Capítulo 21: La Fiesta De Malena

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Hugo

Estoy en casa de Lucía y aún es de noche. Miró el reloj en la mesita de noche y son las 3:00 am. Abro mejor mis ojos y la veo dormir a mi lado, esta imagen es hermosa podría quedarme viéndola así todo la vida.

enserio tú, has dicho eso

No puedo creer que luego después de tanto que he pasado esto se haga realidad. El sueño de estar con una chica la cual me gustara y quisiera estar conmigo me parecía imposible. Hasta que llegó ella y no se lo digo nunca pero no quiero perderla, estoy haciendo las cosas bien solo por ella.

Me levanto a por algo de tomar, tengo mucha sed y no había bebido nada hidratante desde que llegué. Bajo las escaleras para dirigirme a la cocina y noto como la luz del televisor está encendida. No hago incapie en averiguar porque ya estoy completamente seguro de quien se trata y no sería conveniente acercarme. Me limito a ir deprisa a la cocina y en la nevera tomar una botella de agua.

estaba necesitando esto

Antes de subir me encuentro con Isabel, que no duda en acercarse a la cocina cuando supo de mi presencia en ella.

—Pero si miren quién está aquí, el hermoso novio de mi prima—dice acercando sus manos a mi pecho y quedando enfrente de mi.

—Podrías dejar de hacer contacto, a tu prima no le gustaría—quité sus manos de encima de mi.

—Aún no sé cómo estás con ella, realmente no le veo nada especial—hace un gesto de desagrado—No me voy a cansar de decir que escogiste a la prima equivocada.

—No, estoy seguro de que escogí perfectamente, tu prima es la niña más hermosa que eh visto.

—Pero aún así es muy pequeña y no sabría darte lo que te mereces—diciendo esto hizo que diera pasos hacía atrás y mi cuerpo quedará pegado a la meseta del comedor.

—¿Qué sabes tú de eso?

—Mucho, acaso crees que así tan inexperta podría lograr cosas que una chica mayor sabe hacer—comenzó a rozar mis piernas y con eso subir hasta el bulto de mis shorts.

esta mujer está loca

—Isabel no me toques y aléjate de mi—diciendo esto la aparte de enfrente y comencé a caminar hasta las escaleras.

—Algún día te darás cuenta del mal que estás haciendo Huguito.

No podía creer lo que había pasado, no le importaba para nada que yo fuera el novio de su prima. No podía estar mucho tiempo cerca de ella, eso le haría daño a Lucía. Volví a recostarme a su lado y trate de olvidar todo lo que había pasado esta noche.

Sábado

6:00 pm

Ya pasó un día de ese fatídico encuentro en la cocina de Lucía con su prima. No quise decirle nada para que no se pelearán por mi causa, al final de todo ella se quedaría ahí por un mes y no sería bueno que estuvieran molestas la una con la otra.

Tengo que pasar a recoger a mi novia para traerla a casa de Malena, hoy dará una súper fiesta por el inicio de clases. Seguramente sus padres no se encuentran en casa como siempre y se puede sentir la fuerte música desde temprano retumbar. Me contó que comenzaría con los preparativos desde muy temprano, porque sería la mejor fiesta de todo el año. Ella puede rifarsela así, tiene dinero suficiente para hacer una mega fiesta.

Pero la idea de tantos chicos reunidos, tomando, fumando y seguramente haciendo otras cosas no me parece muy bien. No es que yo no haya ido a fiesta al contrario, mi experiencia me dice que estas fiestas adolescentes no traen nada bueno. Sólo le llevo pocos años a todos esos chicos, pero a su edad cometí muchos errores en fiestas así. Se cómo piensan y a lo que se están exponiendo. Lo que pase por mis malas decisiones no se lo deseo a ninguno de ellos.

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