Guerrera

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- Bien, bien, veo que elegimos el vestido correcto, ¿no lo crees Theodore?

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- Bien, bien, veo que elegimos el vestido correcto, ¿no lo crees Theodore?

El vampiro al fin había dejado que su vista llegará a Elizabeth, quedando como una estatua de pie en la puerta, viendo a la mujer de la que estaba obsesionado, sintiéndose flechado nuevamente mientras que la vampira estaba soportando las ganas de voltear los ojos, con seriedad total en la mirada, dirigiéndose únicamente a Aro.

-Es un vestido muy hermosos rey Aro, agradezco que se tomara la molestia de elegirlo para mí.

Elizabeth dio una pequeña reverencia al vampiro quién la veía emocionado rió antes de posicionarse al centro de sus cogobernantes con las manos escondidas en la capa, hasta ese momento la vampira notó que vestían con los mismos trajes dorados de hace tantos años y debía admitir que les quedaban muy bien, dejó que su vista se fijara en Theodore por apenas unos segundos cuando este se puso a su lado, vestía un traje negro con detalles rojos, con un chaleco en lugar del saco, mangas acampanadas que se ceñían a sus muñecas.

-Bien, recuerdo tus destrezas cuando eras una integrante de nuestra familia, queremos que ustedes nos diviertan con un duelo, amistoso claro.

Aquello no tenía nada de amistoso a la vista de Elizabeth, pero no podía negar que deseaba moler a golpes a Theodore una vez más, pero entonces Aro chasqueó los dedos, dos vampiros llegaron arrastrando un tablón gigante lleno de armas blancas, espadas, dagas, hachas de toda clase y varias lanzas, Elizabeth no pudo evitar sonreír al ver tantas armas, vio a Caius como pidiendo permiso y este asintió junto a sus hermanos, levantando su falda corrió hacía el tablón para comenzar a pasar sus dedos por sobre todas las armas, en especial por las espadas y dagas, tanto se concentró en estos que ni siquiera noto que los reyes habían caminado hasta el estrado y que varios vampiros habían aparecido; entre ellos Rose, Dominic y Erick quienes se habían quedado en la planta baja para ver de cerca el enfrentamiento.

-Elijan su primer arma, luego podrán cambiarla si son desarmados pero sólo tienen dos oportunidades, tres round, el primero en ser desestabilizado gana.

Elizabeth tomó una espada curva egipcia sin dudarlo, mientras que Theodore seguía de espaldas debatiendo en que arma usar, tomó dos sai acomodándolos con cuidado en sus manos, la vampira sonrió jugando con la espada mientras se acercaba al aro de luz que se había formado en el centro.

Dio una reverencia que fue correspondida por Theodore mientras que Erick comenzó a moverse nervioso, le gritó dos palabras de aliento a su hermana quien sólo tenía la vista puesta en su objetivo, sus ojos negros como el carbón, su piel brillando, que por primera vez no estaban llamando a Theodore, realmente lo estaban asustando y le gritaba que se alejara, el hombre tragó con fuerza haciendo a los reyes reírse.

-Todo está permitido, incluso las artimañas sucias, pero sólo para los participantes, si alguien intenta hacer algo será castigado inmediatamente.

Marcus fue el que tomó el lugar de la esquina de la derecha donde había una grada para hacerlo llamar la atención.

Para Siempre [Emmett Cullen]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora