Moments (Starker family fic)

10. Preparativos

Notas de Autora: Este capítulo va dedicado a Wanda y su relevancia para los próximos capítulos. ¡Gracias por leer!~

Prompt: Compras

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Cap 10: Preparativos

Wanda Maximoff suspiró con satisfacción cuando le echó un vistazo a su Stark-genda, un modelo que era plateado, de última generación y no tenía nada que envidiarle a las tablets de iPhone. Se acomodó un poco el pelo, mientras rodaba nuevamente en su sillón hasta casi llegar al borde del mismo. Sus ojos recorrieron nuevamente la lista de invitados, asegurándose que no faltara ninguno. No todos los días un doncel conocido y respetado por el equipo quedaba encinta, y apenas se enteró, pidió ser la organizadora principal del Baby Shower de Tony Stark.

Desde luego, no le había extrañado en lo absoluto cuando se enteró quién era el otro padre de la niña. Era tan obvio que la pregunta casi cumplía el efecto de ofender a la pareja, por lo que omitió lo obvio y pasó directo a la acción: nuevo bebé, implica nueva rutina. Nueva rutina, implica responsabilidad. Y muchas cosas que comprar. ¡A Wanda le encantaba comprar!

Al ser madre soltera, sabía de sobra el trabajo que tanto Tony como Peter tendrían que pasar y por ende, no dudó cuando Tony le citó aquella vez en su morada. Sin duda, como diría su hermano que en paz descanse, aquello no lo había visto venir, puesto que siempre le pareció claro que ella no era una de las personas favoritas en la vida del hombre de hierro. Por lo que Wanda hizo de tripas corazón y mantuvo su distancia para con él dentro del equipo: únicamente se habían hablado por asuntos de trabajo y misiones, para nada más.

No eran los mejores amigos, eso estaba claro, pero al ser los adultos que eran, Tony y Wanda trataban de llevar la fiesta en paz y de mantener el trato cordial entre ambos. No había nada que los uniera, nada que compartir salvo silencio con miradas inexpresivas de por medio, y cuando ella quedó encinta, tuvo que pedir licencia y alejarse del equipo para poder tener a sus gemelos y criarlos durante los primeros años en paz.

Wanda no tuvo ayuda de nadie, estaba sola, ningún familiar que conociera quedaba vivo y aun así, pudo sacar a sus hijos adelante, como solo ella pudo.

Ahora que Billy y Tommy tenían siete años e iban a Primaria, Wanda volvía a recuperar parte de su tiempo libre, al menos cuando sus hijos no estaban en casa. Y como era tradición: cada bebé que estaba en proceso de llegar al mundo, merecía su Baby Shower, una celebración especial en donde los mejores amigos de la bendecida pareja se ponían de acuerdo para comprar regalos y cosas útiles que necesitaría la pareja apenas su bebé naciera. Desde lo más básico hasta lo más extravagante: ropita, cadenitas y zarcillitos de oro, adornos para el cabello, los baberos; cubos de colores para sus primeros años, fórmulas especiales que complementaban con la leche del doncel para su consumo... en fin, todo lo básico que tanto Peter y Tony podían necesitar para su niña, todo durante las primeras semanas.

Se supone que los Baby Shower son organizados por personas muy cercanas a la pareja. Visto así, la opción más lógica para organizarlo hubiese sido Pepper, Happy y May Parker. Sin embargo, no podía contar con ellos y tampoco era que se ofrecieron mucho. Entendía que podían estar ocupados o simplemente, no asistir.

Pepper tuvo cierta historia con Tony antes de salir con Peter, y Wanda como mujer, podía entender sin tanto detalle el hecho de que asistir a dicha celebración podía llegar a ser algo muy incómodo. No sólo para ella, sino para Tony y eventualmente, para todos. Porque eran situaciones que podían llegar a ser tan tensas que saturaba el ambiente.

Ahora, los amigos más cercanos de Peter (Ned y MJ, si su memoria no le falla), colaboraron con ideas para regalos y ya confirmaron su asistencia. Por ende, una preocupación menos para Wanda, que quería que todo saliera perfecto. Un Baby Shower generalmente era para divertirse, para relajarse, y a veces incluso, para esperar la llegada del recién nacido estando en compañía. A veces los partos se adelantaban, entonces era mejor que Tony no estuviese solo al momento de romper fuentes.

Wanda tuvo la experiencia de su parto en su propia casa y vaya que fue una putada. No se lo desearía a nadie, estando en las condiciones en las que se vio involucrada. Sin mucha experiencia, sin mucha guía ni orientación.

Todo lo que Wanda conoce de sobra hasta ahora, ha sido en base a ensayo y error. Y aunque todavía podía llegar a sentir mucha culpa por lo ocurrido Sokovia, a pesar de que ya haya pasado casi una década sobre ese suceso, Wanda no puede olvidar.

En realidad, no cree tener la capacidad (ni el deseo de) olvidar.

Por lo mismo, esta vez quiso ser una parte activa de algo. A ella no le gustaba deber favores y al unirse a los Vengadores, pudo vivir de la comida y del techo de Stark durante mucho tiempo. Pudo conocer al amor de su vida encerrada en esas cuatro paredes, cuando creía que no había lugar para ella. Cuando creía no merecer nada.

En cierta manera, Wanda sentía que le debía algo a Tony Stark.

Y lo menos que podía hacer para sentir que estaba saldando parte de su deuda, era en organizarle esta celebración especial. Quería que fuese perfecta, porque Tony, al igual que ella, también merecía momentos de felicidad.

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