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Sintiendo un dolor en su estómago producto del hambre, ____ abrió el refrigerador e inspeccionó los compartimientos en busca de algo que cocinar

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Sintiendo un dolor en su estómago producto del hambre, ____ abrió el refrigerador e inspeccionó los compartimientos en busca de algo que cocinar. A pesar de haber decidido no volver a preparar algo de "comida" no tenía muchas opciones disponibles, así que decidió tomar el riesgo de cocinar. Miró atenta localizando los ingredientes necesarios para hacer curry. Llevó las cosas a la barra de granito y se dispuso a buscar un video que le indicara paso a paso, segundo a segundo, como cocinar el platillo.

Todavía se sentía extraña al tener en sus manos el antiguo teléfono de Levi, como si usarlo fuese algo inapropiado, aunque el teléfono no contuviera ninguna información del azabache pues lo había restablecido a modo fábrica.

Por error oprimió el icono equivocado en la pantalla principal, anotó mentalmente organizar el orden de las aplicaciones de la forma en que estaba acostumbrada. Entró a los contactos esperando encontrar la leyenda "no hay contactos" como había ocurrido con la música, la galería, las notas, etc. Contrario a lo que pensó, en la lista de contactos aparecieron tres nombres.

Erwin.

Hange.

Levi.

En sus labios se formó una disimulada sonrisa que delataba su alegría por tener el contacto de sus dos amigos, al igual que mostraba su agradecimiento hacia Levi por grabarle los contactos. No esperaba que también archivara su número, pero no le molesto. Aprovechando el momento, grabó el número de Farlan para completar su lista de contactos más importantes.

Retomó la tarea de buscar el video de cocina y seleccionó el que tenía más vistas. Observó con suma atención los primeros minutos que le indicaban la forma en que debía comenzar, remangó sus mangas y puso manos a la obra. Mientras cocinaba sintió que las cosas fluían sin problema, incluso el olor que emanaba de la olla de aluminio le parecía increíble. Cuando todo estuvo listo se preguntó si realmente había hecho eso y por qué hizo una cantidad tan grande como si fuese a alimentar a una familia de cinco.

Inmediatamente una idea llegó a su mente, tomó el teléfono y seleccionó el icono de llamada en dos contactos. Ante el tercer icono se detuvo abruptamente.

—Él ya está en una cena —se dijo, alejando el dedo del círculo verde

Guardo de nuevo el teléfono en su sudadera y salió de la cocina dispuesta a esperar el tiempo dicho en sus anteriores llamadas. En su camino a la sala observó la puerta de entrada con suma atención.

—¿Me preguntó que estará cenando? —murmuró—. Seguramente algo muy caro y delicioso

Llegando al sillón se dejó caer con cuidado, recargando la cabeza en el respaldo, mirando el techo blanco.

𝐘𝐨𝐮 𝐎𝐧𝐥𝐲 𝐘𝐨𝐮Donde viven las historias. Descúbrelo ahora