No hay olvido

54 3 28
                                    


La fiesta de esponsales es esplendorosa

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La fiesta de esponsales es esplendorosa. Hay una alegre novia joven, quizás veinte años por mucho, vestida de seda brocada ella danza al centro mientras el novio observa la alegría fingida de los invitados. Este no es un enlace de amor, es como todos los matrimonios antes y después de la memoria de la historia; es un enlace ventajoso para sus partes. Ella es hija de un acaudalado lord con grandes contingentes para la guerra, el que aporta mayor cantidad de hombres a las huestes de Aldous. Alimentos y oro en bastas cantidades para complacer y obtener el favor del rey.

Él, observa la cínica celebración que conviene a todos. Es su enlace y parece no disfrutarlo, su gesto sereno puede interpretarse como solemnidad cuando es insatisfacción. No importa la lozanía de su esposa, joven de cabellos dorados y piel de cera. Es una criatura hermosa que lleva en el corazón la ingenuidad de la esperanza del amor, de dar y recibir para cumplir sus sueños de romance como lo son en los cuentos de los bardos.

Los manjares se derrochan en cantidad y sabores, en olores y decorados. La cuenta de esta boda puede dar de comer al pueblo por días, pero nada es suficiente para este importante enlace donde lores de todo el reino de Tréveris se reúnen, de esta unión se cantarán romances para la posteridad, vivirán en los libros y se crearán leyendas. Hay flores y ramos de lavanda de naturaleza muerta por los rincones para decorar con sus colores y perfumes el banquete. Velas de todos tamaños se encienden, junto a los candiles a lo alto del salón y como obsequio generoso del padrino de bodas; vino, mucho vino.

—¿más vino? — pregunta Kylo a Aldous. Sentado a su lado muestra la misma inconformidad por participar en esta celebración. —no derroche en todos esos odres para que tengas ese humor ¡es tu boda! — menciona a voz baja para que el resto de los sentados en su mesa escuchen. Kylo es el padrino, hombre ideal para llenar una y otra vez la copa del rey.

—¡todo el que resista! — bebe al fondo de su copa, la embriaguez ayudara a pasar la consumación del matrimonio. Que un sequito de intrusos miren como desflora a la bella joven esposa, le causa nauseas. Es un requisito irrefutable que demuestra la virtud de la doncella que será reina. —¿Por qué no te casaste otra vez? — dice después de un gorgoreo áspero.

—mi última opción baila ahí — señala hacia la novia —porque creíste que con mi poder y los recursos de su padre me convertirían en una amenaza para tu reinado — no tiene pudor en decir la verdad. Él mismo tuvo que influenciar a Aldous en aquel baile de presentación de la doncella donde Kylo era el pretendiente no voluntario, elegido por la chica. Su ambición no va más allá de una estabilidad, derrocar un rey significa ganarse enemigos y dividir el reino. No quiere ese tipo de conflictos cuando ya es fugitivo de otros.

—¡eres un hechicero! — justifica como una obviedad —eso jamás lo dije.

—¡no soy un hechicero! — gruñe con sutileza —pero sentí tu miedo.

Kylo leyó su pensamiento en el baile, un susurro al viento para hacer hablar a Aldous quien se adelantó a pedir la mano de la doncella y así Kylo se libró de otro matrimonio que no desea; incrementa el poder de su rey y conserva su lugar de favorito. —sabes que te conviene, la niña es hermosa y con una generosa dote — menciona como un secreto con la mano al lado de su boca.

BRUJA DE TIERRAS LEJANASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora