━ Nahoya es un omega primerizo con sus propios sentimientos.
A Ran no le interesa el amor y es uno de los alfas más codiciados de la universidad.
─ Los shipps secundarios se darán con el transcurso de la historia.
─ Créditos al fana...
El rumbo de la historia ya está planeado hasta el final pero veo que les interesa la pareja de Taiju y Nahoya, era un intento de cierre, gente!! Ningún Taiju fue lastimado en el proceso.
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Ironicamente, Ran sabía que estaba haciendo mal.
Pero ese era el trato, ambos intentarían sacarse esas ganas de encima, intentar disipar el deseo hasta que estuvieran satisfechos. Pero no habían pasado de besos aún, solo... intentaba luchar contra ese deseo en su interior.
Sabe lo está lastimando, pero algo en él seguía acobardandose, tal y como hace unos años. No piensa demasiado en eso, no lo hace hasta que Nahoya llega a su oficina mirándolo con una determinación que lo hizo temblar.
-Terminemos esto.
¿Qué? ¿De qué estás hablando?
Arqueó la ceja y se recostó en su silla.
-¿Puedo preguntar el porqué?
-Puedes hacerlo: no me siento cómodo conmigo mismo -Dijo Nahoya, sin pelos en la lengua, claro y conciso.
Fue como un golpe a su ego, parpadeó sorprendido, pero luego soltó una risa baja. Está bien, el lo dejaría, no había ningún problema en ello. Lo observó y asintió, mientras sus dedos golpeaban la mesa repetidas veces.
En serio, incluso él mismo sabía que era lo mejor.
Que no debería importarle como Nahoya salió por la puerta casi temblando por el frío del día, que su lobo estuviera volviendose loco gritándole que no debía dejar ir a Nahoya, que debería atraparlo en sus brazos.
Es un hombre comprometido, todo debía ser así.
No es el primero en pasar por su cama, tampoco será el último.
No debía pasar días pensando en Nahoya encima suyo, tan bonito mientras se dejaba hacer ante sus toques y sus besos. Él no piensa en eso, jamás lo hace.
No tiene una fijación en la forma en la que pronuncia su nombre luego de una serie de besos nada castos y como pasa sus dedos por su cabello acariciandolo lentamente.
No.
No le interesa. Jamás lo haría.
Todo seguiría como debía, como había estado funcionando desde hace años. Ran debe estar ahí para Yuzuha, su mejor amiga, su otra mitad, no debería estar pensando en alguien más. No cuando él ya le prometió a ella.
Poco a poco volvería al ruedo, a acostumbrarse a verlo por ahí en el set saltando de un lado a otro feliz mientras él se encarga de revisar que siga su rumbo correctamente, luego debería devolverse a su oficina y seguir el papeleo que le encargaba Koko cada semana como si no tuviera vida propia.
Todo pasaría con el tiempo, Yuzuha le ofrecería un poco de sexo pronto para aliviar el estrés de ambos como solían hacer cada mes, solo tenía que esperar y todo ese mal humor se iría. Pero el problema es que el mal humor no era a causa del sexo.
Cerraba los ojos y lo sentía en la punta de sus dedos, cada una de las caricias sútiles y los besos en su boca, cuando los abría, la frustración volvía a todo su cuerpo como gritándole que era un idiota.
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Draken siempre era realmente agradable, así que para Akane no fue nada complicado el optar por tener otra cita con él.
Draken... era simplemente increíble, congeniaban a la perfección como si estuvieran sencillamente hechos el uno para el otro, y no le molestaba para nada, seguramente para cualquiera sería un privilegio tener a ese alfa.
Es solo que, tal vez a veces era realmente incómodo que las miradas de Koko viajaran hasta ella a cada segundo, como si quisiera saltar encima de ella, y no de una buena forma. Parecía que gruñía, como si estuvieran arrebatandole lo suyo.
Así que se plantó una duda: ¿Koko consideraba a Draken como suyo?
Y la platicó con Draken, pero él no le dio la respuesta que esperaba.
-¿Koko y yo? No te preocupes de eso, hace mucho tiempo pasó -Se encogió de hombros, como si sencillamente el tema no importara más-, creo que me odia incluso, tal vez está molesto de que me acerque a ti, eres su primer amor.
-¿Tú crees? -Akane dudosa, intentó leer a Draken- ¿Realmente todo está en el pasado?
-¿Estás muy curiosa? -Draken la observó, dio una calada a su cigarrillo y luego soltó el humo a un lado- No lo sé, realmente. Para mí ya todo terminó, no sé si él quiere reabrir la herida.
-Tal vez es una herida sin costra.
-¿Ah?
-Tal vez esa herida que nombras nunca cerró, o jamás tuvo la intención de cerrar. Draken, dime ¿Has salido con alguien más en este tiempo? -Draken dudó, realmente lo pensó.
-No seríamente, aunque, el único que cree que esto entre ambos es serio es tu hermano -Se encogió de hombros.
-¡Eso es! -Akane dio un salto de alegría, como si hubiera encontrado la respuesta de todos sus problemas- Vas a recuperar a Koko.
-No, eso ya no es lo mío.
-No es pregunta, Draken -Akane lo miró divertida.
Akane realmente tenía una habilidad, leer a las personas era tan fácil pero los enamorados no lo veían, así que ella misma considera que es una habilidad. Pudo ver el anhelo en los ojos de Draken, y era verdad, lo de ellos no era nada serio.
Incluso si está ahí, acostada bajo las cobijas de su cama, si ambos están distraidos observando la televisión y Draken se dedica a acabar ese cigarrillo, todos merecían aprender a amar.
¡Ella sería el cupido de esos dos tontos!
-Draken, mirame -Pidió.
Draken lo hizo, volteando levemente, Akane levantó su telefono y le mandó la imagen a su hermano. Draken no alcanzó a ver por la rápidez, pero vio la acción sospechosa.
-¿Qué haces, loca?
-Mandándole una foto de ambos juntos a mi hermano, que está en una salida con tu ex novio.
-¿¡Qué!? ¡Borra eso! -Se alarmó, intentando tomar el teléfono de la chica.
-¡Imposible, ya no se puede borrar! -Akane se rio, moviéndose rápidamente para escapar de las garras de Draken.
-¡Estás loca, Akane! ¡Por dios!
-¡Deberías darme las gracias, desagradecido! ¡Vas a tener novio por mí! -Se carcajeó, corriendo por la habitación con el chico tatuado detrás de ella.
-¡Seishu va a matarme! ¿¡No ves la gravedad del problema!?
-¡Soy sorda no veo!
En otra parte, Seishu revisaba sus mensajes, hasta que observó el de su hermana. Una. Foto. Con. Draken. EN. LA. CAMA.
-¡Maldito hijo de puta! -Gritó, asustando a Koko que tomaba tranquilamente su batido.
-¿Hm? ¿Qué pasó?
-¡Draken! ¡Eso pasó! Mira esto, Koko -Seishu en su ataque de enojo volteó el teléfono, mostrando rápidamente la imagen a Koko, el cual quedó sorprendido.
Tragó saliva. Wow.
-¿Akane y Draken ya formalizaron? -Preguntó, intentando que su voz no sonara igual de temblorosa como él sentía.
-Ni siquiera, no entiendo por qué están ahí juntos, maldición.
Sanzu se encogió de hombros, mirando a los dos chicos.
-Es normal saben, tipo, tener sexo, no necesitan ser novios para eso.
-¡Sí necesitan! ¡Es mi hermanita!
-Es mayor que tú.
-¡Yo soy mayor que Draken también!
Koko se quedó callado, pensando en eso. Wow, Draken estaba siguiendo adelante. Supongo que... ¿Buena suerte?
