el caminar lento del peruano que iba ensimismado en sus pensamientos rumbo a su casa, siendo su tortura su propia mente que le recriminaba todo lo que había hecho y todo lo que no había llegado a hacer, llegándose a sentir sucio en muchos casos y tenerse cierto odio en algunos otros
dejó escapar el aire de sus pulmones a la vez que dejaba de caminar, se colocó las manos sobre los ojos y apretó hasta ver ciertas manchas de colores, se sentía completamente frustrado y sin ánimos de nada, mas que todo los últimos días, quizás debería descansar un poco, trabajaba demasiado y su vida estaba bastante alterada aunque no pasara nada, era mas como un apuro que el mismo se ponía sin que nadie se lo dijera, corría de algo o hacia algo como si el tiempo se le fuera de las manos pero no sabia que era a lo que quería llegar o de lo que quería huir, mucho menos sabia desde hacia cuanto tiempo estaba corriendo sin sentido
llegó a su casa, las luces de esta ya estaban apagadas, ya la mayoría estaban en cama por no decir que era el único que seguía despierto, entro en silencio a la casa, prendiendo la luz de la sala para no estar a ciegas, pues su teléfono ya se había quedado sin batería durante su paseo bastante largo
-- ¿estas bien hijo? -- pregunto el alfa asomándose de la cocina con un vaso de agua en la mano, el menor se dio la vuelta y asintió mientras se quitaba la chaqueta y la dejaba en el gancho junto la puerta -- bien, ahora la verdad Perú -- dijo en un tono de voz mediano pero firme, el albirrojo soltó un quejido bajo y se acerco a su padre
-- estoy... cansado, es... es todo... -- dijo cambiando sus palabras, no sabia como afrontar ese tipo de conversación, no era bueno para expresar ciertas cosas, el alfa mayor dejo el vaso sobre la mesilla de café y tomo a su hijo por hombros antes de abrazarlo, el menor no tardo en corresponder el abrazo de su padre, sintiendo como se iba alivianando un poco su mente y su pecho, dejando escapar un suspiro de alivio, como si ese abrazo fuera una ola fresca en medio de la arena caliente
el alfa mayor se quedaba ahí, abrazando a su hijo, acariciando su espalda, sintiendo como de a poco dejaba de estar tenso, y sintiendo una leve humedad en su hombro, sabiendo que el alfa menor estaba soltando pequeñas lagrimas, se quedaron ahí abrazados, el alfa mayor consolando en silencio al alfa menor que se sentía cómodo en los brazos de su padre, como cuando era pequeño y tenia problemas, solo iba a refugiarse en su padre
-- lo siento... -- se disculpo el menor separándose del abrazo y secándose las lagrimas de manera rápida, el mayor le tomo las mejillas y se las acaricio, quitando las pocas que aun quedaban y las pequeñas que aun salían
-- discúlpate cuando no tengas sentimientos, no cuando los tengas... -- le dijo con calma y una sonrisa sutil, el menor asintió y agacho la cabeza con cansancio -- ¿quieres hablar? -- le pregunto sobando los hombros de su hijos, este negó con la cabeza
-- solo necesito dormir papá, estoy bien... -- dijo el peruano, el mayor asintió no conforme con la ida, conocía demasiado bien a su hijo como para creerle esa mentira, aunque piadosa era una mentira que lo llegaba a lastimar, la mirada seria de su padre el peruano soltó un suspiro -- ahora es muy tarde, luego hablamos, puede esperar, no te preocupes tanto -- le dijo con una pequeña sonrisa, se sentía mal tener que comportarse así siendo ya un adulto, pero es que no había una edad para poder dejar de depender o estar triste o cansado, solo eran cosas que pasaban y ya
-- esta bien, haré como que te creo hijo -- confesó el mayor, el peruano menor asintió y le dio un abrazo rápido a su padre, como diciéndole que si confiaba en él, pero que o estaba listo para hablar, era también su forma de decirle que lo quería y de que le agradecía el gesto -- yo también te quiero cariño... -- le dijo el alfa a su hijo, este solo apretó el abrazo, confirmando las palabras de su padre, se separo del abrazo y se fue a su habitación teniendo una pequeña sonrisa mas aliviado de haber sacado un poco de tensión que tenia encima, quizás mas seguro de que podía tener a alguien de confianza con quien poder hablar
se acostó en la cama con pesadez, sin molestarse en quitarse los zapatos o la camisa del trabajo, dejando escapar un quejido de cansancio al sentir como su espalda se relajaba, cerro los ojos con cansancio quedando dormido casi de inmediato, quizas deberia volver con su psicologa, hace bastante que tenia la intención de volver, aunque sea solo para sacar todo y recibir un concejo mas neutral
.
.
.
.
.
.
.
.
.
la tarde arribo y el peruano esperaba a su amiga en el parque, el café en su mano y el delicioso aroma de la bebida le distraía un poco, dejando de pensar en el omega y en que esta mañana lo abrazo sin motivo alguno, o eso sintió el peruano, seguro se estaba persiguiendo un poco, pero podía jurar que un poco del aroma del menor se quedo en su ropa
saco su teléfono, marcando el numero de la alfa, que para su sorpresa no respondio rapido como siempre, pudiendo escuchar algunos jadeos, creyendo de que seguro venia corriendo por la demora, fue ahí cuando estaba por hablar cuando escucho la voz de la pareja de la estadounidense en un tono demandante, como suplicandole
-- Bonito... -- le dijo la estadounidense a su amigo, teniendo la voz algo agitada, el latino no dijo nada, esperando a que la contraria siguiera hablando, ya entendiendo el porque de su demora y ahora posible cancelación -- no voy a poder ir, China entro en celo y tuve que ir por ella a su trabajo, lo siento -- le dijo en un tono agitado, el peruano se rio por lo bajo
-- lo intuía cariño, las dejo... seguir agrandando su familia -- respondió en un tono divertido, escuchando la risa baja de su amiga y de fondo los quejidos y demandas de la omega, corto la llamaba y guardo el celular, quizás un tiempo solo no era nada malo, quizas y lo necesitaba
hola, y no lo se ah
qsy, voten si les gusto, los amo vaiiiii
