Con Su Música

Capítulo 1: Primer Encuentro

Lucía

Otro día más del verano sin nada en lo que estar ocupada, esto está siendo demasiado aburrido. El pueblo es muy tranquilo y no hay mucha actividad de personas estos días. Los chicos se van para casa de sus familias en otros pueblos o a sus casas de verano cerca de la playa. Al contrario de mi que me estoy derritiendo del calor en mi habitación mientras escucho música de mi portátil. Miró afuera de mi ventana y hay un sol que irradia con fuerza. Mis padres trabajan mucho como para pasar tiempo del verano juntos. No he ido a la playa hace mucho y me hace mucha ilusión este verano.

Malena prometió escribirme para decirme si podía pasar por su casa y estar un rato juntas. Ella es mi mejor amiga desde que tengo uso de razón. Vive a unas cuantas casas de la mía. Nuestros padres se conocen de la universidad y cuando se mudaron aquí crecimos juntas prácticamente. No nos separamos desde entonces y siempre a estado a mi lado.

*mensaje de Malena*

Como si la hubiera llamado con el pensamiento, me llega un mensaje de mi mejor amiga.

Mejor Amiga <3
Luci ven rápido a mi casa, tengo algo muy interesante que contarte.

Lucía
Voy enseguida

Mientras tomaba mis zapatos debajo de la cama me golpeé con la parte superior de mi cama.

es que eres estúpida

No es el momento adecuado consciencia.

Baje por las escaleras muy rápido para llegar a la cocina y tomar unas galletas antes de salir. La casa está vacía, mis padres están en el trabajo. Los dos son médicos en un hospital en la ciudad. La mayoría del tiempo están en guardias o reuniones, siempre me quedo sola cuidando de mi "humilde hogar". No me preocupa mucho que no pasemos tiempo juntos, la verdad siempre a sido así estoy acostumbrada. Ellos trabajan y siempre me cuidan las niñeras mientras no estuviera en la escuela. La última niñera que tuve fue cuando tenía 15 años. Ahora no hace la diferencia solo tengo 17 pero no necesito de una.

De camino a casa de mi mejor amiga, noto que en la casa de al lado hay un carro de estos que traen la mudanza. ¿Vendrán a vivir personas ahí?. Me fijé en algo muy peculiar de todas las cosas que están bajando, dejaron en el portal una guitarra de lo más bonita.

Toco la puerta de casa de Malena e inmediatamente ella la abre como si llevara tiempo ahí esperando y me hace subir corriendo hasta su habitación.

—Me puedes decir que pasa—le digo casi sin poder respirar.

—Por si no lo notaste tengo vecinos nuevos—ok eso es muy obvio acabo de ver la mudanza mientras venía.

—¿Y que tiene eso de interesante?

—El hijo de ellos es el interesante—bueno eso no me lo esperaba—Son una pareja que al parecer tienen un hijo de nuestra edad o más grande.

Mientras ella me contaba todo lo que había podido ver en las pocas horas que llevaban sus nuevos vecinos con la mudanza, me acerqué un poco a la ventana para mirar hacía la casa de enfrente. Lo que no me esperaba ver a aquel mencionado chico del que ella me contaba tan desesperadamente. Traté de mirar lo más disimuladamente posible hacía donde se encontraba. Ahí estaba el un chico alto de casi 1.80, algo delgado y el pelo azabache, rizado en las puntas. Iba vestido completamente de negro con unos jeans y una camisa con el logo de Nirvana en el centro.

Yo seguía parada en la ventana observándolo tomar su guitarra en lo que subía las escaleras para entrar a su casa. Antes de hacerlo se tomó la molestia de mirar hacía arriba. Nuestras miradas chocaron por unos segundos. Llegaron a mí, la luz electrisante de sus ojos azules haciéndome sentir atrapada en ellos. Me puse tan nerviosa que traté de alejarme de la ventana y en el intento -se escucha un estruendo- caí al suelo bruscamente. Sólo podía oír la risa de mi mejor amiga al fondo.

—¿Podrías dejar de reírte y ayudarme?—enseguida notó mi tono molestó y se levantó de su cama para ayudarme a levantarme del suelo.

—Pero, porque te caíste mujer. ¿Estabas mirando a mi vecino? Pídele su número no seas tonta—ella está loca ciertamente.

—En serio Malena, ni le conozco solo nos miramos y ya quieres que le pide su número.

—Si tu no lo haces yo lo haré.

no vendría nada mal

Shh cállate

Estuvimos en su cuarto hablando y viendo películas de romance por un rato. Se estaba haciendo tarde y tenía que ir a mi casa para preparar la cena por si me padres llegaban. Malena se había quedado dormida con la segunda película, solo la dejé ahí descansando y me marché.

Al salir de su casa no dude ni un segundo en mirar a la casa de al lado. Tenía curiosidad por saber quién era ese chico. Mientras inspeccionaba con la mirada cuidadosamente me di cuenta que estaba sentado en su ventana con la guitarra en sus manos. No puedo negar que fue la imagen más sexy que vi de el hasta el momento. Justo en ese instante el notó que lo estaba mirando y comenzó a reírse. Su risa se veía demasiado perfecta.

—¿En algún momento vas a dejar de acosarme?—su voz dulce, a la vez ronca se escuchó en mis tímpanos haciendo temblar las piernas al instante.

—Yo no te estoy acosando, solo pasaba por aquí porque me dirijo a mi casa—le dije algo molesta.

—Desde que llegué no paras de mirarme y creo que es algo incómodo.

—¿Hay algún problema con eso?—no acabo de creer lo que dije.

—No la verdad es que no, pero al menos deberíamos presentarnos. No es bueno para tu trabajo de acosadora no saber el nombre de tu víctima—es enserio lo que está diciendo

—Anja—solté sin más.

—Mi nombre es Hugo.

es bueno saberlo

—¿Y el tuyo es?

—No te interesa.

Sin más me fui y dejé a ese chico sin palabras en su ventana.

enserio me a llamado acosadora, pero que se cree

Seguí de camino a mi casa con solo una cosa en mi cabeza, Hugo. Increíblemente no podía sacarme de la cabeza a ese chico luego de ese encuentro en su ventana.

Necesitamos saber más de él

Creo que concuerdo contigo conciencia.