Sᴛʀᴀɴɢᴇʀs | ᴇʀᴇᴍɪᴋᴀ ᴀᴜ

41. Estrellas

Ha pasado alrededor de 6 meses desde que Historia filtró aquella información. Eren sigue yendo a terapias junto con Mikasa; esta última acabó con su tratamiento hace 1 mes.

Isayama ha controlado demasiado bien los comentarios de los demás. Muchos fans apoyaron a ambos chicos en sus decisiones.

Claramente algunos comentarios negativos seguían ahí, pero eran más los positivos que apoyaban a ambos.

—¿Cómo vas con Eren? —preguntó Armin mientras reposaba su cabeza en el hombro de Mikasa.

—Bien, me dijo que quería decirme algo hoy. Necesito arreglarme para hoy a las 6:00pm —dijo mientras recargaba su cabeza en la de Armin que se encontraba reposando en su hombro.

—Pues mucha suerte —levantó su cabeza para poder enderezarse.

—Tendré que empezar a alistarme —estiró sus brazos para poder relajar sus músculos.

Armin asintió y se paró del sofá de la casa de Mikasa. Últimamente Eren estaba demasiado misterioso incluso a ojos de su mejor amigo.
Sabía que tramaba algo, pero no iba a presionarlo a decir cosas que no le correspondían preguntar, o bueno, eso piensa él.

—Iré a ver a Jean, quedamos de ensayar las últimas escenas de esta segunda parte. No puedo creer que Attack on Titan esté a punto de terminar —habló Armin.

—Lo sé, es todo una vida -soltó un suspiro. Iba a seguir hablando, pero una llamada le entró a Armin.

Armin contestó al instante. Sabía que era Jean apurándolo a llegar porque el castaño siempre fue muy poco paciente.

—Es Jean, tengo que irme, Mika —se acercó a ella para darle un beso en la cabellera—. Me cuentas qué era lo que Eren quería.

—Obvio —sonrió mientras veía como Armin caminaba hacia la puerta de su casa para después salir de ella, dejando a Mikasa sola.

Mikasa soltó un suspiro antes de pararse del sofá y caminar hacia su habitación para poder alistarse.

Eren 💞

Hola, preciosa ❤

Mark pasará por ti para traerte al lugar donde quedamos <3

Nos vemos en un rato 💞

Mikasa sonrió mientras se sentaba en la esquina de su cama. No tarda en contestarle y decirle que ahí lo veía.

Estaba nerviosa, su estomago revoloteaba como si estuvieran las famosas mariposas en el estómago.

Unos minutos después se metió a bañar para poder estar puntual. Lavó su cabello con sumo cuidado y usó aquel jabón del que estaba enamorada por el olor tan agradable que desprendía.

Se sentía plena, tan plena que su pecho le decía que algo bueno pasaría hoy.

Salió de la ducha y comenzó a secar su cuerpo para iniciar a cambiarse.

Eligió un bonito vestido negro que resaltaba sus hombros y su clavícula; colgó un collar en forma de rosa en su cuello para sentirse más bonita.

Estaba lista, pero no podía dejar de caminar de un lado para el otro por los nervios. A los 10 minutos escuchó el auto de Mark y supo que tenía que bajar.

Tomó su bolso y se vio en el espejo una última vez para asegurarse de que estaba lista. Bajó las escaleras demasiado rápido, casi corriendo.