Advertencia: Ninguna realmente este One shots será muy lindo y a la vez triste creo yo jajaja.
Personaje: _________.
Palabras: 2,745
N/a: Volví a subirlo y escribirlo porque siendo honesta con ustedes el anterior me pareció espantoso. Así que será el mismo que él anterior sin embargo cambie varias cosas y puse otras para continuarlo en la segunda parte.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Un Razor Crest navega entre la inmensa oscuridad del espacio, rodeada de hermosos astros resplandecientes.
Mira con atención aquellas presencias que conocen su vida y no quieren decírsela. Perdió la capacidad de recordar sus memorias, perdió su vida y no sabe como recuperarla. ¿Tenía una familia? Si así era entonces porqué no la han buscado. Las únicas personas que la buscaron fueron la primera orden y está segura que ellos no eran su familia, ni siquiera recuerda por qué la buscaban en primer lugar. Ahora que la primera orden cayó podía caminar libre sin necesidad de esconderse, pero no tenía donde caminar sin sentirse sola.
Inundada en sus pensamientos no pudo notar cuando un pequeño niño de color verde y orejas grandes se sube a su regazo. Siente como su chaqueta es jalada, baja la mirada y encuentra los grandes ojos del niño que la observan, pronto la mirada del infante pasa a su bolsillo.
—¿Quieres galletas?
Asiente con la cabeza. Rebusca entre los grandes bolsillos que tiene la enorme chaqueta. Su chaqueta era gigante para su pequeña figura, aún así era la única prenda que parecía ser de alguien cercano a ella o eso creía por eso no se la quita a menos que sea necesario, siempre la mantiene cerca con la esperanza de poder recordar algo de su dueño original. Saca el envoltorio plateado, abrió las galletas sacando dos, una se la entregó al pequeño y la otra se la llevó a los labios.
El Mandaloriano ingresó a la cabina después de dormir por un largo tiempo. Observa al niño y a la mujer que los ha acompañado en su misión comer unas galletas azules. Capta la mirada del menor que balbucea palabras, la mujer que lo carga gira su rostro cruzando su mirada con la de él.
—Tienes el sueño muy pesado Mandaloriano —comenta, mira al frente donde está la silla del piloto—. Tuve que pilotear la nave mientras dormías para seguir vivos unas horas más.
—¿Sabes pilotar? —cuestionó intrigado. Ella lo mira, se encoge de hombros antes de responderle.
