BRUJA DE TIERRAS LEJANAS

INVIERNO

Solo algunas veces el amor vence sobre su magia, la mayor parte el sortilegio antiguo se evapora con la fusión de sus hijos, han consumado sus deseos y a la vez concluyen la necesidad de Malek por ese encuentro; sus hijos caminan dispersos por el mundo y cuando una mujer y un hombre se reconocen con la misma sangre del dragón, encuentran la obsesión por pertenecerse, se confunde con enamoramiento y muchas veces más como amor incondicional, se enciende el deseo que lleva a la procreación, solo basta una vez para que la vida se haga en la cuna de su vientre, el amor se evapora y después son libres de continuar sin la influencia del hechizo, el poder de su sangre permanece y muchas veces desconocen poseer, esta vez es diferente es el último heredero de la sangre de Malek.

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Él ha despertado confundido por su actuar, se levanta lentamente para no despertarla y así poder pensar en los sucesos, solo es capaz de llegar a una conclusión; repasa cuando fue el momento en que necesito tanto de ella y ahora sin motivos todo se desvanece como la bruma de la mañana que da inicio a la claridad; toma su ropa para vestirse, da vueltas en la alcoba mientras ella duerme en santa paz después de cansar su cuerpo con esa entrega.

Mira por la ventana el viento es fuerte, salvaje y sin piedad deja su fría estela por el bosque, la tormenta invernal está en su punto de inicio, es su primer invierno en estas tierras que desconoce cómo es el clima, viene de otras latitudes muy distintas a la de Irsch, pasa sus dedos sobre su cabeza peinando sus cabellos está atrapado en ese lugar con la bruja que ahora desconoce, en una lucidez sensata ella no es digna de un hombre noble como él, Rey es tan insignificante como Lycisa no existe distinción entre una prostituta plebeya a una bruja campesina; siempre lo tuvo claro ¿Cómo es que ha terminado ofreciendo todo? Ha dado un juramento que ahora lo presiona, para su buena fortuna la tormenta impide cualquier ceremonia en la iglesia, le da el tiempo para pensar en cómo enfrentar esta peripecia extraña.

El frio se cuela mientras él piensa, toma leña para avivar las brasas que se extinguen en la chimenea y vuelven a encender chirrando a la vez que crecen para darles calor, su palma arde y la gira para ver la herida que ya hace una costra, no encuentra más que una sola explicación.

Prepara más infusión de canela para sentarse en una silla mirando directamente a Rey, muy de cerca tanto que puede escuchar el leve silbido que sale de su boca cuando exhala, la observa objetivamente es bella pero no es algo excepcional; Astrid era en verdad hermosa con sus rizos dorados y ojos color mar, su boca era de piñón y la piel cremosa; en cambio Rey es de piel un poco más oscura por la caricia del sol, pecosa y de cabello oscuro, solo sus ojos destacan demasiado expresivos, son dos aceitunas brillantes que lo han mirado con amor y eso es lo que teme que ella de verdad este enamorada de él tanto que fue capaz de todo por tenerlo a su lado, eso en el mejor de los casos en el peor es una manipuladora que se aprovechó de la oportunidad para atrapar a un caballero noble que le ayude a dar un brinco social y además resuelva su pobreza, todo es posible.

Oh Astrid, nadie podrá ocupar su lugar casi santificado por él, pero no se ama a los muertos solo se recuerdan con amor, se resignó hace algunos años a que la ha perdido que debe continuar hacia adelante y superar esa culpa por su abandono en el momento de dar a luz, Astrid todavía duele después de pasar el efecto del hechizo del dragón, el amor por Rey fue una analgesia momentánea provocada por el sortilegio, de verdad sentía necesitarla en ese periodo en batalla durante el sitio, ha proclamado sus brazos su hogar y ha aceptado un trato que no puede revocar, el rey Aldous no es alguien para rechazar o enviar una renuncia, solo la muerte o el cese por parte del rey es la única salida; es demasiado ser fugitivo en dos reinos tan lejanos uno de otro, tener de enemigo a dos reyes es más de lo que puede soportar, está atrapado entre ese trato y el invierno que comienza en esa choza en el bosque.