Capítulo 15: por pendejo

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Seguimos con la búsqueda, Merle y yo éramos un equipo excelente ya habíamos recorrido gran parte de la zona pero aún no había rastro alguno de Sofía es como si la tierra se la hubiera tragado.

Íbamos en silencio caminando, nos fijabamos en cada detalle que nos pudiera dar una pista del paradero de la niña pero solo veía árboles y más árboles necesitaba algo rápido ya que la fé se nos estaba acabando.

Si Daryl no fuera tan terco y viniera con nosotros sería más fácil, pero simplemente un día decidió que Merle y yo éramos poca cosa para ir con él, y me molesta porque Merle está dando todo de él para encajar en el grupo y necesita a su hermano pero Daryl ahora solo le interesa Carol, y hablando con Merle tenemos la teoría que Daryl no quiere venir con nosotros porque cuando se perdió de chico no tuvo ayuda de Merle, pero para ser sinceros Merle en ese tiempo ni en su casa estaba así que no estaba enterado de la desaparición de su hermano.

Pero volviendo a la búsqueda revisamos una granja más pero no tuvimos suerte así que regresamos a la granja del señor Hershel.

—¡Cuidado!— sentí un empujón que me dejó en el suelo. Lista para reclamarle a Merle del empujón, paso Nervi, el caballo del señor Hershel a toda velocidad en medio de nosotros.

—¿Ese caballo no fue en el que Daryl salió está mañana?— pregunté. Merle me tomo de la mano para levantarme y empezamos a correr a la granja para saber que pasaba.

Corríamos con todas nuestras fuerzas, Merle tan preocupado como yo no dejaba de correr y eso solo me ponía más nerviosa, solo esperaba que Daryl estuviera bien.

A escasos metros de la granja oímos un disparo que hizo que detuvieramos nuestros pasos, claramente vimos como una persona caía al piso del disparo y rezando para que no fuera alguien del grupo nos acercamos despacio viendo el alboroto pero parecía que ni Merle ni yo podíamos escuchar lo que pasaba al rededor de nosotros.

Reaccione con el sollozo de Merle, ahí fue cuando el sonido me llegó de golpe, estaba Daryl en el suelo con un disparo. Caí de rodillas tratando de alcanzarlo pero los chicos fueron más rápidos y lo cargaron para ir con Hershel. Merle iba igual o peor que yo, ninguno hablaba pero se escuchaban perfectamente nuestros lloriqueos.

Al llegar a la granja Andrea empezó a disculparse y dijo que no sabía que era Daryl y otras disculpas más, harta de su voz la golpeé para que se callara.

Hershel no nos dejó entrar a Merle ni a mi porque lo poníamos nerviosos con nuestro llanto así que estábamos fuera de la habitación con un té para calmar los nervios, la escena era graciosa éramos dos personas mayores llorando como niños con unas tazas de té pequeñas, parecía que nos acababan de regañar.

Pudimos respirar bien después de que nos dijeran que la bala solo había rozado la cabeza de Daryl.

Abrace a Hershel con todas mis fuerzas embarrando de mocos su camisa en el proceso.

—Esta bien hija, no está en peligro— me decía suavemente

—Gracias señor Hershel, no sabe lo feliz que soy, usted es como un abuelo para mí, lo quiero mucho. Nunca nos deje— no podía dejar de hablar, lloraba mientras le agradecía y le decía todo lo que tenía guardado.

A eso yo le llamaba un momento de debilidad.

—Tambien te quiero hija, ahora ve a ver a Daryl pregunto por ustedes— con Merle entramos despacio al cuarto y vimos a un Daryl todo jodido y lastimado.

Parecía dormido, así que nos sentamos al lado de la cama a esperar que despertara.

—Miralo, pobrecito eso le pasa por pendejo, si hubiera ido con nosotros esto no hubiera pasado, pero nunca me hacen caso— y después de mi momento de debilidad venía la furia, estaba molesta por este accidente casi pierdo a Daryl por su terquedad de ir solo.

Daryl DixonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora