Andaba con una mano en el bolsillo mientras que con la otra escribía mensajes de texto. Supuse que estaría hablando con sus amigos, y me limité a caminar a su lado. En poco llegamos a un parque con bancos y césped, en uno de estos se encontraban 3 chicos, uno castaño casi pelirrojo, otro rubio muy claro y un chico con el pelo negro. Los saludó chocando sus manos mientras me quedaba al margen, observando la escena.
-Ella es Alex, es mi... vecina.
-Ah!- Exclamó el pelinegro, pero Oliver lo miró fulminante.
-Yo soy Nate.- Dijo el castaño pelirrojo.- Ni caso, están locos.
-Loco andarás tu.- Repuso el rubio.- Me llamo Gabriel.
-Y yo Jacob.
-Encantada.- El pelinegro sacó una cajetilla y puso un cigarrillo entre sus labios.
-¿Quieres?- Dijo ofreciéndome.
-No gracias.
-¿No fumas?- Preguntó Nate.
-Me asfixio.- Respondí.
-Tampoco lo soporto.- Me dió los 5 y los choqué.
-Ya sabes Jacob, fuera.- Sentenció mi querido vecino.
-Joder... Que sepáis que lo hago por ella, vosotros me la chupais un...
-Eh!- Cortó Nate. El pelinegro se había distanciado de nosotros.
-Favoritismo.- Argumentó el rubio y fue respondido por un corte de manga por parte del tal Jacob.
Observaba divertida la escena, miré a Oliver el cual se mantenía callado. Dejó de mirarlos y enfocó la vista en mí. Pero por una vez, era una mirada amistosa, sin sarcasmo. Y entonces, entonces me dedicó una sonrisa a medias, de boca cerrada pero sincera. Mi estómago me pellizcaba, mis ojos se perdieron en el azul de los suyos, y no pude reaccionar. Si, todo muy cursi, habrá que veros a vosotros.
-Bueno que, ¿nos vamos?- El idiota asintió y comenzamos a andar. Estaba confundida.
-Ahora vamos a la pista.- Se acercó a mi y andamos juntos.
-¿Pista?- Pregunté al castaño pelirrojo.
-A jugar al baloncesto. ¿no te lo ha dicho Oliver?- Negué, y tras una visual pude notar que iban vestidos con ropa de "deporte".
-¿Jugáis?
-Y bastante bien.- Saltó el rubio andando de espalda mirándonos.
-¿Te gustan los deportes?
-Ella corre.- Dijo un poco serio mi compañero de cuarto.
-Si, corro por las mañanas, y me gustan los deportes.
-Perfecto, porque saliendo con este te espera muucho deporte.- Argumentó Jacob.
Los restantes lo miramos, ya fuese por ese "saliendo" o por el doble sentido que pretendía dar a entender con lo de "mucho deporte". Al ver nuestras caras intentó excusarse.
- Oye no, lo digo desde el lado más inocente, malpensados.
-Malpensado tu, nosotros no sugerimos nada.- Aclaró Nate.
-Eso, tu siempre con lo mismo.- Continuó Gabriel.
-Somos normales, en serio.- Me indicó el castaño pelirrojo.
-No le mientas.- Dijo Oliver.
-Tal vez debería preocuparme.- Dije sarcástica y sonreí. Todos me siguieron.
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El idiota que tanto amo
RomanceAlex: decidida, alegre y con un pasado que no quiere recordar. Oliver: sarcástico, egocéntrico y terriblemente atractivo. ¿Podrán convivir juntos o su pasado removerá lo que ya estaba enterrado? Historia reformada entera.