa, al ritmo de la música tranquila que reproducía su disco favorito, cortesía de un regalo de cumpleaños.
Se sentó en el sofá y continuó con su lectura en el libro de ese mes. Ese día no tenía mucho que hacer, no fue a la universidad y su novia había salido en un picnic "solo para chicas" con sus amigas y él no tenía intención de interferir tampoco.

Darién & SerenaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora