32. La decisión está en tus manos

629 58 56
                                    

(12 horas antes)


Isayama se encontraba en su estudio mientras hablaba con Historia.

—Historia, te cité aquí porque necesito hablar contigo —puso unos papales frente a ella.

—¿Qué pasa? —cuestionó la rubia.

—Quiero que seas sincera, lo más sincera posible —suspiró—. ¿Has dado información confidencial a los periodistas?

Historia se sorprendió y trato de disimularlo.

—No, y-yo no he dicho nada —sus manos empezaban a sudar.

Isayama la miraba con atención, queriendo que ella confiese sus acciones.

—¿Segura?

Historia asintió algo dudosa.

Isayama abrió los papeles que anteriormente había puesto frente a ella; agarró una imagen y se la expuso a Historia.

—¿No eres tú? —volvió a preguntar.

Claro que era ella. Era una fotografía donde Historia estaba tomando café con uno de los reporteros más amarillistas que podían haber.

—N-No soy yo, Isayama —mintió.

—Y vuelves a mentir —pasó a la siguiente imagen donde claramente se veía la cara de Historia—. ¿Me dirás que no eres tú?

Historia no sabía que decir.

—Es un viejo amig-

—Claro, un viejo amigo que constantemente se encarga de atacar a Mikasa y curiosamente, cuando Mikasa y Eren fueron a París para despedirse de su amiga, todos los periodistas estaban ahí y el que tuvo la exclusiva fue él —todo era demasido claro como para que Historia lo negara—. No tienes excusas, Historia. Tú fuiste la que informaba todo ¿tanto es tu odio hacia Mikasa?

Historia suspiró con enojo.

—Sí, es detestable y no puedo trabajar con ella —cruzó sus brazos.

—¿Entonces no quieres trabajar con ella nunca más?

—Nunca más —confirmó.

—Perfecto. Estás despedida.

—¡¿Qué?! —se paró rápidamente de su asiento.

—El contrato se tuvo que haber renovado hace 2 semanas, pero no lo hiciste así que puedo despedirte —se sentó en su silla.

—No puedes hacerme esto.

—Y tú no debiste haber roto mi confianza hacia ti. ¿Crees que yo podría seguir trabajando contigo después de esto? Por supuesto que no.

—Prometo no hacerlo de nuevo.

—No me interesa. Afectaste a la privacidad de tus dos compañeros. No sabes lo duro que fue para Mikasa y Eren aquella noticia y todavía tener que lidiar con periodistas maliciosos es lo peor.

—Yo lo lamento, en serio —a este punto estaba a punto de llorar.

—Lo lamento demasiado, Historia —dijo Isayama—. Solo quedaban dos escenas para que terminaras de grabar, pero no te preocupes, encontraremos tu remplazo —sus palabras eran algo duras.

—D-Déjame terminar las escenas —dijo Historia, mientras juntaba sus manos en forma de suplica.

—Tu sueldo estará completo, pero gracias a la infracción que cometiste al contrato, no podrás usar como referencia el trabajo que hiciste aquí en Shingeki No Kyojin —eso era lo más duro—. Si te atreves a poner nuestro nombre como referencia, les diremos todos y cada una de las cosas que hiciste.

Sᴛʀᴀɴɢᴇʀs | ᴇʀᴇᴍɪᴋᴀ ᴀᴜDonde viven las historias. Descúbrelo ahora