Yo soy Giulio Mancini

Capitulo 51

Uno... Dos... Tres....
Uno... Dos... Tres...
Uno... Dos... Tres..

--Vamos Giulio...!..

Mis manos temblaban mientras le daba rcp a mi esposo. No lo iba a dejar, él no me podía dejar.

--Maldición Giulio vamos, escúchame estoy aquí... Maldita sea Giulio juro que me pagarás por hacerme esto.

Uno... Dos.. Tres..
Uno... Dos.. Tres..

--Sammy! - Domenico me quería alejar.

--No!!!

Uno.. Dos.. Tres..
Uno..Dos..Tres..

--Maldita sea Giulio. - Le pegue fuerte en su pecho mientras veía sus mejillas pálidas.

--Abre los ojos, vamos Giulio abre tus ojos.

No me vas a dejar... Me perteneces y te pertenezco... Vamos Giulio.... No me dejes por favor....

Uno a uno los recuerdos buenos llegaban a mi mente mientras seguía dándole respiración boca a boca  a mi esposo.

Hasta que sentí su leve respiración.

--Giulio... -Lo tenía de nuevo.

No pare hasta que su pecho de nuevo estuvo conteniendo el aire que mis pulmones habían contenido.

--Lo tenemos.... Lo tenemos...!! - El grito de Domenico alertó a todos.

El equipo médico me hizo a un lado mientras yo me abrazaba a Domenico que también respiraba con dificultad.

--Estas bien Samantha?! - Era la primera vez que Henry Cavalli había tenido un gesto amable para con mi persona!

--Hierva mala nunca muere-Me dijo al oído. Mientras me dio un sentido abrazo.

--Gracias Henry.

--Samantha, no lo dejaste ir.. - Me dijo el ruso.

--Nunca. Bajaría al mismo infierno y se lo quitaría al diablo con tal de tenerlo a mi lado.

Pude ver como Giulio era levantado en una camilla y le podían un suero.

--No sabemos que clase de droga tiene en su sistema, necesitamos llevarlo al hospital de inmediato.

Me fui con el en la ambulancia aérea mientras Domenico coordinaba el nuevo lugar donde sin duda iba a matar a Cinnia Mancini.

No me importaba manchar mis manos de sangre. Valía la pena.

--Que le van hacer.?!

--Tenemos que tomar una muestra de la sangre, saber que clase de droga alberga su sistema, su cuerpo está como inerte. Por más que respire parece un cadáver.

De oír sólo la expresión sentí los ácidos subir por mi garganta.

--Giulio esta vivo, es lo que me importa. Necesito que lo atiendan los  mejores médicos de este país, no me importa si los deben de secuestrar si se rehúsan. Los quiero atendiendo a mi marido.

--También quiero que aten a esa bruja, y la quiero bien consciente, me las va a pagar.

--Samantha.

--No te metas Domenico. No me importa nada mas que eliminar a esa maldita mujer de la faz dea tierra.

Nunca antes había sentido tanto odio, un día pensé que odiaba a Giulio pero no se sentía ni la mitad de lo que estaba albergando esa mujer se había metido con lo que más amaba. Mi familia.

Al aterrizar en el hospital el equipo de primera esta esperando a Giulio. Decir que la espera fue agotadora era lo mínimo que estaba sintiendo. Tenía dolor de cabeza, no había comido nada y los medicamentos que me tenia que tomar no los tenía a la mano.