Te perdí

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Gatlinburg, Tennessee, 31 de Diciembre de 1934

En la calle se veía una gran escena donde muchas de las familias del alrededor estaban reunidas pues la familia Mccarthy y la familia Cudmore estaban celebrando juntas el fin de año, Emmett se había alistado desde hacía varias horas con un traje simple color azul marino que Elizabeth le había obligado a comprar, le quedaba muy bien eso lo admitía pero él no solía ser de usar trajes para impresionar, Elizabeth aún no se decidía por cuál de los conjuntos que había comprado para ese día en especial usar, ambos combinaban perfectamente con el traje que había elegido para su amigo y esa era la idea pero no podía elegir. Elizabeth se vio obligada a pedir ayuda a su madre quién rápidamente señaló el vestido de terciopelo rojo, con los hombros caídos y ajustado hasta la cadera donde luego caía en una falda de corte A, la muchacha tomó el vestido para ponerlo con cuidado sobre su piel, se vio en el espejo y sonrió por lo bien que suponía verse, tan pronto como se sentó en el otomano de su tocador para colocarse los zapatos y poder peinarse pues optó por no maquillar más que sus labios de un café rojizo que su madre le había regalado, escuchó dos toques a la puerta

- Adelante

Por sus pensamientos cruzó la imagen de su padre que vendría a apurarla para que bajara a saludar a toda su familia pero en vez del adulto de cabello marrón, un joven de negro cabello rizado y prominentes músculos se hizo presente en la habitación sin cerrar la puerta sobre él

- Tu madre me envió a decirte que tus tías han llegado, pero una belleza de dama no puede ser apurada

Elizabeth soltó una risa por el comentario de su amigo, volvió a verse en el espejo sin saber que peinado usar, el joven pronto se posó detrás de ella dibujando una maravillosa sonrisa encantadora que podría derretir a cualquier mujer que la viera por primera vez, y como si pudiera leer sus pensamientos sonrió

- Yo lo dejaría suelto o tal vez con un medio recogido

Elizabeth optó por hacer un semirecogido poco ajustado a su cabeza y realmente se veía bien, sonrió volviendo la mirada a su amigo que aún estaba tras de ella

- Tú desde cuándo sabes de peinados?

Elizabeth se levantó su lugar para tomar el brazo que Emmett le extendía con coquetería, pues se sentía afortunado de tener a su lado a tan bella mujer como su mejor amiga

- Vamos Liz, he pasado horas escuchándote y a mi madre hablar sobre los nuevos peinados de moda, algo tenía que entrar en mi cabeza no crees?

Tan pronto como bajaron las escaleras y cruzaron el portal que conectaba ambas casas Elizabeth fue robada de los brazos de Emmett por sus tías y primas, hablando de lo mismo, que tan guapo se había puesto Emmett y la mujer se acreditaba el éxito de su buen aspecto, presumiendo su creación, como ella lo llamaba sin demasiada modestia, algún primo de Emmett se había llevado un golpe por los poco apropiados comentarios que hacían sobre la bella mujer en la que Liz se había convertido, pronto todos estaban en la pista de baile que la señora Mccarthy había mandado a construir para esas ocasiones, la música llenaba de felicidad a la familia pues pronto entrarían en una enorme depresión que nunca esperarían, Emmett se acercó a su amiga para invitarla a bailar y esta aceptó con facilidad, pues amaba bailar y más aún con una persona con la que combinaba tan bien

- Lamento decirte que el saco quedó perdido, enserio me siento incómodo en este estúpido traje.

Elizabeth río mientras palmeaba el pecho de su amigo, dieron un par de vueltas antes de volver a sus posiciones, la música era lenta pues sus padres no estaban de acuerdo con la música que estaba de moda en ese momento y eso les daba la oportunidad a las parejas que estaban en la pista de poder hablar mientras movían sus cuerpos al ritmo de la lenta tonada.

Para Siempre [Emmett Cullen]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora