Yo soy Giulio Mancini

Final Parte 1

Samantha Mancini.

Veo mi reflejo en el espejo y si alguna vez rechace la idea de sentar cabeza ahora era todo lo contrario. Veía mi reflejo en el espejo con el vestido que yo personalmente elegí.

Las flores, la decoración, el catering service, el vestido de mis damas de honor. Todo, solo me hacían falta dos cosas, mis padres.

Hace más de tres meses que planee la boda con Naty y Lucía, bueno la renovación de nuestros votos matrimoniales, esta vez pude elegir, no estuve forzada, nadie me amenazó ni tampoco me dio un ataque de pánico.

El vestido es largo y la cola de sirena es más que majestuosa, la decoración en el escote en forma de v y la pedrería le dan ese toque de ensueño, que siempre una novia quiere.

El velo que es largo y Naty me ayuda a cubrir mi rostro, el maquillaje es sutil, y mi cabello suelto que Giulio tanto ama esta en pequeñas ondas que le dan elegancia a todo el atuendo.

--Sammy, Dios no quiero llorar. - La barriga de Naty es enorme ya con sus seis meses de embarazo y los gemelos que tendrá con Henry hacen que mi amiga esté más que vulnerable.

--No llores Naty. Me costó mucho no hacerlo a mi, no lo hagas tú por favor. - Le digo mientras respiro una y otra vez.

Toco mi abdomen y el pequeño bulto que solo se nota sin ropa hace que trague la bola que se forma en mi garganta.

"Esto que pueden ver, son las extremidades del bebé, su cabeza, su corazón y ahora¿ quieren saber el sexo?"

Mi corazón martillea mientras veo a la doctora que mueve el aparato en mi abdomen.

--Vamos a ver ¡acá esta!  Señores Mancini tendrán un hermoso niño felicidades.

Mis ojos encuentran los de Giulio mientras el no retira la mirada de mi. La doctora sale dándonos un momento de privacidad, mientras aún Giulio me sostiene la mirada.

--Un niño Samantha. - Dice mientras me acaricia la mejilla, se inclina y me besa la frente, en gesto lleno de amor, uno del cual soy su único testigo.

--Los amo, y daré mi vida por ustedes, por que ahora tengo a mi familia. Seré tu apoyo en cada día que pase, juro por mi vida Sammy que seré el mejor padre y esposo para ustedes.

Recordar ese momento tan intenso mientras estoy vestida de novia hace que siga conteniendo las lágrimas que se pegan a mis pestañas.

--Hay no, ya ustedes dos por favor, ya el maquillista empacó todo, y no va a volver a sacar el maquillaje una vez mas. - Lucía me extiende un pañuelo para secarme las lágrimas y no dejar que se manche mi rostro.

Solo quisiera que mamá estuviera aquí, que fuera ella y papá quienes me dijeran que me veo hermosa, que están felices por que al fin tendré a mi propia familia, y que ellos tendrán a su nieto.

El recordar hace que la opresión en mi pecho me estruje, camino a la ventana mientras veo a las personas en el jardín charlando en las mesas que se dispusieron antes de empezar con la boda.

--Sammy, te deseo lo mejor del mundo, siempre estuviste conmigo desde ese día en el bufete del Señor Smith hasta el día de hoy. No podemos decirle al corazón, enamórate de este sí y de este no. Sé que amas a Giulio y lo has demostrado con hechos, te deseo felicidad amiga hoy y siempre. - Naty rompe a llorar como una Magdalena mientras mis ojos se humedecen.

Nos abrazamos mientras Lucía también deja caer una lagrima en sus mejillas.

La puerta se abre y Domenico pide que me dejen sola, me resulta extraño por que mis damas de honor van a entrar primero que yo.