—Yo.
—Si tú quieres quedarte, quédate, pero yo no. Solo quiero irme.
—Tú mientes.
—¿Qué?
—Yo le pertenezco y él es mío.
—¿Qué? —miró hacia otro lado— esta chica está loca.
—Me molestó que te diera a Bunny —dijo ella.
Morgan dio un gruñido— solo por el conejo.
—Tú no entiendes nada. Él me escogió para estar a su lado. Yo le pertenezco.
—Solo diré que estás loca —dijo Morgan.
—Claro que no. Yo le pertenezco. Yo lo amo.
—De acuerdo, no diré nada —dijo Morgan un poco confundido.
—Pero tú tienes que estar muerto.
—¿En serio otra vez? —dijo Morgan.
Se lanzó a él, pero antes de herirlo, alguien le agarró la mano.
—¿Qué mierda estás haciendo? —dijo Ann muy molesta.
—Será mejor que me sueltes.
—No quiero que te acerques a él.
—¿Qué? —dijo Morgan muy sorprendido.
—En serio, tienes que ser una tonta —dijo Ann.
—Él tiene que estar muerto.
—Estás loca. Él no te hizo nada.
—Solo quiero que se aleje de él.
—Diría lo mismo, diría que le pidieras que se alejara de él, pero sé que no puedes. Él tendrá sus motivos, y si no te los ha dado, es porque no quiere. —dijo Ann, muy molesta.
Vio a Morgan con una mirada asesina— juro que te mataré.
—¿En serio crees que voy a tener miedo de tu mirada? Si una persona quiere hacer algo, lo hace. Como yo —respondió Morgan
—¡Qué! —exclamó la chica, mientras Morgan se acercaba para darle una patada en la pierna— maldito, te mataré —replicó muy molesta.
—¡YA BASTA! —gritó Jason, muy molesto.
Al verlo, la chica se alejó de ambos.
—Solo quiero que él se vaya —dijo la chica.
—Ya basta —repitió Jason.
—Tú no sabes quién es él —dijo Ann
Mirando a Jason— ¿por qué lo defiendes? —y añadió un gruñido— ¿qué es de ti?
—No se trata de defenderlo, se trata de que no puedes ir por ahí atacando a la gente sin razón alguna. Además, como te dije antes, él tiene sus motivos para estar aquí y no te los tiene que explicar a ti. No te pertenece, nadie le pertenece a nadie, eso es absurdo. Y si sigues con esta actitud violenta, no me dejarás más opción que cortarte la puta cabeza. Así que te sugiero que te calmes y te vayas a casa antes de que las cosas empeoren para ti.
—Eso no es de tu incumbencia —respondió Jason.
—Claro que es de mi incumbencia. Te pertenezco, te amo, y soy como ustedes. Soy una creepypasta, quiero entregarme —dijo la chica.
—Sería mejor que te entregaras al loquero —dijo Morgan, un poco molesto.
—¿Qué? —preguntó la chica.
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El Vínculo de Morgan y María [saga: la flor divina #1]
Fiksi PenggemarLa lluvia caía con intensidad y los rayos iluminaban la oscura bodega. En el suelo se encontró una persona sonriendo, indiferente a lo que le pudiera suceder. Para él, los demás eran unos monstruos asesinos que merecían morir. Su único deseo era que...