SOLO TU... SIEMPRE TU

Capitulo 6 "BUSCANDO OLVIDAR O SUPERAR"

Luego de un banquete que prepararon para agasajar a Candy, los niños se retiraron a jugar, dejando a las tres mujeres solas para que acomodaran todo.

Señorita Pony: Candy, debes estar muy cansada por el viaje. ¿Por que no descansas un poco mientras que con la hermana María acomodamos aquí?... tu no te preocupes.

Hermana María: -Así es Candy, ha sido un largo viaje, tu habitación de siempre esta lista.

Candy: -No se preocupen por mi, me hace bien estar ocupada, el tiempo pasa mas rápido y me ayuda a no pensar tanto.

Hermana María: -Ha pasado algo Candy para que estés así? Nunca te he visto de esta manera mi pequeña y no podemos no preocuparnos. Sabes que siempre puedes hablar con nosotras y quizás podemos ayudarte de alguna manera.

Candy: -Señorita Pony.... Hermana Maria... no es nada, es solo que es verdad lo que me decían cuando era una niña, a veces crecer cuesta.

Las mujeres se miraron entre si y entendieron que la pequeña que llegó siendo una bebé, había crecido y comenzaba una etapa diferente a lo que había sido la niñez y la adolescencia, esa niña de ojos verdes y rizos rubios, se estaba convirtiendo en una mujer.

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En la mansión Andley se encontraba Williams, sentado en el escritorio junto a esa carta que su pequeña le había dejado. George lo observada mientras tomaba su té, no quería interrumpirlo y sabia que no había palabras para hacerlo sentir mejor, así que solo lo dejo con sus pensamientos. Tan perdido estaba Williams que no se dio cuenta cuando su amigo salio de esa oficina.

-¿Cómo seguiré ahora sin ti, princesa? Si tan solo me hubieras dado la posibilidad de despedirte... de abrazarte, de sentir tu aroma, de acariciar tu rostro.- Pensaba

La mirada denotaba la tristeza que sentía su corazón, pero consolándose solo, se dijo:

-No puedo ser tan egoísta de atarte a mi lado, a este ritmo de vida acelerado y de negocios, a gente que solo vive de apariencias. Tu eres un ser libre que merece ser feliz y yo... yo... yo debo tomar el lugar de jefe de la familia, aunque eso signifique perder mi libertad... perderte a ti mi princesa... mi amor.- se dijo con los ojos cristalizados.

Al rato llegó nuevamente George con una pila de papeles diciendo:

George: -A mal tiempo, darle prisa señor Williams.

Williams: -Así es amigo, gracias por estar siempre a mi lado. Sabes, he tomado una decisión, vamos a viajar a tomar cartas en los asuntos de los negocios del extranjero. Lo mejor es que salga de los lugares que tanto me recuerdan ella.

George: -Me parece bien señor, pero creo que debería de escribirle o buscarla y decirle lo que siente mirándola a los ojos .

Williams: -Confesarle que siempre la amé seria perderla del todo, y aun tengo la esperanza de encontrarla y tenerla a mi lado aunque sea como ella siempre me consideró... su amigo.

George: -Bueno, hemos hecho un gran paso aceptando que esta enamorado de ella. Yo hace rato que lo sabia, pero consideré que lo mejor era darle tiempo para que sea honesto con usted mismo.

Williams: -Tienes razón, George pero no es fácil amar a quien solo te ve como amigo, menos estar consolándola y verla sufrir por otro amor. Yo daría todo por ocupar otro lugar en el corazón de esa mujer. Pero me conformo con estar a su lado y brindarle mi compañía y aliento. Yo era feliz si ella lo era, y a veces verla sufrir me hacia sentir que el corazón se me partía en mil pedazos. Infórmale a la tía Elroy de nuestros planes y prepara todo para nuestro viaje, saldremos el lunes a primera hora para Europa.

George miró a ese joven como sufría, deseando poder hacer algo para aliviar ese dolor, pero lo unico que podía hacer era acompañarlo.

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Los días pasaron en el hogar de Pony. Una mañana mientras Candy se encontraba amasando en la cocina, cuando una de las pequeñas le dijo que tenia correspondencia. La joven entusiasmada limpio sus manos y salio corriendo ilusionada pensando que seria de Albert, pero se encontró con una carta de Archie y otra que no tenia remitente. Cuando abrió la carta de Archie, se encontró con la noticia de la partida repentina de Albert a Europa, para ponerse al frente de las empresas de la familia que se encontraban alli. La pecosa sintió un vacío grande al saber que se encontraba aun mas lejos, pero entendió que ese era su deber. Siguió leyendo la carta y su amigo le comentaba que la salud de la tía Elroy no estaba del todo bien y que estaban recibiendo la visita del médico de la familia muy seguido. Candy quedo muy preocupada por esta ultima noticia, ella a pesar de todo, tenia aprecio y por la respetable dama y no seria capaz de desearle nunca nada malo.

Una vez que terminó con la carta de su amigo, Candy tomo el otro sobre sobre sus delicadas manos y lo abrió, encontrándose con una nota que solo decía:

Tarzan pecosa:

Espero que estés encontrando la felicidad que me prometiste.

Yo lo intento, pero cada día, me doy cuenta que mi felicidad

sería si estuvieras a mi lado, si embargo una promesa es una

promesa y aquí sigo al lado de una persona que no amaré nunca,

pero que se ha convertido en una buena compañera y que

respetaré, no solo por lo que ella es conmigo, sino por que sé, que

eso es lo que querrías tu de mi.

Perdón por escribirte, pero siendo honesto, hay días que no puedo sacarte de mi mente.

Sé feliz Candy y piensa por primera vez en ti antes que los demás,...

Te mereces lo mejor...

Terry

Candy, tomo esa nota junto a su pecho y sintió una alegría grande de saber que Terry estaba bien y que Susana se había convertido en una buena compañía para ese joven impulsivo, pensó que seguramente era cuestión de tiempo para que el se enamorara y pudieran ser del todo felices.

-Prometí ser feliz, y lo seré cueste lo que me cueste.

Mientras tanto en Europa George y Williams no tenían respiro con tanto trabajo y los eventos que organizaban los inversionistas para agasajar al gran empresario. Pero dichos eventos se habían convertido en malos ratos para el hombre rubio, ya que mas que fiestas de bienvenidas, eran de desfiles de mujeres hijas de los empresarios con quienes estaba trabajando. Claro, quien querría desaprovechar la oportunidad de emparentar con el patriarca de la familia Ardley y mas aun quien no quisiera casarse con semejante hombre, tan bien parecido, de cuerpo tallado por los Dioses, mirada como el mar, caballeroso y sin mencionar... millonario.

En uno de esos eventos, organizado por un magnate llamado Richard Jhonson una mujer de vestido rojo carmín, escote pronunciado y con una caballera castaña clara, se acerco junto a su padre y este diciendo:

Sr Jhonson: -Querido Sr. Andley, que dicha tenerlo en mi humilde mansión., estrechándole la mano. -Le presento a mi hija Mariam Jhonson.

Williams: -Muchas gracias Richard, es un gusto señorita.-Dijo besando la mano de hermosa mujer.

Esa noche la dama estuvo cerca del rubio junto a su padre, aprovechando cada oportunidad para entablar conversación con el patriarca Andley. Williams no podía negar la belleza de esa mujer, pero no podía sacarse de la cabeza a esa chiquilla pecosa de la cabeza.

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Aqui, un nuevo capitulo. Espero que sea de su agrado y como siempre espero sus votos y comentarios. Antes de lo que imaginan estaré actualizando

Saludos y gracias por estar