La Esposa Del Magnate© {BORRADOR}

CAPITULO XXIII

BASTONE A DONDOLO.

PALO MECEDORA

ANTONELLA.

-Te imaginas bañarte todas las mañana, como dios te mando al mundo, dulce-Alex habla sumergiéndose, en el lago llegamos hace unas horas, la tarde estaba por caer y a todos se nos ocurrió salir a tomar sol y comer un helado mientras tanto. Dylan tomo asiento a mi lado y Alex es como un niño pequeño que nada.

-A veces para tu edad eres muy inmaduro.

-Los mafiosos son tan aburridos-rueda los ojos, las peleas entre los dos. Son la cosa más graciosa de ver.

-No soy mafioso-refuta.

Alex rueda los ojos.

-No entonces que haces.

-Matar.

-Es lo mismo.

-No, yo mato a personas que no merecen seguir quitándole, el aire a los demás, y mira ni faltan hace hay tanta población que yo ayudo a reducirla.

-Eres un mafioso, sin corazón.

-Te diría eso dolió, pero como dices no tengo.

Estas son las peleas de cada día, Dylan no acepta lo que es y Alex insiste es un poco exasperante en algunos momento he pensado que sacara su arma y lo apuntara-la noche pasada tuve un sueño-si eso paso.

La vista del pórtico hacia el atardecer es la cosa mas hermosa que puedo ver.

-A veces creo que tendré, que cuidar a cuatro niños, y no dos-luego un silencio hablo Dylan me observa claramente molesto, nada nuevo.

-No inventes.

-Bueno suelen ser como dos niños.

Alex niega.

-Unos niños muy guapos, claramente. Dulce.

-No soy un niño Alex.

- ¿No? Que eres un viejo cagado en millones, un suggar daddy.

-No estoy viejo, maldito loco.

-Pero mi hablo, el que se tiñe el cabello.

-Hijo de puta.

-Bueno mi mama, era una prostituta así que si lo soy.

-Eres un idiota.

-Si y tu u viejito que se tiñe el cabello.

Y así empieza una pelea más, como cada día desde que somos como dijo. Alex el equipo maravilla ¿por qué? Somo seres maravillosamente cagados en dinero.

Mis días en verdad nunca podrían ser aburridos y es una parte que me ayuda a no llorar porque las ganas cada día solo me consumen y siento que pierdo una parte de mí, y esa parte la tiene el. Lose soy un maldita estúpida por quererle luego de todo, pero quien manda al corazón.

Llevo un día lejos y siento que han pasado años, una parte de mi se aferra a creer que el me buscará, una parte cree que el vendrá por sus hijos.

Talvez irme fue un impulso, pero necesito tiempo para mí. Por primera vez me pongo sobre todo y todos.

Soy un maldito imán para que las relaciones fracasen, primero mi prometido lo encuentro con otra y mi esposo-nunca lo fue-bueno el solo me destruyo.

Malditos seres humanos que no saben amar.

Malditos por usar.

Malditos por destruir.

Malditos por no valorar el amor.