XXXIII

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Septiembre 2021.

Eleonor.

Desde que me enteré de aquello, vivía en un sinvivir hasta que viera que él apareciera por redes sociales.
Derek me había dicho que estaba bien, que seguía echándome de menos. No me echaba la bronca ni mucho menos, solo me decía lo mismo que Daniel e Irma.
Yo lo echaba de menos, muchísimo. No habia noche que no llorara hasta quedarme dormida. Incluso me había creado una cuenta falsa de Instagram para seguirle. Sabía que iba a ser difícil, pero Tom era mi vida.
Lo amaba cada día más a pesar de estar alejada de él.

El día veinticinco, mi corazón volvió a latir con cierta normalidad.
Él hizo un live y se veía bastante bien. Diría que incluso más guapo que de costumbre. Suspiré de puro alivio cuando dijo que todo estaba bien, que él estaba perfectamente.
Terminó el live, y después de llorar de alivio, me duché y me fui para el trabajo.

Los días pasaban con la rutina de siempre, trabajo y más trabajo. La abuela decía que descansara un poco, que no hiciera tantos turnos en la cafetería, pero no podía. Trabajar me mantenía la mente ocupada y así, al menos, no pensaba tanto en Tom.
Intentaba ver las redes sociales lo menos posible, mantenía las mías sin usar, solo aquel Instagram por ver como iba en su vida. Sabía que estaba mal por lo nuestro y me dolía, pero siempre había algo que me impedía volver a allí.
Ese sentimiento de malestar y de pensar en todo lo que pasó, hacía que me quedara aquí, al lado de los abuelos.
- Eres la tía más tonta que existe- me decía Irma cuando la desesperaba con mis malos pensamientos cada vez que hablábamos por teléfono.
Pero no podía pensar en otra cosa.
Mi relación con Tom estaba destinada a esto, a terminar, por mucho que me costara asimilarlo después de tantos meses separados.

Octubre llegó, y los días seguían pasando como rutina. Por las noches, antes de dormir, escuchaba una canción que me recordaba a Tom, "El amor coloca", de Mónica Naranjo. Era una artista española que me encantaba desde pequeña.
Él era el ángel que decía la canción.
Mi ángel.
Y, aunque no esté con él, lo seguiría siendo.

Octubre 2021

Irma

Por poco me da un infarto cuando recibí aquella llamada.
¡Daniel Radcliffe me había llamado! Y lo mejor, era que quería quedar conmigo. Ya sé que me dijo que quería hablar sobre Tom y Eleonor, pero, iba a quedar con él.
Le dije que viniera a mi cafetería, que aquí estaríamos tranquilos. Iba a cerrar unos días en octubre, pues una de las chicas con las que trabajaba se iba a casar y necesitaba unos días, así que decidí tomar esos días de vacaciones.
Y allí me encontraba, con Daniel Radcliffe frente a mí, ambos con una taza de café, hablando sobre nuestros amigos.
- No pueden seguir así, Irma- dijo Daniel suspirando.- Ambos se quieren demasiado para que esto siga así.
- Pienso lo mismo. Estoy harta de hablar con Eli para hacerla entrar en razón, pero es terca como ella sola.
- Tom es igual, pero él si quiere que esto siga adelante. No soporto verlo así.... Ha pasado por demasiadas cosas como para que le pase esto.
- Tom es un amor- reconocí.
Daniel me miró alzando las cejas y rió.
- Tenemos que planear algo para que estos dos  vuelvan a reencontrarse. No pueden acabar así, no lo pienso aceptar.
- ¿Tienes algo pensado?- pregunté agarrando mi taza.
- Tengo que hablar con Tom sobre la próxima grabación que tenemos que hacer por el especial de Harry Potter. Será una buena excusa para decirle algo sobre el tema.
De repente, se me ocurrió algo.
- Creo que Tom debería de hablar con los padres de Eli de nuevo. Ellos deberían de ver cómo está Tom y van a comprender que no pueden ocultarle donde está. Se me hace un nudo en el estómago cada vez que él me pregunta por Eleonor y no le puedo decir nada.- dije soltando la taza de nuevo.
- Me parece una idea genial, Irma- exclamó Daniel agarrando mis manos.
Lo miré a él y luego a nuestras manos.
Si no tuviera novia...
- Podría decirle a Tom, más bien sugerirle que hablara con los padres de ella. Ya va siendo hora que todo se arregle.
- Pues si. Es momento que sean felices. Si él no se atreve a ir solo, yo lo acompaño- admití.
Él asintió.
Y si, tenía razón, mi mejor amiga no se merecía nada de lo que había pasado.
Aquí estaría yo para todo lo que pudiera ayudarla y si tenía que ayudar a Daniel para que ellos volvieran, haría hasta lo imposible.

Daniel.

Salí de la cafetería de Irma bastante satisfecho. Habíamos acordado que yo hablaría con Tom.
Sólo esperaba que todo se arreglara pronto. No me gustaba verlos así.
Había visto muchos días llorar a Eleonor a través de la pantalla del ordenador, cada vez que hablábamos por Skype.
Más de una vez, cuando hablaba con Tom por llamada, se mostraba decaído y sabía que, más de una vez, se aguantaba las lágrimas.
Por esa razón, estaba más que decidido hacer lo posible para que volvieran a estar juntos.

Tom.

Mediados de octubre y yo estaba a nada de volverme loco. No sé cómo ya no lo había hecho a estas alturas de mi vida con todo el tema de Eleonor y nuestra separación.

Un día, mi agente me llamó para confirmarme lo que ya sabía desde hacía un tiempo, mi participación en el especial por el veinte aniversario de la primera película de Harry Potter.
Iba ser una buena oportunidad de reencontrarme con los compañeros de rodaje.

Estaba a punto de salir de casa para dirigirme a la casa de mis padres para almorzar, cuando la pantalla de mi móvil se iluminó y mostró el nombre de Daniel.
-¿Qué pasa, colega?- pregunté al descolgar.
- ¿Cómo estás, Tom?- respondió él también con una pregunta.
- Vamos, que es mucho decir- respondí.
- Oye, Tom, ¿tú también vas al especial, no?
- Si, mi agente me llamó hace unos días para confirmar- dije.
- Va estar bien volver a unirnos. Lo malo que no tenemos ninguna escena solos tu y yo para hablar de Potter y Malfoy. No he visto nada en el guión.- bromeó.
- Si. No querrán que nos matemos allí - dije con media sonrisa.
- Puede ser... Bueno, ¿Cómo lo llevas todo? El vamos de antes no me parece bien- dijo Daniel y noté como se puso serio.
Suspiré.
- Voy a volverme loco, Dan. No sé nada de ella, nadie me quiere decir nada. Sé que me lo ocultan por petición de ella, pero esto es desesperante. No puedo sacarla de mi cabeza.
- ¿Por qué no hablas con sus padres?- sugirió Daniel.
- Ya lo hice en su momento y no me quisieron decir nada- bufé.
- Habla con Irma, ella podría ir contigo. Es su mejor amiga y quizás ella podría ayudarte en hablar con los padres de Eli. Tom, los dos estáis sufriendo y no es justo.
-¿Sabes algo de ella?- pregunté esperanzado.
- Sólo sé que está igual o peor que tú. Nos queréis como jamás he visto a nadie quererse. Sé que me intenté meter de por medio entre vosotros, pero ella te prefirió a ti. Eres como un hermano, tío. No podría hacerte daño y ahora quiero ayudaros a que volváis.- admitió Daniel.
Inspiré hondo.
Parecía lógico que hablara con sus padres. Parecía buena idea y si Irma me acompaña, sería más fácil.
- Está bien, hablaré con sus padres. Llamaré a Irma para venga conmigo.
- Eso es- sabía que estaba sonriendo al otro lado del teléfono.
- Gracias, amigo- dije
- Para eso estamos.
La verdad, es que tenía razón.
Quizás hablando con sus padres de nuevo, después de tantos meses, podría solucionar esta situación.
La esperanza es lo último que se pierde.


Bueno, solo quería deciros que van a ver un par de capítulos de transcurso antes que Eleonor y Tom se reencuentren.
Falta muy poquito.
Mientras tanto, disfruten!!!
❤️❤️

Noches de Plata (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora