Ex de verdad.

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Premisa.
Darien ha terminado su relación con Serena a causa de unos extraños sueños, pesadillas, que lo orillan a tomar está decisión. Sin embargo, Serena deja de intentar arreglar las cosas y se obliga a enterrar sus sentimientos en lo más profundo de su ser.

El destino encaprichado los vuelve a juntar esperando que sus almas se abracen en un por siempre.
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OS :Un ex de verdad.
AU: sailor moon.
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Tokio, Japón. Actualidad.
12:34 p.m.

"Mierda, llego tarde"

Miraba el reloj en su muñeca con impaciencia, esperando que alguna divinidad interviniera e hiciera un arreglo para que su cliente no la mandara a volar por el retraso de una hora en su cita.
Quizás ya es una adulta de veintiuno años pero algunas costumbres nunca mueren.

—¡Señor pare por favor!, ¡Bajo aquí! —pidió con desespero al notar que su parada era hace dos manzanas. En cuanto bajó del autobús, aún no costeaba un auto, corrió abrazando su mochila con la cámara en ella hasta donde era aquel evento.
Una linda boda en un salón con un gran jardín, con muchos rosales y fuentes preciosas; la descripción de la novia sonaba parecida a las que ella soñaba cuando iba en secundaria e imaginaba con Molly la boda perfecta.
Se arregló un poco el cabello para lucir decente, después de haber corrido entre callejones, y tocó el timbre de aquel enorme portón de madera.

La dejaron pasar cuando se presentó como la fotógrafa del evento, aunque era extraño que la confundieran con alguien de la prensa, tal vez le veían parecido a Mina ahora que llevaba el cabello suelto.

El lugar era tal cual lo imaginaba, pero los adornos, para un evento tan especial como lo era una boda, eran demasiado simples, discretos en extremo y un poco insípidos. Sin querer verse como una chismosa, siguió su camino hasta el gran salón donde una de las invitadas, quiso suponer, la llevó deprisa con el anfitrión del evento.

Nunca en su vida llegó a pensar en lo que estaba a punto de pasar, mucho menos de a quien iba a encontrar en aquel evento.

—¿Darien?, ¿Eres tú? —demandó atónita por lo que sus ojos le mostraban. Todo había perdido sentido, olvidó por completo hasta el suelo en el que estaba parada, sus ojos siempre la transportaban a otro lugar muy lejos de la Tierra.

Se veía absolutamente apuesto, tenía puesto un traje celeste que resaltaba sus mirada, y que se ajustaba como un guante a su cuerpo; incluso su cabello estaba ligeramente despeinado, a propósito, dándole un aura más rebelde.

Espabiló un poco cuando le golpearon el hombro al pasar, y hubiera deseado no hacerlo, así no se habría dado cuenta de la cruda y cruel realidad:
Ella estaba ahí para enmarcar una boda y Darien era el novio.

— Serena... Que grata sorpresa, hace tiempo no nos vemos —sonrió galante y ella podría jurar que se sentía con las piernas de gelatina —,¿Cómo has estado? —Se acercó y con amabilidad besó una de sus, estaba segura, enrojecidas mejillas.
Aunque no estaba muy segura de la razón, justo por la última frase que salió de su boca.

¿En serio le estaba preguntando si estaba bien después de todo?
"Tonto y antipático Darien"
Pero con un demonio que con todo y lo antipático, Darien era como un buen vino, con el paso del tiempo solo se vuelve aún mejor.

— No me puedo quejar. —respondió evasiva, rompiendo de inmediato su cercanía alejándose un par de pasos. Una cosa era estar frente a él y otra era soportar un contacto que la haría perder el balance.
Su salvación llegó en forma de una linda mujer con vestido jade que por sus delicados movimientos, Serena aseguraba que pertenecía a la Meca de la elegancia. No le sorprendía, ese siempre había sido el tipo de gente con la que Darien se codeaba.

Darién & SerenaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora