Un Último Adiós ✓©

Cap 23: La bella y la bestia

Capitulo dedicado a Clarissa por ser una de mis primeras seguidoras activas en la historia. Gracias❤

Hable mucho con la doctora Bella, me gustaba hablar con ella, pues me hacía muy bien por algo era mi psicóloga.

Pasaron los días, no había hablado mas con Alexander, Robín se había convertido en su mejor amigo esto era increíble.

-------------------------------------------------------------------------------------------------------------

31 de diciembre a las 5pm nos encontrábamos todos en la sala bebiendo y comiendo galletas que había hecho Mónica.

- bueno este año fue difícil, pero realmente estuvo bien – dijo Robín.

- si claro, como no, lo dice el que casi se muere – dijo Jonny.

- JAJAJA, Jonny te pasaste – dije a lo que Robín le respondió con una carcajada.

- bueno 2014 te fuiste – decía Mónica mientras comía uvas y bebía.

- para Hannah fue un año muy lindo, pues conoció al amor de su vida – dijo Robín y todos se rieron.

- ah no vale ¿no van a dejar el chalequeo? Que amor de mi vida nada – dije negando con la cabeza.

Ding... Ding...

8pm sonaba el timbre mientras estábamos todos en la sala hablando y bebiendo.

- ¿Estas esperando a alguien? – pregunte a Robín, mientras él me miro con una sonrisa.

- yo no, anda a ver quién es – dijo con una sonrisa a lo que yo solo me levante para ir a ver, esperaba fuera Moly, iba también a pasar el 31 con nosotros, pero Robín me había dicho que llegaba como a las 10pm porque estaba trabajando y apenas eran las 8.

Cuando abrí la puerta mi sorpresa fue al ver a un hombre alto, musculoso, con un perfume que me hipnotizo, y esos hermosos ojos verdes que tanto amaba.

Alexander.

Quede embobada mirándolo, estaba demasiado guapo, venia vestido con una camisa manga larga negra, realmente adoraba que se vistiera así, las camisas manga largas se habían vuelto mis favoritas, con un pantalón gris de vestir y su reloj.

- hola – dijo el dándome un beso en la mejilla, volviendo a hipnotizarme con su perfume, note que el también quedo embobado por mí, pues porque obvio yo no quedo atrás, estaba hermosa también.

Narra Alexander:

Estaba afuera en la puerta del apartamento de Hannah decidiéndome en si entrar o no, pues Robín me dijo que viniera a pasarla con ellos, pero me daba pena pues Hannah no me había dicho nada y teníamos días sin hablar, después de lo que paso el 25 en la mañana.

Me vestí muy elegante, estaba hoy decidido hacer algo que tenía pensado desde hace mucho tiempo, vestía una camisa manga larga negra, que aunque Hannah no lo aceptara, adoraba que me vistiera así, con un pantalón gris de vestir, mi reloj y mi perfume, que sabía que enloquecía.

Llevaba conmigo una botella de champagne para brindar a las 12 y un pan de jamón, estaba muy nervioso no sabía cómo actuaria ella, pero como a mí me gustan las cosas sin miedo me dispuse a tocar el timbre.

Ding... Ding...

Después de unos segundos ella abrió, realmente me quede deslumbrado con tanta hermosura, era una belleza, esta mujer era hermosa.

Llevaba un vestido negro largo con un escote en el pecho y tenía una abertura en la pierna, le quedaba bellísimo, casi igual que el día que la conocí, ella llevaba uno igual negro pero corto con una chaqueta, bueno continuemos, tenía unos tacones negros también, el cabello planchado se lo había pintado, ella tenía el cabello negro y se había hecho unas mechas de blanco y pues se había maquillado hermosa, había notado que se maquillaba muy bien, un maquillaje profesional y la boca roja, como el día que la conocí.