SOLO TU... SIEMPRE TU

CAPITULO 2 "LA VERDAD SALE A LUZ"

Cuando Candy bajaba por las escaleras, se percató de que era el centro de atención de todos, nunca imaginaron que esa humilde niña a las que todos siempre miraron por arriba del hombro, se había convertido en tan hermosa mujer.

Neal al observarla, se apresuró a recibirla al final de esa gran escalera, sin percatarse que un caballero con corte de noble se le había adelantado tomando delicadamente la mano de su futura prometida.

El joven castaño observo quien tomaba la mano de su querida rubia y al ver quien era reaccionó gritando:

Neal: -Suelta a mi prometida maldito vagabundo!!

Albert anonadado ante la belleza de Candy hizo oídos sordos al insulto de Neal y se acerco al frente de todos diciendo:

Williams: -Bienvenidos sean todos a la mansión Andley, para los que no me conocen, que son muchos, mi nombre es Williams Albert Andley, patriarca de los Andley y aprovecho la ocasión para mi presentación frente a ustedes, es un honor – dijo haciendo un reverencia sin soltar la mano de Candy y abriendo la pista de baile.

La joven no salia de su asombro ante semejante momento y solo se dejo llevar a la musica de ese vals, ese vals que le hizo acordar a Anthony y en su momento también a Terry. Finalizada la pieza ,Williams llevo a Candy hacia la Tía Abuela Elroy y ésta solo alcanzó a decir:

Tía Elroy: -Williams!! exijo una explicación!!

Williams: -Las explicaciones me las dará usted por dar órdenes utilizando mi nombre sin mi consentimiento pero en su momento, ahora tengo que seguir con mi presentación y esta de mas decir que ese compromiso queda completamente anulado. -diciendo fuerte para que la familia Leagan escuchasen. La anciana trago en seco sabiendo los problemas que tendría con su sobrino.

Mientras Williams se acerco a uno por uno de los invitados, Archie, Annie y Paty se acercaron a Candy para acompañarla y ver si ella podía explicar lo que había pasado. Ya lo peor había pasado y la rubia había dejado de ser el centro de atención de todos ya que solo observaban a ese joven y apuesto patriarca que se había presentado.

Candy puso al tanto a sus amigos de los hechos acontecidos y de cierta manera se sintió aliviada al ver que una vez mas, su amigo y ahora también tutor, la había salvado recordando las palabras que le había dicho al prometerle que todo estaría bien.

La velada terminó sin contratiempos, los amigos de Candy la acompañaron a su habitación para evitar un cruce con la anciana Elroy..., había sido una noche larga y pensaron que la pecosa merecía un descanso.

Al acostarse fue imposible conciliar el sueño, pensaba como serian las cosas después de semejante revelación. Al no poder dormir bajo a la cocina por un vaso de leche y allí encontró a Williams o Albert o su amigo Bert. No supo como reaccionar:

Candy: -Perdón! dijo ella sorprendida de verlo. -No podía dormir y baje por un vaso de leche.

Él, que la conocía bien respondió:

Albert: -Pequeña, sé que es difícil esto para ti, pero soy yo... Albert, las cosas entre nosotros no tienen porque cambiar.

Las manos de Candy comenzaron a sudar y solo pudo pedirle tiempo para pensar todo lo que pasaba.

Albert: -Yo te daré todo el tiempo que necesites -le dijo como leyendo su mente -y siempre estaré a tu lado como siempre o mejor dicho ahora que no tengo que enconderme estaré a tu lado como nunca.

La rubia sin saber que responder, hizo una sonrisa forzada y se dirigió a sus aposentos y una vez llegada a la cama, una lágrima rodó por su mejilla.